(Minghui.org) Tengo 88 años y mi esposo tiene 95 años. A nuestra edad, tenemos la suerte de ser felices y saludables.
Cuando era pequeña, recuerdo vagamente que creía que había bajado del Cielo. Este recuerdo ha permanecido en mi mente. Por eso, cuando fui a Shanghái a trabajar, cambié mi nombre de pila por el de "Yun", que significa bajar del Cielo y penetrar en las nubes hasta el mundo humano.
De joven no tuve buena salud y a los 40 años ya tenía muchos problemas de salud, como neumonía lobar, taquicardia, un dolor de espalda tan agudo que no podía agacharme y prolapso visceral. Lo que más me molestaba era la sinusitis. Siempre tenía que llevar gotas para la nariz y pañuelos de papel. Estaba atormentada y una adivina me dijo que no viviría mucho.
Aprendí medicina tradicional china y Tai Chi para mejorar mi salud. Siempre que oía hablar de posibles medicamentos y formas de hacer ejercicio, los probaba. Pero la mejora era mínima.
Una mañana de 1997 salí a dar un paseo y sentí como si un Hula Hula girara en mi vientre. Luego sentí que algo giraba encima de mi nariz, lo que me hizo sentir mucho mejor y ya no estaba congestionada. Logré caminar hasta un lugar de práctica de Falun Dafa, donde las palabras "enseñanza voluntaria" en un cartel me llamaron la atención. Antes siempre tenía que pagar la entrada para cualquier práctica a la que asistiera.
Me quedé mirando el emblema del Falun y las fotos del Maestro Li Hongzhi demostrando los ejercicios, cuando alguien se acercó y me habló de la práctica. Señalé la foto y pregunté: "Dice: 'El Falun gira constantemente'. Había algo que estaba girando en mi nariz. ¿Tendrá alguna relación?".
"Eso es porque había algo mal en tu nariz. El Falun te la estaba ajustando", respondió la persona.
Me alegré mucho al oír eso y pensé: "Quizás estos ejercicios sean prodigiosos". Quise probarlo. Viendo las conferencias del Maestro Li en DVD, llegué a entender muchas cosas que antes no sabía, y mi cuerpo se fue limpiando en forma constante.
El Maestro purifica mi cuerpo
En un sueño, el Maestro me sacó todo el hígado. Lo abrió, quitó la parte ennegrecida, lo selló y lo volvió a meter. Al día siguiente, cuando me agaché para recoger algo, pude hacerlo con facilidad y no sentí que mi hígado estuviera presionado. Supe claramente que lo que vi en el sueño era cierto: el Maestro había curado mi problema de hígado. Además, los latidos de mi corazón volvieron a la normalidad.
En otro sueño, el Maestro me hizo muy pequeña: solo medía un centímetro de altura. Mientras caminaba de un lado a otro entre los alvéolos de mis pulmones, sacaba algo pegajoso. Pensé que el Maestro me estaba dando una pista para eliminar mi yeli a través de la cultivación, así que me advertí que debía cultivarme bien para pasar esta prueba.
Mientras mejoraba mi xinxing y hacía los ejercicios, sentí que mis pulmones volvían a la normalidad.
Dejé de tomar todos los medicamentos y experimenté realmente la belleza de estar libre de enfermedades. Antes cuando tenía que subir al quinto piso, tenía que hacer varios descansos, pero ahora puedo subir todos los pisos sin parar. Antes intentaba salir lo menos posible, pero ahora eso ya no es una preocupación.
Cuando me encontraba con mis vecinos, siempre les decía: "¡Mira! Me va muy bien desde que empecé a practicar Falun Dafa". También volví a mi ciudad natal y conté a mis parientes y amigos los cambios positivos que había experimentado. Se alegraron mucho por mí. Enseñé los ejercicios a los que querían aprender y les dije la importancia de estudiar el Fa.
Una vez empecé a leer Zhuan Falun y pensé: "Otros practicantes pueden ver Falun (Rueda del Fa) mientras estudian el Fa. ¿Por qué yo no puedo?". De repente, hubo un chasquido dentro de mi cabeza y vi Falun de todos los tamaños diferentes girando en la habitación. ¡Era realmente asombroso! Me sentí agradecida por la gracia salvadora del benévolo Maestro.
Aclarando la verdad
El Partido Comunista Chino (PCCh) inició la persecución a Falun Dafa en julio de 1999. El Maestro y Falun Dafa eran calumniados y difamados en la televisión, la radio y los periódicos día y noche. Los asistentes de los lugares de práctica de todo el país fueron arrestados.
Sabía que tenía la responsabilidad de aclarar la verdad. No importaba dónde estuviera, ya sea en el centro de lavado de cerebro o en el centro de detención, siempre utilizaba mi experiencia personal para decir a todo el mundo que Falun Dafa es maravilloso, ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es maravilloso!
La gente del Comité Comunitario local quería que me presentara para "una charla". Una docena de funcionarios estaban sentados en la sala. Algunos de ellos parecían tener muy buena educación. Me pareció que querían obligarme a renunciar a mi fe.
Me senté y uno de ellos empezó a hablar de sectas. Le dije con calma: "Falun Dafa no está entre las 14 sectas definidas oficialmente por el Ministerio de Seguridad Pública. Puede ir a Internet y comprobarlo usted mismo". En cuanto a la etiqueta de secta que Jiang Zemin (exlíder del PCCh) puso a Falun Dafa, es solo su opinión y no tiene ningún valor legal. Lo que se emite en la radio y la televisión es completamente diferente de lo que yo sé sobre Falun Dafa por mi propia experiencia".
