(Minghui.org) Durante la actual campaña "Reducción a Cero" del Partido Comunista Chino (PCCh) contra Falun Gong, muchos practicantes y sus familiares han sido intimidados o se les ha ordenado escribir declaraciones para renunciar a la práctica.

La campaña apunta a obligar a todos los practicantes de Falun Gong, incluidos los de la lista negra del gobierno, a renunciar a su fe. Las autoridades locales de todo el país iban con frecuencia de puerta en puerta para "ocuparse" de los practicantes locales.

La mayor parte de los practicantes que fueron blanco de estas acciones, pudieron resistir el acoso con pensamientos rectos y no cooperando con las autoridades. Ellos les aclararon los hechos a los acosadores, sobre Falun Gong y les aconsejaron que se retiraran del PCCh y de sus dos organizaciones afiliadas.

Pero algunos practicantes se asustaron por el acoso y no quisieron enfrentarse a él. Buscaron formas de evadirlo. Como resultado, sus familiares cooperaron con las autoridades en diversos grados, complicando así el ambiente de cultivación de los practicantes.

Si mientras enfrentamos el acoso constante, todos podemos verlo desde una perspectiva diferente, la situación podría no ser la misma. Me gustaría compartir aquí mi experiencia reciente.

Un día, mi esposo recibió una llamada telefónica de un hombre que decía ser un agente de policía de nuestra comisaría local. El policía dijo que visitaría mi casa para hablar conmigo.

Por el acoso y la persecución sufridos en los últimos años, mi esposo estaba bajo un gran estrés mental por la inminente visita. Se puso ansioso y se quejó conmigo con palabras irracionales. Le consolé y le dije: "No tienes por qué tener miedo. En el pasado nuestra familia ha pasado por muchas cosas, y hemos llegado hasta hoy solo porque el Maestro Li (el fundador de Falun Dafa) ha velado por nosotros. No hay que tener miedo. Solo quieren hablar conmigo. De hecho, hace tiempo que quiero hablar con ellos. No tienes que decir nada, solo observa tranquilamente cuando ellos vengan".

Esa tarde, a la hora anunciada, preparé un té. Aparecieron dos personas. Uno era el jefe de la comisaría y el otro el oficial que llamó a mi esposo. Fui cortés y les serví el té. Les pedí que anotaran sus nombres y números de teléfono en mi cuaderno. Les dije: "A lo largo de los años puede que haya habido muchos malentendidos y haya faltado la comunicación entre nosotros. Ya que hoy están aquí, vamos a tener una buena conversación". Estuvieron de acuerdo.

Yo hablé primero: "Antes de empezar, me gustaría aclarar algunos puntos. En primer lugar, lo que los medios de comunicación han informado a lo largo de los años y la comunicación interna que ustedes han recibido, ha sido toda información falsa contra Falun Gong. Ustedes han estado tratando con practicantes de Falun Gong durante muchos años. Estoy segura de que todos ustedes saben quiénes somos de verdad. En segundo lugar, Falun Gong enseña a la gente a ser buena, siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-tolerancia. Tercero, ninguna ley ha criminalizado a Falun Gong en China. Todos ustedes han estudiado la ley. Estoy segura de que la conocen mejor que yo".

El oficial de policía que llamó a mi esposo dijo: "Hemos estudiado la ley, así que reconocemos todo esto. El Ministerio de Seguridad Pública y la Oficina General Central enumeraron catorce tipos de cultos, entre los que no se encontraba Falun Gong. Pero había un documento del Ministerio de Seguridad Pública y otros dos documentos de 1999 que señalaban a Falun Gong".

"¿Tiene esos documentos?", pregunté.

"Ahora no”.

"El Ministerio de Seguridad Pública es un organismo encargado de hacer cumplir la ley, no un órgano legislativo, y cualquier regulación que dicte no puede ser aplicada como ley", le dije.

El policía dijo: "No hablemos de esto. Vamos a seguir el procedimiento". Entonces empezó a preguntarme mi número de identificación y de teléfono, y si tenía coche, moto o bicicleta.

