(Minghui.org)
"Frecuentemente, digo que si uno actúa completamente por el bien de otros sin el más leve propósito o entendimiento personal, lo que uno dice hará que los oyentes se conmuevan a derramar lágrimas. Lo que les he enseñado no es sólo Dafa. Les he dejado también mi comportamiento. Mientras trabajas, el tono de tu voz, tu bondad y tu razonamiento puede transformar el corazón de una persona, ¡mientras que una orden nunca podrá hacerlo!" (Conciencia lúcida, Escrituras esenciales para mayor avance).
Con motivo de la 19.ª Conferencia de Practicantes de Falun Dafa en China (Fahui de China), me gustaría compartir mis experiencias al rescatar a los practicantes detenidos.
Mirando hacia adentro durante los conflictos
Participé en el rescate del practicante Han en 2020. Por diversas razones, todos los demás, excepto yo y otro practicante, abandonaron el equipo de rescate uno tras otro, incluido Dong. A principios de este año, repentinamente dejó un mensaje en una plataforma segura, compartiendo sus pensamientos sobre cómo rescatar a Han y criticándome. Se formó sus opiniones sobre mí basándose en la información que escuchó de otro practicante y en lo que sentía por mí cuando aún estaba en el equipo de rescate.
Ante esta repentina y fuerte crítica, mi verdadero yo sabía que era una prueba para mejorar el xinxing, pero mi lado humano estaba perturbado, con sentimientos de queja, resentimiento e injusticia. También noté que no estaba dispuesta a recibir comentarios negativos.
El otro practicante que seguía en el equipo de rescate se limitó a ayudar a enviar pensamientos rectos y a ponerse en contacto con la familia de Han. Yo tuve que hacer todo lo demás, incluyendo la preparación de documentos legales, el envío de materiales de aclaración de la verdad a varias agencias gubernamentales, la consulta con expertos legales, el contacto con abogados, la visita a Han en la prisión y el contacto con los miembros de su familia.
Las críticas de Dong hacia mí me hicieron sentirme agraviada. Pensé: "¿Por qué dejó el equipo, pero sigue quejándose de mí? Mi tiempo y mi energía son limitados, pero tengo que hacerlo todo. ¿Todavía te metes conmigo como espectador? ¿Y todavía quieres que cargue con las responsabilidades si algo va mal?".
Cuanto más pensaba en la crítica de Dong con nociones humanas, más irracional me parecía él: "puesto que ya no estás involucrado en esto, ¿cómo podrías conocer todos los detalles? El practicante que te habló de mí solo estaba compartiendo sus propias opiniones, ya que no conoce todo el panorama y no puede representarme. No conoce las leyes, así que ¿por qué cuestionó todos los documentos legales que preparé?".
Estas nociones humanas me impidieron mirar hacia dentro y se convirtieron en excusas para justificar por qué me sentía agraviada. Al ver la insatisfacción y el resentimiento en mi rostro, otro practicante me recordó: "¿Por qué te preocupa tanto quién tiene razón y quién no? La cultivación es más importante".
Me calmé y empecé a mirar hacia dentro. ¿Por qué Dong me criticaba así? Mientras estaba en el equipo de rescate, trabajábamos bien juntos. Reconocía que este proyecto le ayudaba mucho con la cultivación. Además, Dong siempre nos recordaba que debíamos cultivarnos y mejorar el xinxing. Solo entonces las cosas que hacemos pueden tener el poder de Dafa; de lo contrario, el efecto sería muy limitado. Mirando hacia atrás, me di cuenta de que las áreas en las que Dong hacía hincapié -mirar hacia adentro y cultivar el xinxing- son exactamente mis puntos débiles. Probablemente, debido a mi escasa cultivación, no quiso seguir trabajando conmigo en los esfuerzos de rescate. Aunque ya no formaba parte del equipo, seguía prestando atención a mis esfuerzos de rescate y señalaba sin tapujos los problemas que conocía. No tenía miedo de ofenderme porque solo era responsable conmigo y quería que los esfuerzos de rescate fueran un éxito. ¿No es genial?
Además, lo que me dijo y de qué manera no era lo más importante. Lo que importaba era si me molestaba ante las críticas. ¿Miré hacia dentro de forma incondicional? Si Dong no utilizaba esas palabras fuertes, ¿cómo podían quedar al descubierto mis nociones más profundas?
Dejar de lado el apego al ego
Poco después del incidente, Dong organizó una reunión cara a cara para que siguiéramos hablando. Esperaba aprovechar la reunión para informar a todo el mundo sobre el proceso de rescate, resolver los malentendidos y conseguir la participación de más practicantes (para entonces, yo era la única que quedaba en el equipo de rescate).
Para ayudar a conseguir este objetivo, me pasé un día entero escribiendo mi artículo para compartir. Pero la mayoría de los practicantes no miraron hacia dentro y el resultado de la reunión no fue tan bueno como yo esperaba. Además, otra practicante, Fang, fue detenida una semana después de la reunión. No la conocía bien. Pero ella y dos de sus familiares asistieron a la reunión, y Fang permaneció en silencio todo el tiempo.