Procedí a contarles mi experiencia de cultivación. Al ver que yo era mayor, de buen humor y razonable, parecieron olvidar lo que iban a decir. El organizador de la reunión quiso hablar, pero lo miré fijamente, mientras enviaba pensamientos rectos, y de repente dijo: "Terminemos la reunión".
Supe que fue el Maestro quien eliminó los elementos malignos que habían detrás de él. Cuando me marché, la persona que había sacado el tema de las sectas me dijo: "Vamos a conversar la próxima vez".
Después de la publicación de los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista, bastantes funcionarios del gobierno vinieron a hablar conmigo. Les aclaré la verdad a cada uno, y la mayoría de ellos decidió renunciar al PCCh.
En las fechas sensibles, el Comité Comunitario me exigía que me presente ante ellos dos veces al día. Siempre iba con una sonrisa en la cara. Era como si cada visita fuera una oportunidad para ayudarles a renunciar al PCCh y a sus organizaciones juveniles. Milagrosamente, la gente era transferida poco después de renunciar, y los nuevos parecían estar esperando que yo les aclarara la verdad. Sabía que eran los arreglos del Maestro que traían a las personas predestinadas a mí.
Compartíamos la cocina con algunos vecinos de mi edificio de departamentos, así que todos se conocían muy bien. Todos ellos vieron los cambios en mí después de que empecé a practicar Falun Dafa y eran muy conscientes de que los medios de comunicación del PCCh inculpaban y calumniaban a Dafa. Por eso, cuando les pedí que renunciaran al Partido, aceptaron sin dudarlo. Sabía que el Maestro me había dado un cuerpo sano y así estaba en una buena posición para aclarar la verdad a más personas y ayudar al Maestro a salvarlas.
Han pasado más de 20 años desde que empecé a practicar Falun Dafa. Estudiar el Fa, hacer los ejercicios, enviar pensamientos rectos y aclarar la verdad son mis rutinas diarias. Mientras estoy fuera, aprovecho cualquier oportunidad para acercarme a la gente y ayudarles a renunciar al Partido. Recuerdo claramente lo que dijo el Maestro:
“El Fa rectifica el cosmos
La compasión puede disolver Cielo y Tierra y traer la primavera
Los pensamientos rectos pueden salvar a la gente en el mundo”
(Hong Yin (II))
Siempre que hablo con la gente sobre Dafa, suelen estar de acuerdo en renunciar al Partido. Algunos incluso han dicho a sus familiares que renuncien. Me siento realmente feliz por ellos. Desgraciadamente, algunas personas estaban profundamente envenenadas por la propaganda del PCCh y acababan insultándome, pero aun así les hablaba con compasión y les deseaba un buen futuro.
Mi marido se beneficia de Dafa
Gracias a la práctica de Falun Dafa, mi marido también se ha beneficiado. Hace dos años, empezó a caerse de repente de la silla, pero conseguí sostenerlo a tiempo. Tenía la mandíbula floja y babeaba. Me costó bastante esfuerzo acostarlo y luego llamé al médico.
Me arrodillé frente al retrato del Maestro Li y le pedí ayuda: "Si es su hora, déjalo ir. Si no, ¿podrías ayudarle a mejorar? Si se queda postrado en la cama, tendré que pasar mucho tiempo cuidando de él. Todavía tengo que aprovechar el tiempo para salvar a la gente".
Cuando estaba preparando la cena, oí que mi marido me decía que el teléfono estaba sonando. No podía creer lo que oía. Cuando levanté la vista, estaba de pie junto a la entrada de la cocina. El Maestro lo había salvado. Desde entonces, mostró un gran respeto por el Maestro.
Un adivino dijo una vez que no viviría más allá de los 90 años. Ahora tiene 95. Aunque todavía tengo que cuidar de él, siempre trato de organizar todo bien para no retrasar la salida para aclarar la verdad.
Siempre he tenido una foto del Maestro colgada en mi casa, incluso en el momento de mayor persecución. El Maestro me dio una nueva vida, por lo que creo sinceramente en Dafa. Incluso cuando los agentes de la Oficina 610 vinieron a mi casa, nunca me rehusé y siempre me enfrenté a ellos con rectitud.
Tan afortunada de ser una practicante
Durante ese tiempo, limpié la basura de todos en la cocina y llevé las bolsas de basura que vi en el camino a los contenedores de la calle. Con este simple gesto, demostré la belleza de la Dafa a la gente. A mi edad, nunca me siento una persona mayor.
También tuve en cuenta a otros practicantes mayores y fui a visitarlos de vez en cuando. Cuando tomaba un autobús, los demás pasajeros no tenían que cederme el asiento. En casa, subía y bajaba las escaleras con facilidad al menos un par de veces al día. La gente me admiraba. A menudo los ayudaba a aceptar mis palabras cuando les hablaba de Dafa.
Cuando saludaba a las personas que hacían entregas, siempre les decía: "Por favor, no se olviden de recitar 'Falun Dafa es maravilloso, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es maravilloso' para garantizar su seguridad y recibir buena fortuna".
Una vez que estaba aclarando la verdad, la persona me preguntó mi edad. Le pedí que adivinara. Pensó que tenía alrededor de 60 años. Me sentí muy afortunada de ser una practicante.
Mientras tengamos el Fa en nuestro interior, podremos superar las pruebas y las tribulaciones. Mientras tengamos fe en el Maestro y en Dafa, podremos recorrer bien nuestros caminos.
Por favor, señalen cualquier cosa inapropiada.
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