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Los hijos de los practicantes de Falun Dafa conmemoran 22 años de persecución y recuerdan a los que perdieron la vida

Ago. 2, 2021 |   Por Liu Yang, corresponsal de Minghui

(Minghui.org) Chen Fayuan, una estudiante de bachillerato de 16 años de Nueva York, habló con valentía en el podio durante una manifestación pacífica en Washington, D. C., el 16 de julio de 2021, para conmemorar los 22 años de persecución a Falun Dafa en China. Describió lo que ella y su familia habían pasado durante la persecución.

"Cuando recibí la noticia del secuestro de mis padres, me quedé en shock y mi cuerpo se entumeció. Las lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas y me sentí desolada. Estaba asustada, enfadada, triste, sola y deprimida. Tenía todo tipo de emociones corriendo por mi cuerpo y me sentía como si estuviera perdida". "Si no hubiera cultivado Falun Dafa, sin duda guardaría rencor y resentimiento contra esos represores y policías malvados. ¿Cómo podría olvidar el modo en que nos trataron a mis padres y a mí?". dijo.

Chen Fayuan hablando en la manifestación pacífica en Washington, D. C.,
el 16 de julio de 2021

Esa misma noche, más de 1000 practicantes de Falun Dafa asistieron a una vigilia a la luz de las velas en el Monumento a Washington en D. C. Antes de que anocheciera, los practicantes encendieron velas para conmemorar a los practicantes que fueron perseguidos hasta la muerte en China por practicar Falun Dafa.

Xu Xinyang, de 19 años, estudia en otro estado. Condujo más de dos horas para reunirse con su madre en Washington, D. C., para poder asistir juntas a la vigilia a la luz de las velas. "Mi padre fue asesinado por sus creencias. He venido aquí hoy para recordarlo", dijo.

Xu Xinyang (izquierda) y su mamá Chi Lihua (derecha) sosteniendo la foto de Xu Dawei quien fue torturado hasta la muerte por su creencia.

El padre de Xu Xinyang, Xu Dawei, fue condenado a ocho años de prisión por producir material de Falun Gong. Cuando salió de la cárcel había sufrido una crisis mental y estaba demacrado. Murió en menos de dos semanas a la edad de 34 años.

"Otras personas tienen padres, pero yo no. Cuando miro hacia atrás, me enorgullece que mi padre no haya renunciado a sus creencias a pesar de haber sido encarcelado y maltratado durante tanto tiempo", dijo.

Mirando los retratos que tenían los practicantes a su alrededor de otros practicantes que fueron torturados hasta la muerte, Xu dijo: "Siempre pensé que yo había sufrido más la persecución. Hoy, al ver a tantos practicantes con fotos de las víctimas, hay una historia detrás de cada rostro: todos fueron brutalmente torturados. Quizá sufrieron incluso más que yo, con la diferencia de que hoy tengo la oportunidad de hablar y hacer algo al respecto".

Según las estadísticas del sitio web de Minghui, 4677 practicantes de Falun Dafa han sido perseguidos hasta la muerte en los últimos 22 años. Innumerables practicantes han sufrido la pérdida de miembros de su familia y han visto sus familias destrozadas. Sin embargo, han mostrado una extraordinaria fuerza y valentía al enfrentarse al mal. Creen firmemente en "Verdad-Benevolencia-Tolerancia".

No pudo ver a sus padres durante 22 años

Los practicantes de Falun Dafa realizaron una manifestación pacífica en la Plaza del Parlamento de Londres, frente a las Casas del Parlamento, el 18 de julio de 2021. Yu Minghui, de 34 años, fue separada de sus padres cuando tenía 12 años. Su padre y su madre fueron condenados a 15 y 11 años de prisión, respectivamente, por su creencia en Falun Dafa. Ambos fueron gravemente torturados.

Yu Minghui expone los brutales métodos de persecución del PCCh que utilizaron con sus padres.

"En 2016, mi padre fue liberado. Mis padres se reunieron por fin después de 17 años de separación. El día que mi padre salió de la cárcel, me alegré mucho de poder hablar con ellos por teléfono. Creí que volvía a tener un hogar", dijo.

"Sin embargo, los buenos días no duraron mucho. Descubrimos que el teléfono estaba intervenido. Había eco en el teléfono. A veces podía oír otra voz e incluso otra persona podía hablarme. Era como una sirena de policía que nos recordaba que mis padres seguían viviendo bajo vigilancia". La persecución continúa. Una hora después de hablar con mis padres, desaparecieron", dijo.

"Antes de las Navidades del año pasado, mi madre, Wang Meihong, volvió a ser detenida ilegalmente. Tras permanecer detenida durante cinco meses, fue condenada a cuatro años de prisión.

"La pesadilla de 22 años continúa. No sé cuándo terminará la persecución y cuándo mi familia podrá vivir como la gente normal. Pero también me siento aliviada en mi corazón, porque, al igual que otros practicantes de Dafa, mis padres tienen una creencia firme, que les sostiene para perseverar".

