(Minghui.org) Con frecuencia escucho la grabación de audio "Recordando la Gracia del Maestro" publicada en Minghui.org. Cada vez que la escucho, me siento como si estuviera ahí. Es tan maravilloso que incluso se me escapan las lágrimas.

No he asistido a las conferencias del Maestro Li Hongzhi (fundador de Falun Dafa) personalmente, pero las cosas asombrosas que me sucedieron cuando empecé a practicar Falun Dafa no fueron menores a las de aquellos que sí asistieron. Quise escribir algunas de mis extraordinarias experiencias y las de los compañeros practicantes de nuestro grupo de práctica que ocurrieron antes de que comenzara la persecución a Falun Dafa para mostrar nuestra gratitud a Shifu y validar la compasión y grandeza del Maestro.

Lo que sucedió al aprender Falun Dafa

Empecé a practicar Falun Dafa el 22 de noviembre de 1998, del calendario lunar chino. En mi ciudad natal se celebraba una conferencia de intercambio de experiencias de cultivación de Falun Dafa. Mi hermana y otros practicantes le hablaban a la gente del pueblo sobre Falun Dafa.

Recuerdo que era un domingo cerca de las 9:00 a. m. cuando una mujer llegó a mi puerta y me mencionó sobre Falun Dafa. Le dije que quería intentarlo. Ella dijo: "Vamos a buscar un libro". Fuimos a casa de uno de mis excompañeros de secundaria, que me prestó un ejemplar de Zhuan Falun.

Esa tarde empecé a leer el libro en casa. Me gustó mucho y pensé que el libro era genial. Al día siguiente fui a trabajar y seguí leyendo el libro por la noche. Al día siguiente tuve diarrea después de leer el libro, pero no sentí ninguna molestia. Fui a trabajar como de costumbre.

Cuando me fui a dormir la tercera noche, vi a un gran Buda sentado con las piernas cruzadas en otra dimensión. Más tarde entendí que era el Fashen del Maestro. Nunca había visto algo parecido, y no sabía qué estaba sucediendo.

En la noche del cuarto día, había leído la cuarta lección titulada Guanding (verter energía en la parte superior de la cabeza). Justo cuando me estaba durmiendo esa noche, escuché una voz que decía: "¡Dale guanding!". Sentí como si una gran mano vertiera energía en la parte superior de mi cabeza. Fue realmente como la descripción del libro. Una ráfaga de calor fluyó desde mi cabeza hasta los dedos de los pies. Pero en aquel momento no había terminado de leer el libro por primera vez, así que no sabía realmente lo que estaba sucediendo.

Pasé siete días leyendo Zhuan Falun. Cuando terminé el libro, mi diarrea cesó y ocurrió una cosa sorprendente: desaparecieron más de una docena de problemas graves de salud que tenía. No podía expresar mi emoción con palabras. Me pareció increíble. También desaparecieron las nociones ateas a las que me había aferrado durante décadas. Dije desde el fondo de mi corazón: "Quiero aprender Falun Dafa. Encontré al Maestro. Soy la persona más feliz del mundo".

¿Por qué estaba tan emocionada? Durante los primeros días de lectura del libro, tomaba diferentes medicamentos cada día. Sufría dolores de cabeza y no podía soportar las brisas frías, por lo que tenía que llevar un gran gorro de algodón desde el otoño. Los párpados se me caían durante todo el año. Tenía faringitis, nervios comprimidos en la columna vertebral y gastritis grave desde la secundaria. Tenía una rotura congénita de ligamentos en las vértebras lumbares, por lo que nunca podía realizar trabajos pesados; ni siquiera podía limpiar el suelo. También tenía artritis en las rodillas, dolor de talón y quistes incurables en las muñecas. No podía estar de pie durante mucho tiempo, así que las autoridades escolares me daban permiso para sentarme mientras daba clases a mis alumnos. Tenía más de una docena de enfermedades graves que no se podían curar. Me dolía todo el cuerpo.

Tenía que ir a menudo al hospital. No ganaba lo suficiente para pagar todos los medicamentos que necesitaba tomar. No tenía ninguna sensación de felicidad en mi vida. A veces me sentía desesperada porque todo el día estaba sufriendo.

Pero me recuperé completamente después de leer Zhuan Falun. Si no lo hubiera experimentado yo misma, no lo habría creído. La maravilla de Dafa y la compasión de Shifu solo pueden ser experimentadas por aquellos que se han beneficiado personalmente. Por eso he podido seguir a Shifu durante más de 20 años, y nunca he dejado de practicarlo. Le entregué mi vida a Shifu. Seguiré a Shifu para cultivarme hasta el final.

Luego ocurrieron experiencias asombrosas

A medida que seguía cultivándome, ocurrieron cosas aún más milagrosas. Durante los últimos casi 23 años, no he tomado una píldora ni me he puesto una inyección. Un poco más de tres meses después de empezar a practicar Falun Dafa, tuve síntomas de yeli (karma) de enfermedad. Ocurrió un domingo. Tenía fiebre y mi esposo lo notó. Me tomó la temperatura y vio que era de más de 40°C (104°F). Entró en pánico y me pidió que fuera al hospital.

"Dame media hora", le dije. "Iré al hospital si no me baja la temperatura en ese tiempo". Mi esposo estuvo de acuerdo.

Inmediatamente le rogué a Shifu: "Shifu. Por favor, permita que me baje la temperatura. Usted está eliminando el yeli (karma) para mí, lo sé. Gracias".

Tan pronto terminé de hablar, sentí que me había enfriado. Llamé a mi esposo para que me tomara la temperatura, ¡y realmente había regresado a la normalidad! Hace más de 20 años que mi esposo no me pide que vaya al hospital.