El arresto de Feng me hizo comprender que las viejas fuerzas habían organizado sistemáticamente su persecución a los practicantes, aunque el arresto parecía dirigirse a cuestiones de nuestra cultivación personal, como los conflictos entre practicantes. Aprovechando nuestras nociones humanas, las viejas fuerzas crearon barreras entre los practicantes, lo que provocó pesimismo y falta de confianza. Al final, no pudimos formar un solo cuerpo. Como resultado, no actuamos con la suficiente rapidez, lo que provocó que Han y Feng siguieran detenidos.
Con estos pensamientos, decidí rectificarme primero yo misma. Además de dejar de lado el egoísmo y los pensamientos negativos hacia otros practicantes, también eliminé los elementos que interferían en otras dimensiones. Otro practicante y yo nos pusimos rápidamente en contacto con los familiares de Fang, que también son practicantes. Mantuvimos una conversación sincera con la familia de Feng y les reiteramos que haríamos todo lo posible por rescatarla. Su familia se sintió conmovida por nuestra sinceridad y aceptó colaborar con nosotros.
Aunque los miembros de la familia de Fang no cumplieron nuestras expectativas debido a muchas nociones humanas, traté de permanecer imperturbable y ser comprensiva con su situación. Me centré en ayudarlos, en lugar de quejarme de ellos con resentimiento.
Este proceso me enseñó que, aunque otros practicantes no estuvieran de acuerdo con mi idea o se negaran a actuar, no debía alterarme ni afectarme. Más bien, debía mantener una mente tranquila como practicante y evitar los conflictos con los demás. Me di cuenta de que cualquier barrera entre compañeros de práctica debilitaría el poder del cuerpo único de practicantes.
Una mente pura
Incluso con estos conocimientos, de vez en cuando no lo hacía bien. Una vez discutí con Yan, un miembro de la familia de Fang. El punto de Yan era que no podía actuar tan rápido como yo quería. Dijo que necesitaba más tiempo y me pidió que no la presionara.
Me frustró un poco que sintiera que la estaba presionando. Yo había sido paciente y tolerante; no la había criticado. No podía entender por qué Yan reaccionaba así. Para aclarar el asunto, le expliqué más. A medida que me emocionaba, mi voz se hacía más fuerte. Pero cuanto más le explicaba, menos estaba dispuesta a escuchar. Al final, discutimos entre nosotros.
Después del incidente, Yan ya no confiaba en mí como antes. Mirando hacia atrás, sabía que mis palabras la habían herido y que mis supuestas explicaciones también eran una excusa para mí. Pero en aquel momento no miré hacia dentro y no me alineé con los principios de Dafa. Al final, Yan y otro miembro de la familia de Fang no pidieron convertirse en defensores de la familia de Fang, como yo esperaba que hicieran. En su lugar, contrataron a un abogado para que defendiera a Fang en los tribunales.
Reflexioné sobre mi conflicto con Yan y me di cuenta de que no había mostrado amabilidad y compasión en mi discusión con ella. Recordé las palabras de Shifu:
"Frecuentemente, digo que si uno actúa completamente por el bien de otros sin el más leve propósito o entendimiento personal, lo que uno dice hará que los oyentes se conmuevan a derramar lágrimas. Lo que les he enseñado no es sólo Dafa. Les he dejado también mi comportamiento. Mientras trabajas, el tono de tu voz, tu bondad y tu razonamiento puede transformar el corazón de una persona, ¡mientras que una orden nunca podrá hacerlo!" (Conciencia lúcida, Escrituras esenciales para mayor avance).
Sabía que lo hice bastante mal para alcanzar los requisitos de Shifu para practicantes. Siempre me consideré una persona desinteresada y considerada con los demás. Pero en realidad, a menudo imponía mi opinión a los demás y era autoritaria y exigente. Me faltaba compasión, y no me extraña que otros practicantes se sintieran presionados por mí.
Me di cuenta de que no era fácil para Yan. Tuvo que lidiar con la presión de los miembros de su familia que no son practicantes, la presión mía y la presión de la persecución. Además de todo esto, también tenía que cultivarse y eliminar sus apegos mientras Fang estaba detenida. Mientras discutíamos, me dijo: "Me acabas de decir lo que tengo que hacer. ¿Te importan mis sentimientos?". En ese entonces, simplemente descuidé sus sentimientos. Lo único que pensaba era que debía apresurarse a rescatar a Fang, en lugar de ser realmente considerada con su situación.
Ahora aprendí que todo lo que Yan pensaba o hacía era una manifestación de su estado de cultivación. Si ella eligió defender a Fang en la corte o no, fue también su elección personal. No debería tener pensamientos negativos sobre ella o incluso criticarla solo porque no cumpliera con mis expectativas sobre ella.
