(Minghui.org) Una mujer de 55 años de la ciudad de Yangquan, provincia de Shanxi, fue juzgada el 27 de septiembre de 2023 por su fe en Falun Dafa, una práctica cuerpo-mente perseguida por el Partido Comunista Chino desde julio de 1999.
El abogado de la Sra. Zhang Ruiping de Beijing defendió su inocencia y dijo: “Mi cliente es una ciudadana respetuosa de la ley que no violó ninguna ley al seguir los principios de Falun Gong de ser una buena persona. Debería ser absuelta y puesta en libertad inmediatamente”.
La Sra. Zhang compartió cómo Falun Gong le permitió vivir una vida libre de enfermedades. Sufrió problemas estomacales, enteritis (inflamación del intestino delgado) y dolor en las axilas y la ingle durante años y ningún tratamiento la ayudó. Pero todos sus síntomas desaparecieron después de que empezó a practicar Falun Gong en abril de 1999. Su mal carácter mejoró y pudo llevarse bien con su suegra. Sin embargo, después de que comenzó la persecución a Falun Gong en julio de 1999, ella se convirtió en un objetivo por defender su fe.
La Sra. Zhang fue arrestada por última vez el 19 de abril de 2023. Su hijo acababa de abrir la puerta esa mañana para ir a trabajar cuando el capitán Wu Guoguang y algunos otros agentes de la División de Seguridad Nacional del Distrito de Cheng, que habían estado esperando afuera, irrumpieron.
La Sra. Zhang fue llevada primero al Centro de Lavado de Cerebro de la ciudad de Yangquan y trasladada al Centro de Detención de la ciudad de Yangquan el 5 de mayo. Se le emitió una orden de arresto formal el 19 de mayo y fue acusada formalmente a mediados de agosto.
El Tribunal del Condado de Pingding en la ciudad de Yangquan celebró una audiencia sobre el caso de la Sra. Zhang el 27 de septiembre. El procurador la acusó de "usar una organización de culto para socavar la aplicación de la ley", un pretexto estándar utilizado para incriminar y encarcelar a los practicantes de Falun Gong.
El abogado de la Sra. Zhang refutó la acusación en su contra y enfatizó que ninguna ley promulgada en China criminaliza a Falun Gong ni lo etiqueta como una secta.
Las pruebas de la acusación incluían 2.000 yuanes en billetes confiscados de la casa de la Sra. Zhang y una máquina laminadora que alguien afirmó haber visto a la Sra. Zhang usar para laminar material informativo sobre Falun Gong.
Los billetes tenían mensajes de Falun Gong impresos como una forma de crear conciencia sobre la persecución a Falun Gong, y de ninguna manera violaron ninguna ley ni causaron daño a nadie. La Sra. Zhang y su abogado desafiaron al procurador a presentar los billetes ante el Tribunal para que todos vieran qué mensajes impresos en ellos tenían contenido dañino. El procurador rechazó la solicitud. Su “testigo” y la “máquina laminadora” tampoco aparecieron en el Tribunal, cuando normalmente las pruebas de la acusación deberían haberse presentado durante el juicio.
La audiencia duró poco más de una hora y asistieron más de diez familiares y amigos de la Sra. Zhang.
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