Esta persecusión no debería suceder

Huang Guohua, practicante de Falun Gong, trabajaba en la industria del vidrio antes de que comenzara la persecución. Tenía un futuro prometedor y una familia feliz. Su esposa Luo Zhixiang era diseñadora de edificios en la sede de una empresa de desarrollo agrícola en la provincia de Guangdong. El Sr. Huang y su esposa, que estaba embarazada de su segundo hijo, fueron detenidos por sus creencias en 2002. Soportó casi tres años de detención ilegal y tortura física y mental antes de huir de China en 2004. Su esposa y su hijo no nacido fueron asesinados por el PCCh en 2002.

Luna, hija de Huang Guohua y Luo Zhixiang, reside ahora en Nueva Zelanda. Tenía dos años cuando mataron a su madre y a su hermano no nacido. "Nunca entendí realmente por qué yo no tenía una madre mientras que otros niños sí la tenían". "Siempre fue un hecho que acepté de niña, pero nunca entendí realmente su significado", dijo.

"Sé por fotos que había asistido al funeral de mi madre cuando era pequeña. No fue hasta que crecí que entendí que una gran parte de mi familia se había ido... mi madre y un hermano menor que nunca llegué a conocer. Mi padre me contó una historia de cuando tenía tres años. Vi a una madre abrazar a su hijo en el autobús y de repente me puse a llorar y a preguntar por qué otros niños tenían una madre y yo no".

La pérdida de su madre cuando era tan joven la afectó profundamente. "Como tantas otras familias afectadas por la persecución, no soy la única que ha perdido a alguien. Muchos practicantes de Falun Gong han perdido a sus hijos, cónyuges, padres y a sus familiares. El trauma permanece con ellos, incluso años después, al igual que yo. Aunque no puedo traer de vuelta a mi madre, puedo hablar y compartir mis experiencias, para que la gente sea consciente, para que se pueda hacer algo al respecto. En primer lugar, la persecución nunca debería haber ocurrido. Nadie debería morir por sus creencias", dijo.

Luna condena al PCCh por el asesinato de su madre

San Francisco: Necesitamos detener la persecisión

Zhenni Zhang comenzó a practicar Falun Dafa en China en 1994. Dijo que después de que su hermana y sus padres practicaran durante unos meses, sus enfermedades crónicas desaparecieron. "Me sumergí en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolernacia a una edad temprana, y nunca me perdí", dijo.

La madre de Zhang era profesora universitaria. Fue secuestrada tres veces por practicar Falun Dafa, torturada y luego obligada a retirarse sin su pensión. Su padre era investigador en un instituto. También fue secuestrado y su cuenta bancaria fue congelada. Su hermana fue despedida de su trabajo.

Al ver cómo el PCCh calumniaba a Falun Dafa y cómo sus medios de comunicación publicaban continuamente rumores y propaganda, la Sra. Zhang decidió ir a Beijing para apelar. Envió una carta al régimen para hacerles saber cómo su familia se había beneficiado de la práctica de Dafa.

"Como resultado, me esposaron y me encerraron en un centro de detención. Hice una huelga de hambre durante seis días. Después de ser liberada, me expulsaron de la escuela y no pude completar mi educación universitaria", dijo.

Casi todos los practicantes de Falun Dafa que conocía fueron acosados, secuestrados y detenidos. Se enteró de que dos profesores universitarios que conocía habían sido torturados hasta la muerte. Una de ellas era profesora de matemáticas, y su marido había sido condenado a 12 años de prisión. Su hija de cuatro años quedó huérfana.

"Ese fue sin duda el periodo más oscuro de mi vida", dijo Zhang. Dijo que la policía del PCCh siguió acosando a su familia y la amenazó con secuestrarla y llevarla a un centro de lavado de cerebro.

"Nos vimos obligados a abandonar nuestro hogar". "Durante esos 11 años de desplazamiento, cada momento transcurrió bajo una gran presión y miedo. No sabíamos qué nos haría la policía si nos encontraba. Nos preocupaba que un día nos volvieran a capturar y "desapareciéramos", dijo.

Zhang Zhenni en la manifestación pacífica de San Francisco, California.

Zhang Zhenni habló en la manifestación pacífica realizada en San Francisco, California, para conmemorar los 22 años de persecución en China. Dijo que lo que ella vivió no fue en absoluto excepcional. Muchos otros practicantes presentes en la manifestación tenían familiares que fueron torturados hasta la muerte en China. A algunos los torturaron y a otros casi les sustrajeron sus órganos.

El PCCh lleva 22 años persiguiendo a Falun Dafa. La cruel persecución y el asesinato de personas inocentes continúan en China. Ahora, cada vez más personas se manifiestan en favor de la justicia. Más de un millón de personas han firmado una petición pidiendo la desintegración del PCCh. Y hasta la fecha, más de 380 millones de chinos ha renunciado al PCCh y a sus organizaciones juveniles afiliadas.

Zhang Zhenni hizo un llamamiento a la gente de todo el mundo para que trabajen juntos para detener la persecución del PCCh contra Falun Gong.

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