A partir de estas experiencias, me di cuenta de que cualquiera que trabaje en el rescate de los practicantes detenidos debe mirar hacia dentro para cultivarse, en lugar de forzar nuestras propias opiniones sobre los demás. Solo si nos alineamos con los principios de Dafa, nuestra mente será pura, nuestro campo será compasivo y las cosas cambiarán. Solo cuando cumplimos los requisitos de Dafa podemos ver el poder de Dafa. Lo único que puede cambiarnos y permitirnos mejorar es Dafa.
Actuar sin persecución
Trabajando en el equipo de rescate, aprendí a tratar los problemas de otros practicantes como propios y a hacer las cosas con solidez sin perseguir resultados. Rescatar a los practicantes y aclarar la verdad a las fuerzas del orden, a la procuraduría y a los tribunales requirió tiempo y esfuerzo. Debemos ser persistentes y perseverantes.
En los últimos dos años, me involucré en el rescate de varios practicantes en el área local. Además de los mencionados Han y Fang, uno de los practicantes que ayudé a rescatar fue Chun, que fue detenido poco después del Año Nuevo 2020. Otros practicantes dijeron que habían ido a su casa, pero ninguno de los miembros de su familia estaba dispuesto a colaborar con ellos para rescatarla. Uno de los miembros de la familia, Min, también practicante, llegó a comentar que a Chun le había ido mal como practicante.
Intenté ponerme en contacto con Min. Sin embargo, antes de que pudiera contactar con ella, estalló la pandemia y todas las comunidades locales fueron bloqueadas. Pronto pasaron tres meses desde la detención de Chun.
Un día visité a otro practicante, que casualmente conocía la dirección de Min. Inmediatamente fuimos a visitar a Min. Al principio, ella seguía quejándose de que Chun no había seguido del todo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Mientras se quejaba, entró su nieta diciendo que el aceite de la sartén se estaba quemando. Apagó el fuego y se quejó de que su nieta no prestaba atención a la cocina. Le dije a Min que el fuego ardiente podía ser una pista de la urgencia de salvar a Chun. Ella accedió a ponerme en contacto con el marido de Chun.
Trajimos algo de fruta y fuimos a visitar al marido de Chun. Le dijimos que podíamos pagar los honorarios del abogado y que solo tenía que firmar los papeles necesarios. "No conocemos a tu mujer, pero como practicantes de Falun Dafa, siempre nos apoyamos", aceptó.
Tras preparar los documentos necesarios, el abogado se reunió con Chun al día siguiente. El marido de Chun se alegró y se ofreció a pagar los honorarios del abogado. "Hemos sufrido mucho por la persecución", dijo. "Es demasiado".
Durante los meses siguientes, a través del abogado ayudamos a Chun a recordar las enseñanzas de Dafa, a mirar en su interior para mejorar, a aprender conocimientos jurídicos y a fortalecer los pensamientos rectos. Le hicimos saber que todos la apoyábamos y la rescatábamos.
Animada por nosotros y por otros practicantes, Min también aceptó defender a Chun en los tribunales como miembro de la familia. Min hizo bien estudiando las enseñanzas de Falun Dafa, haciendo los ejercicios y enviando pensamientos rectos, pero su mentalidad de rescatar a Chun no era estable. No nos molestamos por ello y continuamos compartiendo el entendimiento mientras la ayudábamos a dejar de lado el miedo y los pensamientos negativos. Varias veces quiso dejar de ser defensora de la familia de Chun. Su nieta le dijo: "Abuela, ¿cómo puedes renunciar cuando otros practicantes no se rinden?". Decidió mantener sus esfuerzos por rescatar el Chun.
Trabajando juntos, aprendimos que rescatar a los practicantes detenidos es importante. No es solo ayudar a los practicantes a ser liberados, sino también una oportunidad para salvar a la gente.
Una gran familia
Cuando los practicantes son detenidos por sus creencias, sus familiares también sufren mucho, se sienten impotentes, frustrados y doloridos. Es importante que sientan el cuidado y la compasión de otros practicantes.
Antes del Festival de la Luna de este año (10 de septiembre), otros dos practicantes y yo visitamos a los familiares de cinco practicantes detenidos. Algunos de ellos habían sido detenidos recientemente, otros acababan de ser condenados y otros ya estaban en la cárcel.
A cada familia le llevamos regalos, tarjetas de felicitación, información sobre la aclaración de la verdad y un reproductor de audio con todo tipo de materiales. Con un corazón puro, pudimos reunirnos con las cinco familias incluso sin cita previa. Algunos miembros de la familia que solían salir también estaban en casa cuando llegamos.
Las conversaciones también fueron buenas. Algunos miembros de la familia eran cautelosos con los practicantes en el pasado, pero ahora podían hablar libremente. Un miembro de una familia nunca nos saludó ni dijo nada en el pasado, pero esta vez nos saludó y habló mucho. Algunos nos dieron comida, tratándonos como a su propia familia.
Entiendo que ayudar a los familiares de los practicantes detenidos es nuestra responsabilidad. Necesitan conocer los hechos y también necesitan ser salvados.