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[Fahui de Europa 2022] Cultivándome en una situación de guerra

Oct. 16, 2022 |   Por un practicante de Falun Dafa en Europa

(Minghui.org) Soy de la ciudad de Kharkiv, Ucrania. En la madrugada del 24 de febrero de 2022, me despertaron los estruendos de proyectiles. Pensé que debía haber estallado la guerra.

De la confusión a buscar formas de aclarar la verdad

Desde el primer día, las tropas rusas comenzaron a bombardear las infraestructuras de Kharkiv con todo tipo de armas y bombas. Casi de inmediato, la electricidad en nuestra zona se cortó durante unos días y, por tanto, no había Internet ni comunicación móvil. Y, cuando los servicios volvieron a cobrar vida, me enteré de que la mayoría de los practicantes de Falun Dafa de Kharkiv fueron evacuados de la ciudad. Eso me afectó más que nada, me entristeció hasta las lágrimas. Me desilusionó que este grupo amistoso y activo hubiera desaparecido.

Había cierta confusión. No pensaba dejar Kharkiv. Pero pensé en lo que el Maestro Li (fundador de Dafa) nos pidió que hiciéramos. En el centro de la ciudad teníamos las actividades cotidianas habituales, la recolección de firmas para pedir el fin del Partido Comunista Chino (PCCh) y cómo hacer las tres cosas ante las condiciones de la guerra.

Shifu dijo:

“... si bien la sociedad está en un tumulto, tampoco puede cambiar la misión de los Dafa dizi" (Al Fahui de Taiwán 2021).

Desde el primer día de la guerra, Kharkiv (que tiene 1,5 millones de habitantes) quedó paralizada. Todos los negocios cerraron, el tráfico se detuvo, el metro se utilizó como refugio antibombas y los comercios cerraron, excepto algunas tiendas de alimentación y farmacias.

Me quedaban algunos periódicos con información sobre Dafa. Empecé a salir a la calle, a acercarme a la gente que hacía cola en las farmacias y a decirles que había una práctica de cultivación llamada Falun Dafa que enseñaba a mantenerse tranquilo y sano, sin tener que recurrir a la medicación. Tomaron los periódicos, pero sin entusiasmo. Los ojos de la gente estaban en blanco y perdidos.

Después de unas dos semanas, me enteré de que había dos practicantes vietnamitas en la ciudad que guardaban todo nuestro material informativo. Esto me animó.

Empezamos a salir juntos y a repartir periódicos. Kharkiv estaba bajo un continuo bombardeo. Los habitantes de la ciudad trataban de permanecer en los refugios y solo salían en busca de comida. Sin saber cuánto tiempo nos quedaba por delante, cada día caminábamos, a temperaturas bajo cero por una carretera resbaladiza, durante cuatro o cinco horas, desde las colas de las tiendas hasta las colas de la ayuda humanitaria, intentando dar información sobre Dafa al mayor número de personas posible.

Más tarde, cuando quedó claro que la guerra se prolongaba, decidí hacer los ejercicios de Falun Dafa en el exterior, esperando la oportunidad de hablar con más gente. Ellos, como dije antes, solo salían a comprar comida, así que hicimos los ejercicios en un lugar donde había un pequeño mercado y varias tiendas de alimentación.

Nuevas situaciones - Nuevos retos y pruebas

La cuestión de la vida y la muerte

Los practicantes que viven en ciudades bombardeadas se enfrentan a la cuestión de la vida y la muerte. Como he dicho, Kharkiv fue bombardeada casi sin parar. Un proyectil podía impactar en un apartamento o en un coche, o explotar en la calle, y yo no tuve miedo de verdad. Creía firmemente que todo estaba predeterminado. Si hago lo correcto, Shifu y los dioses rectos me protegerán. Así que cada día, a pesar de los bombardeos, salíamos a repartir periódicos y hacíamos los ejercicios. Ignorábamos los proyectiles que zumbaban sobre nuestras cabezas sin fijarnos en dónde impactaban.

Sentido del patriotismo

Nunca tuve ningún sentimiento especial por la cultura y el país ucranianos. Pero empecé a notar que cuando hablaba de acontecimientos militares no decía "tropas ucranianas", sino "nuestras tropas". En otras palabras, me identificaba con la nación ucraniana. Mi patriotismo se manifestó. Sucedió porque realmente quería que las tropas ucranianas hicieran retroceder a las rusas y volver al ambiente que teníamos antes de la guerra.

Apego a la comodidad

También tuve una prueba con mi apego a la comodidad. Pero, en mi opinión, fue la prueba más fácil. Periódicamente, debido a los bombardeos de la infraestructura de nuestro barrio, había un corte de luz. No había luz, ni Internet, ni funcionaban los frigoríficos, ni las cocinas eléctricas, es decir, no había forma de cocinar los alimentos. Así que, no hubo electricidad durante unas dos semanas. Pero no me desanimé. Tampoco me disgustó que el cristal de la ventana estuviera roto y tuviera que cubrirlo con un hule.

