(Minghui.org) Soy una profesora de instituto jubilada que era respetada por sus compañeros de trabajo, sus alumnos y sus padres.
Mi cuerpo estaba hinchado desde que tenía 17 años. Los médicos me hicieron muchos análisis de orina y descubrieron que no contenía proteínas. Mi enfermedad empeoró. Con la ayuda de los padres de un estudiante, me hicieron un examen en un conocido hospital. Se descubrió que la parte de conexión entre mi uréter y mi riñón estaba deformada de forma congénita. Por lo tanto, la orina no podía evacuarse sin problemas, lo que a su vez hacía que se acumulara líquido en mis riñones, lo que provocaba una hinchazón en la parte baja de la espalda. Esto me obligó a jubilarme a los 51 años. Los responsables de la escuela, los colegios, los alumnos y los padres lamentaron mucho que dejara mi puesto de profesora.
Sin embargo, era el momento adecuado para mí. Empecé a practicar Falun Dafa en marzo de 1996. Un practicante de Dafa me envió un ejemplar de Zhuan Falun, y después de leer el libro comprendí la razón fundamental de mi enfermedad.
El Maestro dijo:
“… ¿por qué el hombre tiene enfermedades? La causa fundamental de que tenga enfermedades y de todos los infortunios es el yeli, ese campo de yeli de materia negra. Ese pertenece a las cosas con la característica yin, pertenece a las cosas no buenas. Y esas entidades no buenas también son cosas yin, todas pertenecen a lo negro; por eso son capaces de subirse, pues este ambiente les resulta propicio. Esa es la causa fundamental por la cual uno se enferma y es la fuente principal de las enfermedades" (Séptima Lección, Zhuan Falun).
No sentí dolor en la parte baja de la espalda cuando leí el libro, y la hinchazón desapareció. No comprendí que el Maestro estaba purificando mi cuerpo. Le dije a mi esposo: "¿Por qué deja de dolerme cuando leo el libro?".
Me dijo: "Entonces sigue leyéndolo". Él sabía lo que había sufrido, y gastó mucho dinero en medicinas, pero fue en vano. Más tarde, cuando estuve detenida en la estación de policía y en la oficina del comité de la calle, porque hablé a la gente sobre Dafa, mi esposo dijo a la gente de allí que incluso había pensado en donar su riñón si el mío fallaba, pero que eso no era necesario después de que yo empezara a practicar Falun Dafa. La encargada de la oficina del comité de la calle me dijo después que se emocionó hasta las lágrimas.
A través de las enseñanzas del Maestro, llegué a comprender que el propósito de la vida es volver a nuestro origen, y que tenemos la misión y la responsabilidad de salvar a la gente.
Conseguir que mi hermana renunciara al PCCh
Me llevó trece años conseguir que mi hermana renunciara al Partido Comunista Chino (PCCh) y sus organizaciones juveniles. Ella es amable y tenía un trabajo decente como estadística senior. Una vez la llamé en 2005 utilizando un teléfono público para evitar que la vigilaran, y la convencí de que hiciera las tres renuncias. En ese momento aceptó con gusto. Sin embargo, al día siguiente me volvió a llamar y me dijo que me olvidara de lo que había dicho el día anterior.
En 2007, fui a su casa. Ella seguía sin querer renunciar al Partido, pero el resto de su familia sí. En 2018, le escribí una larga carta para aclararle la verdad, pero seguía sin conmoverla. Al año siguiente, volví a ir a su ciudad. Me senté con ella y mantuve una larga conversación. Cuando hablamos de la magnitud de la corrupción dentro del PCCh, estuvo de acuerdo conmigo. Dijo que no había nadie en su dirección que no estuviera corrompido, y que algunos de ellos ya habían sido castigados. Yo respondí: "¿Cómo puede alguien formar parte de ellos?".
Ella contestó: "Renunciaré al Partido", y eligió un gran futuro para sí misma.
El exlíder del PCCh de la escuela abandona al Partido
Un practicante de Dafa, que también es mi compañero de trabajo, y yo fuimos a la casa de un exlíder del PCCh de nuestra escuela. Queríamos hacerle saber la verdad sobre Falun Dafa y preguntarle si quería renunciar al Partido. Él era el decano de educación, luego vicedirector y finalmente líder del PCCh cuando yo trabajaba en la escuela. Así que trabajaba bajo su dirección.
Empecé la conversación hablando de la relación predestinada, pero no aceptó nada de lo que le dijimos, y al final agitó los brazos para echarnos. Más tarde, cada vez que tenía la oportunidad de reunirme con él, hablaba de renunciar al PCCh.
Un día de 2019, fui a su casa y mantuvimos una larga conversación. Hablamos de lo corrupta que es la sociedad actual. Él tenía dos hijos que resonaban profundamente con eso, así que añadí: "En realidad son la sociedad y el PCCh los que corrompieron a nuestros hijos. ¿No es mejor renunciar?". Esta vez estuvo felizmente de acuerdo.
Una estudiante mía me trajo una lista de 18 personas que querían renunciar al PCCh. Ella creció en una familia en la que su abuela le contaba a menudo historias sobre lo divino, por lo que creía que los dioses vigilaban a todo el mundo.
Cada vez que pasaba por su casa, le daba materiales para aclarar la verdad. Ella respetaba la calma, la racionalidad y la perseverancia de los practicantes de Dafa cuando se enfrentaban a la persecución. Cuando comenzó el movimiento "Renuncia al PCCh" en 2005, ella, su esposo y su hijo renunciaron. Esperaba que los demás miembros de su familia también lo hicieran, y esperaba que ella pudiera conseguirlo.
No se dio cuenta de la importancia de renunciar al Partido hasta el brote de coronavirus de Wuhan. Dijo: "La gran eliminación que Falun Dafa dijo que ocurriría ha comenzado realmente".
Poco después, ayudó a tres generaciones de su familia a renunciar al Partido, un total de 18 personas, y guardó los certificados de renuncia en un lugar seguro.
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