(Minghui.org) Mi esposo fue arrestado en 2016 tras ser denunciado por unos estudiantes de secundaria, por haber hablado con ellos sobre Falun Gong. Cuando la policía allanó nuestra casa, envié pensamientos rectos para que no encontraran nada con lo que inculparnos. De hecho, no se llevaron el disco duro que utilizábamos para guardar información relacionada con Falun Gong. Sabía que Shifu nos había protegido.
Después de 14 días de estar detenido, mi esposo regresó a casa. Sólo dos meses después, la policía volvió y se lo llevó detenido de nuevo, con la excusa de que habían encontrado vídeos relacionados con Falun Gong en su teléfono celular. La policía dijo que su caso era muy importante, dando a entender que pedirían una dura condena contra él.
Me asusté y no sabía qué hacer. Un practicante me animó a aumentar la frecuencia del envío de pensamientos rectos y a tener fe en Shifu y así lo hice.
Pasaron tres meses. No recibí ninguna noticia sobre el caso de mi esposo. Entonces, un pariente que trabaja en el departamento de policía me pidió que sobornara al juez con 20.000 yuanes (unos 2.700 USD) y el tribunal contrataría a un abogado para mi esposo y pagaría los honorarios legales. Preocupada por mi esposo, no lo pensé dos veces y acepté.
Más tarde lo comenté con una compañera practicante. Ella me recordó que no debía cooperar con el mal. Me di cuenta de que estaba equivocada. Así que llamé al abogado designado por el tribunal y le pregunté si declararía culpable o inocente a mi esposo. "Por supuesto que una declaración de culpabilidad", respondió el abogado.
"No hemos cometido ningún delito y nuestra fe está protegida legalmente. Me temo que tendré que despedirlo". De este modo, despedí al abogado y busqué otro en Beijing que estuviera dispuesto a presentar una declaración de inocencia para mi esposo.
Mi pariente se enojó al enterarse de que había despedido al abogado de oficio. Dijo que el juez también estaba muy disgustado. Había llegado a un acuerdo con el juez para que mi esposo fuera puesto en libertad inmediatamente después de la audiencia, pero ahora había arruinado su plan. También me culpó de haber perjudicado a mi esposo.
Le insistí en que el abogado que había contratado lo declararía inocente. Pero mi pariente seguía enojado, diciendo que eso no serviría de nada. Soportando la presión de mi pariente y del tribunal, trabajé con el abogado de derechos en la defensa de mi esposo.
Cuando el juez decidió aplazar un mes la audiencia de mi esposo, aproveché el tiempo para estudiar el Fa y enviar pensamientos rectos. Soñé que mi esposo aprendía a memorizar los poemas de Shifu y que un juez con sentido de la justicia se encargaba de su caso. Sabía que había hecho las cosas bien y Shifu me animaba.
El día de la audiencia, invité a mi familia y amigos a asistir a la sesión. Esperaba que pudieran escuchar el argumento de defensa del abogado y comprender que estamos siendo perseguidos. El abogado hizo una exposición contundente y el juez no supo qué responder. Al fin y al cabo, sabían muy bien que la persecución no tenía ninguna base legal.
En este tiempo, también envié el número de teléfono del juez al sitio web Minghui. Muchos compañeros le llamaron y le aclararon los hechos, los cuales, él sí entendió. Antes de la sentencia de mi esposo, el juez pidió hablar conmigo en su despacho. Me dijo que mi esposo saldría en libertad en dos semanas. Le agradecí su amabilidad y su sentido de la justicia.
El juez cumplió su palabra. Cuando mi esposo volvió a casa, me dijo que había aprendido a recitar los poemas de Shifu, exactamente como en mi sueño. Dijo que el Fa de Shifu reforzaba enormemente sus pensamientos rectos.
A través de esta experiencia, fui testigo del poder de enviar pensamientos rectos y tener fe en Shifu. Mientras hagamos cosas basadas en el Fa, Shifu nos protegerá.