Le miré seriamente y le dije: "Usted ha venido aquí hoy porque practico Falun Gong, ¿verdad? ¿De qué quiere hablar si no hablamos de Falun Gong? Sus preguntas no tienen nada que ver con lo que hoy se supone debemos comunicar (que es Falun Gong). ¿Me está tratando como una sospechosa? Si ese es el caso, primero tiene que mostrar las pruebas".

Rápidamente lo rechazaron. "No, no, solo estamos aquí para hablar contigo hoy".

Les dije: "Hoy les estoy tratando como mis invitados, y sinceramente quiero aclarar los hechos y hacer claros algunos malentendidos. Para lograrlo, tenemos que hacerlo desde el respeto mutuo, ¿cierto?".

Dijeron que sí.

El oficial de policía se esforzó en mostrar sus conocimientos sobre taoísmo, budismo, medicina, filosofía, etc. Dijo que la razón por la que antes no pudo obligar a los practicantes de Falun Gong a renunciar a sus creencias, era porque su propio nivel de conocimientos era demasiado bajo. También mencionó el nombre del Maestro y dijo que ahora él sabía más que el Maestro.

Le pedí que respetara a mi Maestro. "Como nuestra conversación se basa en el respeto mutuo, espero que no hable de mi Maestro en ese tono", le dije. Él admitió en silencio lo que yo había dicho.

Después él dijo: "Falun Gong enseña Verdad-Benevolencia-Tolerancia, también lo hacen el budismo y el taoísmo. Ustedes no son los únicos".

Les dije: "Verdad-Benevolencia-Tolerancia son valores universales. Los principios del Budismo y del Taoísmo se derivan del Dafa universal y enseñan los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia en diferentes niveles".

Él continuó diciendo: "Falun Gong habla de curar enfermedades y mejorar la salud, lo que está relacionado con la ciencia médica. Pero también habla de filosofía. Entonces, ¿a cual rama pertenece Falun Gong? Zhuan Falun tiene contenido del Budismo, del Taoísmo y de todo. Es simplemente un lío. Si no me crees, tráelo aquí y te lo puedo señalar".

Me di cuenta de que sus limitados conocimientos le impedían pensar con claridad y que no me sería posible explicarle todo con claridad en ese momento. Entonces le dije: "¿Cómo puedes comparar un huevo con el universo? ¿Has leído Zhuan Falun?".

Dijo que sí.

Le pregunté cuántas veces lo había leído. Dijo: "De tres a cinco veces".

Le dije: "Yo no soy la persona más inteligente. Después de leer el libro durante más de 20 años, solo he llegado a tener un entendimiento muy limitado de él. Aunque seas inteligente, tres o cinco veces no es suficiente. Después de leer el libro otras tres o cinco veces, podemos volver a hablar". Rápidamente respondió que no era necesario.

Le dije: "Nadie puede ignorar los efectos milagrosos de Falun Gong en curar enfermedades y mejorar la salud. Cuando nuestro Maestro dio conferencias en la Fundación China para la Justicia y la Fundación para los Valientes Voluntarios Chinos, en aquel entonces, Él curó al 98% de las personas que fueron heridas en sus valientes acciones. El efecto fue evidente para los pacientes. Falun Gong también se dio a conocer en la Exposición de la Salud Oriental en 1992 y 1993, y pronto se extendió por todo el país. Había cientos de millones de personas que lo practicaban antes de la persecución de 1999. En aquella época, la gente hacía los ejercicios de Falun Gong en los parques y en las calles por las mañanas en todo el país". Él dijo que sabía todo esto.

Luego, él y su jefe hablaron de fulano que murió después de practicar Falun Gong y de zutano que enfermó pero no tomó medicamentos.

Les di mi opinión personal sobre este tema. "Los médicos en el hospital tratan a la gente, ¿verdad? ¿Y los médicos se enferman?". Dijeron que sí.