La experiencia más difícil

Por supuesto, durante la guerra viví una experiencia única que no habría tenido en ninguna otra circunstancia. Y, según entiendo, esta experiencia me ayudará en los acontecimientos que nos esperan en el futuro.

Shifu dijo:

"En el pasado, en las profecías ustedes han escuchado que ‘de 10.000 quedan 1.000’, o ‘de 10 familias queda una’; todo tipo de profecías han hablado sobre este tema” (Enseñanza del Fa en Gran Nueva York 2013).

La primera conmoción para mí fue cuando las personas murieron a causa de los proyectiles mientras esperaban en la cola para recibir ayuda humanitaria. Luego empezaron a aparecer regularmente informes sobre víctimas. Mentalmente, comprendí que todo estaba predeterminado, que las leyes kármicas actuaban. Pero, incluso los practicantes se alteran cuando ven que sus familiares están enfermos y mueren, a pesar de su comprensión de la predestinación. Y ahora un gran número de personas mueren, incluso niños, sin razón aparente. Se vuelve espeluznante. Pero hay que aceptarlo.

Todos entendemos que al arreglar el mundo humano, habrá una gran tasa de disminución. Y puede que tenga que caminar solo en el futuro, sin compañeros practicantes, sin su apoyo y ayuda, en un mundo que se desmorona, y buscar a la gente que queda atrás y a la que todavía se puede ayudar hablando sobre Dafa.

Reflexiones sobre cómo aclarar la verdad en un nuevo entorno

En esta época de la sociedad humana, el bien y el mal se enfrentan cada vez más intensamente. Y en esta batalla, cada persona debe mostrar su propia posición.

Para ayudar a la gente a tomar la decisión correcta, primero tuve que entender la situación yo mismo. Al estudiar el Fa, me di cuenta de que las guerras ocurren según las manifestaciones celestiales. El único criterio invariable para evaluar todo lo que sucede son los principios del universo: Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Muchos ucranianos sienten odio hacia los rusos. Le explico a la gente que tenemos que deshacernos de este sentimiento porque nos destruye. Tenemos que centrarnos en nuestras propias acciones y pensamientos, pensar si lo estamos haciendo todo bien y por qué estamos en esta situación. Hablo a la gente sobre Falun Dafa, les doy flores de loto y les recuerdo que si quieres cambiar el mundo, debes empezar por ti mismo.

Participar en el evento de Shen Yun

Normalmente, cuando quiero inspirarme para mejorar con más diligencia, leo las publicaciones sobre las actuaciones de Shen Yun en el sitio web Minghui. Así que cuando un practicante me llamó y me ofreció ir a Polonia durante unos días para ayudar en la organización de Shen Yun, me entusiasmé.

Al principio, debía vigilar los autobuses. Quizá por eso no me indicaron cómo comportarme si veía a los artistas del espectáculo. Pero, al final, me colocaron donde pasaban los músicos de la orquesta.

Hace varios años ayudé en Kharkiv con la búsqueda de intérpretes para la orquesta de Shen Yun. Estaba maravillado con los músicos y conocía sus caras por sus fotografías. Así que cuando los vi en persona, no pude contener mis emociones.

El apego a ostentar se manifiesta no solo en el deseo de mostrar la propia comprensión y conocimiento, sino también en el deseo de mostrar el propio estado de ánimo y los sentimientos. Cuando vi a los músicos, les mostré obsesivamente mi alegría, sonriendo y manteniendo mis manos en la posición Heshi.

Durante la actuación, los artistas de Shen Yun tienen la misión de salvar a la gente. Y yo los contaminé con mis sentimientos. Me alegro de haberme dado cuenta de lo equivocado que estaba y de haber intentado ser más moderado al día siguiente.

Además, durante mi participación en los preparativos de Shen Yun, mi ignorancia del idioma inglés fue un obstáculo. Antes de la guerra, en Kharkiv recogimos activamente firmas pidiendo el fin de la persecución por parte del PCCh. Como había tantos estudiantes de diferentes países en la ciudad, se hizo necesario aprender inglés, y yo empecé a aprenderlo. Pero, con el comienzo de la guerra, dejé de hacerlo.

El hecho de que no hablara inglés no me molestaba tanto como a los organizadores de la actuación de Shen Yun. Ya estaban muy ocupados y tuvieron que buscar un intérprete para comunicarse conmigo. Lamento habérselo puesto tan difícil.

En Polonia hay menos factores comunistas que en Ucrania. Me ayudó a identificar algunos de los prejuicios asociados a ellos, y empecé a deshacerme de ellos.

Qué bien que tenga la oportunidad de venir a Polonia de nuevo para participar en la conferencia y seguir cultivándome.

Esta es mi comprensión a mi nivel de hoy. A partir de la inesperada guerra, empecé a comprender que mañana la situación podría cambiar, entonces tendría una experiencia diferente y mi comprensión también podría cambiar.

Gracias, Shifu y compañeros practicantes.

(Presentado en el Fahui de Europa 2022)