(Minghui.org) Un vecino vino a nuestra casa para tener una charla informal con nosotros un día de la primavera de 2021.

Mi esposo le preguntó: "¿Cuál es la mejor manera de tener dinero en efectivo en casa?".

El vecino dijo: “Nadie guarda dinero en la casa principal. Toda la gente esconde su dinero en una cabaña separada”.

Mi esposo dijo: “Tienes razón. Hace unos años, un ladrón irrumpió en nuestra casa por la puerta principal. Abrió el cajón de nuestro escritorio y robó 1.500 yuanes”.

El vecino dijo: “De hecho, nunca debes poner dinero en la casa principal, siempre en la cabaña”.

Unos días después, una compañera practicante trajo 10.000 yuanes (1.510 dólares) para pagar los materiales de aclaración de la verdad. Puse el dinero en una bolsa de tela y lo guardé en un armario en la cabaña antes de ir a regar mis cultivos. Varios días después fui a buscar el dinero. Para mi sorpresa, la bolsa no estaba. Busqué en todos los lugares de la cabaña, pero fue en vano. Para una campesina pobre, 10.000 yuanes no es poca cosa. Busqué una y otra vez en todos los rincones, pero no encontré el dinero. Frustrada, recordé la conversación entre el vecino y mi esposo. Empecé a sospechar que se había llevado el dinero.

A medianoche, después de enviar pensamientos rectos, noté que había una luz encendida en la casa del vecino. Pensé que podría estar contando el dinero. Un fuerte resentimiento vino a mi mente. Por otro lado, no tenía ninguna evidencia para acusar al hombre.

Pensé en toda la amabilidad que mi esposo y yo mostramos a nuestro vecino. A pesar de su mala higiene personal, nunca lo menospreciamos. Como es soltero y muchas veces se salta las comidas, lo invitamos a comer. Poco a poco se convirtió en un invitado frecuente.

Compartí esto con la practicante que trajo los 10.000 yuanes.

“Por favor, cálmate”, dijo, “no culpes a los demás. Se suponía que el dinero se usaría para salvar a la gente. Si de hecho tomó el dinero, habría incurrido en una enorme deuda de yeli (kármica). No puedo dejar que cubras toda la pérdida. Compartiré la mitad”.

Profundamente conmovida, dije: “Perdí el dinero, no debes pagarlo”.

Pero rápidamente me trajo 6.000 yuanes (906 dólares) y yo retiré 4.000 yuanes (604 dólares) del banco. Juntas recuperamos el dinero perdido e hicimos el material de aclaración de la verdad.

Pero todavía me sentía mal por todo el asunto. Mientras tanto, el vecino exhibió un comportamiento inusual. Es un hombre tímido y nunca saluda a la gente. Pero se volvió bastante amistoso conmigo, siempre saludándome, incluso desde la distancia.

Unos días después, dejó de visitar nuestra casa. Pero vino una vez más y devolvió 200 yuanes que había pedido prestados hace unos años.

Mi sospecha creció y me convencí más de que él había robado el dinero.

Después de compartir mis pensamientos con la compañera practicante, ella dijo: “Todos los practicantes de Dafa tienen habilidades sobrenaturales. Debemos mirar esto con pensamientos rectos y no con resentimiento. Debemos animar a su lado sabio a hacer lo correcto. Deberíamos pedirle al Maestro que potencie nuestra capacidad para recuperar el dinero”.

Eso realmente me ayudó a mejorar mi cultivación. Dejé cualquier pensamiento negativo y comencé a enviar pensamientos rectos, esperando un buen resultado.

Empecé a revisar el gabinete todos los días, pero todavía no vi dinero. Me di cuenta de que todavía tenía una fuerte búsqueda para recuperar el dinero. Después de leer el Fa, renuncié a ese apego.

Unos días después, al mediodía, mientras leía el Fa, escuché el sonido de una puerta cerrándose en la cabaña. No presté mucha atención y continué mi estudio del Fa. Después de leer un capítulo, fui a la cabaña y vi una bolsa en el gabinete donde antes se guardaba el dinero. Era la misma bolsa en la que había puesto el dinero en efectivo. Abrí la bolsa y encontré dentro 10.000 yuanes en efectivo.

Me emocioné mucho y dije: “Gracias Maestro por ayudar a su discípula”.

Después de un cuidadoso recuento, descubrí que los billetes del nuevo fajo no eran los mismos que el dinero perdido. La compañera practicante me dio dos fajos, 5000 yuanes (755 dólares) cada uno, todos billetes de 5 yuanes. El dinero estaba recién sacado del banco y atado con un cinturón de papel. El dinero devuelto estaba en 10 paquetes, de 500 yuanes cada uno, atados con gomas elásticas. Los billetes estaban sucios y olían mal, pero la cantidad era exactamente de 10.000 yuanes.

Quiero expresar mi gratitud al Maestro. Con su guía, recuperamos el dinero perdido y ayudamos al vecino a evitar una enorme deuda de yeli (kármica).

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