En otra ocasión, también un domingo por la tarde, tuve los síntomas de yeli (karma) de enfermedad. Mi esposo me dijo que me llevaría a visitar una zona turística. Él no sabía que yo no me sentía bien. Me llevé unos adhesivos de aclaración de la verdad.

Cuando salí del auto, aún sostenía mi vientre adolorido con una mano. Pero cuando terminé de pegar las calcomanías, mi estómago se sintió mucho mejor. Esa noche regresamos a casa, cené y me fui a trabajar al día siguiente.

En otra ocasión, me dolían las piernas y los pies. El dolor era agudo cuando mis pies tocaban el suelo. Pensé: "¿Qué debo hacer si no puedo hacer la meditación sentada en la noche? ¿Dejar de hacer los ejercicios? No, por mucho que me duela, tengo que hacerlos".

Apreté los dientes y puse una de mis piernas sobre la otra para hacer la meditación sentada. Después de una hora de hacer la meditación, mi ropa estaba empapada de sudor, pero pensé que era algo bueno. Shifu había eliminado mi yeli. Estaba bien y al día siguiente fui a trabajar como de costumbre. Durante más de 20 años, Shifu se encargó de disolver el yeli los fines de semana. Nunca he faltado al trabajo.

Maravillosas experiencias de los compañeros practicantes

Recuerdo que una compañera practicante tenía una extraña enfermedad cuando era joven. Cada primavera, cuando se enfermaba, sufría hasta que estaba a punto de morir. Menos de seis meses después de empezar a practicar Dafa, esa grave enfermedad que la había atormentado durante la mayor parte de su vida desapareció. Desde entonces, practica Dafa con diligencia.

Un joven practicante tenía una marca de nacimiento de color magenta que le cubría la mayor parte de la cara y hacía que su aspecto fuera muy desagradable. Tenía más de 30 años y no estaba casado. Después de empezar a practicar Dafa, su marca de nacimiento desapareció en poco tiempo. Más tarde, la gente que lo conocía le preguntaba dónde había recibido tratamiento para eliminarla. Él les decía que era porque practicaba Dafa. Muchas personas aprendieron Falun Dafa después de escuchar su historia.

Un compañero de 80 años que era sordo y analfabeto usaba una grabadora de casete para intentar escuchar las conferencias de Shifu. Pensó que sería bueno poder escucharlo. Apenas tuvo ese pensamiento, escuchó realmente la voz. Su sordera desapareció. Se hizo muy conocido en nuestra zona. Muchas personas que presenciaron su experiencia creyeron que Dafa lo había curado y, por lo tanto, aprendieron Dafa.

Otra practicante de 30 años sufría de asma bronquial congénita. No podía trabajar en el campo en ninguna época del año. Los aldeanos decían que era como una muerta viviente, que tomaba medicamentos y se inyectaba todos los días solo para mantenerse viva. Después de empezar a practicar Dafa, se recuperó en poco tiempo y acudía a nuestro lugar de práctica grupal todas las mañanas.

Otra practicante de casi 80 años nunca había ido a la escuela, ni siquiera un día, y no reconocía una palabra antes de practicar Falun Dafa. Le pregunté por qué podía leer los libros de Dafa.

Dijo: "Shifu me enseñó a leer. Me sentía ansiosa cuando veía a otros practicantes aprendiendo Dafa. Pensé que sería estupendo poder leer. Más tarde, Shifu comenzó a enseñarme a leer. A veces, por las mañanas, veía notas en la rendija de mi puerta. Miraba las palabras de las notas y podía reconocerlas. Esto ocurría casi todos los días".

Además, sus compañeros estudiaban el Fa en su casa todas las tardes, y ella los seguía atentamente mientras leían. Un invierno, pudo leer Zhuan Falun sola. Gracias a eso, muchas personas la visitaron y le pidieron que leyera Zhuan Falun para ver si los rumores que habían escuchado eran ciertos. Eso convenció a muchos de practicar Falun Dafa.

Otra practicante tenía más de 80 años. Cuando hicimos los ejercicios juntas, me di cuenta que tenía todo el pelo blanco. Todos le decían: "Tiene un pelo tan bonito". Pero después de hacer los ejercicios durante unos 10 días, nos dimos cuenta que las raíces de su pelo eran negras. Aproximadamente la mitad de su cabello cambió de color y crecía día a día.

Cuando llevaba un mes practicando, ya no tenía el pelo blanco y parecía más joven. Podía meditar durante más de una hora. A sus 90 años, aún tenía buena salud y era capaz de vivir de forma independiente.

Más de 50 personas asistían con regularidad a nuestro sitio de práctica grupal antes de que el Partido Comunista Chino (PCCh) iniciara la persecución. Todos ellos podían relatar experiencias extraordinarias de aquella época. Solo he compartido algunas.

Han pasado veintitrés años. Me siento feliz y afortunada cada vez que recuerdo los días que aprendí inicialmente Dafa. Guardaré estos preciosos recuerdos en mi corazón y me animaré. No importa lo largo que sea el camino que queda, continuaré mi viaje, haré bien las tres cosas, cumpliré mi voto y seguiré a Shifu para regresar a mi verdadero hogar.

Trasfondo: ¿Qué es Falun Dafa?

Falun Dafa (también conocido como Falun Gong) fue presentado por primera vez al público por el Sr. Li Hongzhi en Changchun, China, en 1992. Esta disciplina espiritual ahora se practica en más de 100 países y regiones. Millones de personas han seguido las enseñanzas—que se basan en los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia— y han aprendido los cinco ejercicios experimentando mejoras en la salud y el bienestar.

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