"Entonces, ¿el médico toma medicamentos cuando está enfermo?", dijeron que por supuesto.

"¿Podemos decir que el médico que toma la medicina no morirá?", pregunté.

"El médico podría morir", dijeron.

Entonces les dije: "Si el médico muriera, ¿podríais decir que no era bueno ejerciendo la medicina? No se puede decir eso. He aquí otro ejemplo. Un profesor puede haber enseñado a cientos de alumnos a lo largo de los años, pero no todos sus alumnos son admitidos en la universidad. ¿Diría usted que el profesor no es bueno? No podemos verlo así. Muchas personas practican Falun Dafa y no están bajo ninguna forma de administración. Simplemente estudian el libro voluntariamente. No hay ninguna garantía de que, quien estudie el libro nunca morirá. Y no se puede decir que Falun Gong no es bueno por eso".

Continué: "Analicemos este fenómeno. Durante décadas, en nuestro país, si el gobierno decidía derribar a alguien, desde un ciudadano común hasta el presidente del país, o cualquier grupo, un editorial en el Diario del Pueblo, más las voces críticas en los principales medios de comunicación, podían derribarlos en menos de tres días. En cambio los practicantes de Falun Gong se han mantenido firmes después de soportar más de 20 años de brutal persecución, la práctica se ha extendido a más de 100 países y regiones de todo el mundo. ¿Qué le dice esto? ¿No vale la pena reflexionar?". En ese momento, el jefe de policía se levantó y quiso marcharse, y el oficial me pidió que fuera a la comisaría para hablar con ellos más tarde. Luego se fueron.

Reflexión

Con la rectificación del Fa llegando a esta etapa, el clima cósmico ha cambiado. Muchos represores se enfrentan a sanciones de la comunidad internacional. Mientras tanto, en el ámbito nacional, los procuradores y las fuerzas policiales tendrán que rendir cuentas por sus acciones (ilegales) que se remontan a 30 años atrás.

Si cambiamos nuestra mentalidad, en lugar de pensar que nos persiguen, los tratamos como personas a las que hay que salvar, podríamos aclarar compasivamente la verdad y evitar que participen en la persecución.

Es como dijo Shifu:

“La multitud de seres es rescatada, los corazones se aclaran gradualmente

Los policías se despiertan y no obstaculizan cuando ven” (Se ve benevolencia, Hong Yin III).

Este incidente de la Reducción a Cero, puso al descubierto muchos de mis apegos y defectos. Me sentí afortunada por no haber sufrido acoso antes de la visita de la policía. Después de que mi esposo recibiera la llamada telefónica, mi apego al miedo se agitó.

Me pregunté: "¿Vienen solo porque practico Falun Gong?". Entonces pensé que, después de todos estos años de templanza, todos los discípulos de Dafa no tenemos ningún problema en decir a la gente la verdad básica de Dafa. No es fácil encontrar a la policía para aclararles la verdad. Debo hablar bien con ellos cuando vengan, sin nada que temer. Cuando mi miedo a ser perseguida desapareció, ya no tuve miedo a su visita.

En el artículo para compartir experiencias en Minghui.org: Elimina la noción de "ver para creer", el practicante dice: "Como una broma, si pudieras ver en otra dimensión al mal conduciendo a la policía hacia ti como si fueran un grupo de patos, o manipulándolos como marionetas para perseguirte, ¿todavía les tendrías miedo? En absoluto".

No debemos dejarnos confundir por la apariencia superficial y falsa. Shifu nos dio la capacidad de eliminar el mal. Al mismo tiempo que eliminamos los elementos malignos que manipulan a la policía, también debemos cambiar nuestra mentalidad humana. Debemos dejar de reconocernos como víctimas de la persecución, y en su lugar mirar el asunto con pensamientos rectos.

Hacerlo así no solo se ajusta a los principios del mundo humano, sino que también impide que las viejas fuerzas nos persigan y que la policía haga cosas malas, lo que a su vez les permitirá escuchar la verdad y dejar de participar en la persecución.

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