(Minghui.org) Una vez estuve a punto de perder mi trabajo por culpa de un simple pensamiento humano. Ante este suceso único en la vida, decidí compartirlo con la esperanza de prevenir una experiencia similar por parte de otros practicantes.
Fui detenido en 2011 y condenado a tres años de prisión. Más tarde, me contrató una empresa como personal de apoyo en 2018. Esta empresa es una sucursal de una empresa nacional, y su director general era un amigo mío de la infancia. Tengo unos 60 años. Me sentí muy satisfecho de haber conseguido este trabajo, sobre todo porque me permitía disponer de tiempo libre para leer el Fa.
Este director general se retiró el año pasado. La empresa nacional asignó otro director general. A continuación, varios directivos de nivel medio dimitieron, ya que les ofrecieron trabajo en otras empresas del mismo sector. Uno de ellos era muy amigo mío, y antes de marcharse me preguntó cuál sería mi siguiente paso. Le dije que dejaría que la naturaleza siguiera su curso. Luego murmuré para mis adentros que, de todos modos, podría ser despedido algún día, ya que el antiguo director general se había ido.
Comienza mi prueba
El nuevo director general no tardó en insinuar que había llegado el momento de mi dimisión. Sin embargo, como practicante de Dafa, sabía que debía mirar hacia dentro cuando tenía problemas. ¿Qué apego humano estaba siendo señalado? Les conté a los demás practicantes mi situación y decidí enviar primero, pensamientos rectos para desintegrar esta persecución financiera. A continuación, identifiqué y eliminé mis apegos de tener una mentalidad competitiva, el odio, salvar la cara, envidia, ansiedad, fama, lujuria, etc. Mientras tanto, también traté de encontrar la razón por la que quería que dejara el trabajo. Le pedí a mi pariente que se pusiera en contacto con su amigo, que trabaja en el departamento de autoridades reguladoras que supervisa la empresa, para que llamara al nuevo director general y encontrara la verdadera razón.
Pensé que el asunto estaba resuelto y que la crisis había terminado. Sin embargo, me informaron de que mi contrato de trabajo terminaría a finales de julio.
Estaba sorprendido y confundido, pero después de calmarme, mis pensamientos volvieron a ser los de un practicante de Falun Dafa. Necesitaba este trabajo y sabía que debía tenerlo. Sin embargo, ¿qué brechas estaban siendo aprovechadas por las viejas fuerzas para hacerme perder este empleo? Sentí que debía utilizar esta oportunidad para estudiar el Fa con más diligencia y comprender mejor los principios del Fa.
Por lo tanto, estudié el Fa día y noche, a la vez que le pedía a Shifu que me iluminara. Al poco tiempo, el Maestro me insinuó que leyera un artículo sobre cómo una compañera practicante miraba hacia dentro. Esta practicante dijo en su artículo que le dolía la pierna desde hacía mucho tiempo. Al principio, pensó que era solo una interferencia de yeli (karma) de enfermedad. Envió pensamientos rectos para eliminarlo. Sin embargo, no funcionó. En cambio, el dolor se hizo tan fuerte que no podía comer ni dormir.
Cuando ella miró hacia adentro, recordó algo. Su vecina estaba en proceso de remodelación de su casa. Llevó agua caliente a su vecina y quiso echar un vistazo a su patio trasero. Pero de repente recordó que no podía ir allí porque hacía años alguien se colgó y murió en ese patio. Tenía miedo de ser atacada por el espíritu del hombre, así que se fue a casa. Al día siguiente le empezó a doler la pierna. Comprendió que era una practicante de Falun Dafa y que no debía asustarse por los espíritus. El miedo es un apego, y las viejas fuerzas se estaban aprovechando de esta brecha. Cuando se dio cuenta de esto, el dolor de la pierna no tardó en desaparecer.
Las cosas cambian
Tenía la noción humana de que el nuevo director general despediría a algunos de los antiguos empleados y contrataría a gente nueva. Pensaba que podría ser despedido en breve, y esto era una preocupación. Como practicante de Dafa, me di cuenta de que no debía pensar en mi problema con nociones humanas. Esto era una brecha en mi cultivación. No debo ser restringido por los principios humanos. Shifu me está cuidando y las viejas fuerzas no tienen ningún control sobre mí. Si conservo mi trabajo o no es un arreglo de Shifu. Mientras mantenga pensamientos rectos y acciones rectas, caminaré por el camino arreglado por el Maestro. Entonces las viejas fuerzas no tendrán ninguna brecha de la que aprovecharse.
Los demás practicantes me dieron algunas sugerencias e ideas. Me coloqué frente a la imagen del Maestro y le pedí solemnemente que resolviera esta tribulación para poder conservar mi trabajo, si así lo disponía. Dije que haría lo que el Maestro me pide mirando hacia dentro y eliminando mis apegos. Fortalecí el envío de pensamientos rectos y negué firmemente esta persecución financiera. También envié pensamientos rectos para eliminar los factores malignos detrás del nuevo director general, y no permití que las viejas fuerzas manipularan a la gente para cometer crímenes contra los practicantes. También envié pensamientos rectos para eliminar los sentimientos de resentimiento que desarrollé hacia el nuevo director general. Me dije que solo debía tener compasión por la gente. Estaba decidido a dejar todo en manos Shifu y creer en Shifu y en el Fa.
Dejé de lado todo y me sentí muy relajado. Al cabo de unos días, sentí que todo se aclaraba. Hablé con el nuevo director general y le expliqué que mi permanencia beneficiaría a la empresa y a él. Hablamos durante media hora y aceptó que me quedara. Mantuve mi puesto de trabajo.
A través de esto, comprendí sinceramente que la cultivación es algo muy serio. No solo cada palabra y acción debe estar de acuerdo con el Fa, sino también cada pensamiento debe estar de acuerdo con el Fa. De lo contrario, las viejas fuerzas se aprovecharán de cualquier pensamiento humano involuntario que no esté en base al Fa y lo utilizarán para perseguirnos. En la etapa final de la rectificación del Fa, espero que los practicantes estudien el Fa diligentemente, mantengan cada pensamiento en el Fa, y transiten bien el camino de la cultivación y la rectificación del Fa.