(Minghui.org) Soy un agricultor de 60 años y el sostén de mi familia de seis miembros.

Perdí la audición en 2015. Como no me dolía y estaba ocupado con el trabajo agrícola, lo ignoré durante más de seis meses. Después de la cosecha de otoño, mi familia me llevó al Primer Hospital de la Ciudad, donde me diagnosticaron un cáncer nasofaríngeo.

Pronto me ingresaron en el Departamento de Oncología del hospital y me quedé allí todo el invierno pasando por la primera ronda de radioterapia y quimioterapia. El tratamiento costó más de 100.000 yuanes (15.100 dólares), lo que no solo agotó nuestros ahorros, sino que nos endeudó.

Hacia el final del año, me permitieron volver a casa para celebrar el año nuevo con mi familia, pero el médico que me atendía me insistió repetidamente en la importancia de que volviera al hospital después del año nuevo para recibir la segunda ronda de quimioterapia: "Tienes que volver; si no, todo lo que hemos hecho hasta ahora habría sido en vano".

La idea de que el cáncer era incurable pesaba mucho en mi mente, así que tuve un año nuevo sombrío.

El hospital me llamó después del año nuevo y me instó a volver cuanto antes para terminar el tratamiento. Pero 100.000 yuanes era una cantidad enorme de dinero para nosotros, sobre todo cuando ya estábamos muy endeudados. No estaba dispuesto a pedir más dinero prestado porque nunca podríamos pagarlo.

Si el cáncer era incurable, ¿por qué gastar más dinero para tratarlo? Desanimado, decidí no recibir la segunda ronda de quimioterapia. Mi esposa trabajaba entonces fuera de casa como niñera, así que le dije que dejara su trabajo y viniera a casa. Ella me cuidó muy bien y me cocinó comida deliciosa todos los días, mientras yo no hacía otra cosa que esperar a morir.

Falun Dafa cura mi cáncer y me da una segunda vida

Un día conocí a unos practicantes de Falun Dafa que vinieron a nuestro pueblo a instalar la televisión por satélite para la gente. Me hablaron del milagroso poder de curación de Falun Dafa tras enterarse de que yo tenía cáncer. Mi esposa vio la esperanza y les pidió que me enseñaran los ejercicios. Añadió: "Que Dafa le ayude, así podré salir a ganar dinero para mantener a la familia". Por aquel entonces, nos esforzábamos por llegar a fin de mes.

Unos días después, los practicantes me dieron un ejemplar de Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa. Mientras leía el libro, me di cuenta de que se trataba de cómo ser buenas personas. Después de leerlo una vez, me di cuenta de que era un libro del Cielo que podía salvar a la gente y beneficiar a la sociedad.

Seguí leyendo Zhuan Falun y, unos doce días después, el pus y la sangre me corrían por las orejas. Pensé que tal vez el cáncer había empeorado, pero no me importó demasiado, ya que estaba completamente absorto en el libro. El pus y la sangre cesaron unos días después.

Mi hija me llevó al hospital veinte días después para una revisión, pero el médico nos dijo que ya no había tumor y que ya no necesitaba quimioterapia. Estábamos muy contentos. Mi cáncer se curó simplemente porque leí Zhuan Falun y creí en sus enseñanzas. El Maestro Li, el fundador de Falun Dafa, me sacó de la muerte y me dio una segunda vida. ¡Falun Dafa es tan increíble!

Desde entonces, leí repetidamente Zhuan Falun, y me esforcé por vivir según los principios de Dafa de Verdad-Benevolencia-Tolerancia para convertirme en una buena persona con conciencia y moralidad.

Tres años más tarde, me sometí a una nueva revisión y el médico me confirmó que estaba completamente curado. Todo el mundo estaba asombrado cuando les dije que me había curado simplemente leyendo Zhuan Falun.