(Minghui.org) Mi suegro es un practicante veterano, que comenzó a practicar Falun Dafa antes de 1999. Fue perseguido, arrestado y detenido por el malvado partido muchas veces, pero logró superar toda la persecución.

Sin embargo, ahora ha desarrollado yeli de enfermedad debido a la persecución de las viejas fuerzas. Está postrado en cama desde fines del año pasado.

Cuando regresé a mi ciudad natal para visitarlo, encontré que había dejado de estudiar o escuchar el Fa. Vi el pequeño reproductor de audio que un compañero le había regalado junto a su colcha.

Le gustaba escucharlo. Descubrí que estaba sin funcionar, así que conseguí un cargador para cargarlo y descubrí que la batería no retenía carga.

Más tarde encontré un reproductor de audio MP3 para él. Se me cayó accidentalmente antes de dárselo, lo que rompió su placa frontal y distorsionó el orificio de carga. Volví a abrir el orificio de carga, pero el cable seguía sin poder insertarse.

Pensé: "Esto no servirá. Debe ser una interferencia de las viejas fuerzas, ya que no quieren que escuche al Fa".

Así que pedí ayuda al Maestro. Tan pronto como tuve ese pensamiento, el agujero de carga se restableció solo y el conector entró. Me sentí inmensamente agradecida al Maestro.

Le comenté el incidente a una compañera practicante. Me dijo que su tía solía estudiar el Fa, pero que había dejado de hacerlo hacía bastante tiempo.

La instó a retomarlo, pero cuando ponía el audio de su MP3 para escuchar el Fa, solo reproducía anuncios de medicina.

La compañera le preguntó si estaba tomando medicamentos en secreto. Ella, avergonzada, admitió que sí.

La compañera practicante envió pensamientos rectos con su tía y pidió ayuda al Maestro. El reproductor de audio MP3 volvió a funcionar con normalidad.

La compañera practicante se dio cuenta de que eran las viejas fuerzas las que interferían; utilizaban el apego de la practicante a la medicina para perseguirla y no dejarla escuchar el Fa.

Una compañera practicante en un pueblo agrícola no ha sido diligente durante algún tiempo. Ella solo pensaba en recoger algodón con la gente común para ganar dinero.

Rara vez estudiaba el Fa y no hacía las tres cosas. Un día encendió el reproductor de audio MP3 para escuchar el Fa, pero solo escuchó al equipo que transmitía sobre la recolección de algodón.

Se sorprendió y se preguntó qué estaba pasando. Un compañero le recordó: "El Maestro está insinuando que te estás entregando a la vida de la gente común y pensando en recoger algodón todo el día".

Ella se iluminó inmediatamente, envió pensamientos rectos y pidió ayuda al Maestro. El reproductor de audio MP3 volvió a la normalidad y ella pudo volver a escuchar las conferencias del Maestro.

Me di cuenta de que las viejas fuerzas vigilan a cada practicante en todo momento. Cuando uno se relaja y no actúa de acuerdo al Fa, ellas te arrastrarán, sin importarles el mal que tengan que hacer.

Mientras seamos firmes en nuestra creencia en el Maestro y en el Fa, el Maestro estará a nuestro lado y nos ayudará.

El propósito de escribir esto es compartirlo con los compañeros practicantes, y esperar que aquellos con situaciones similares presten atención y eviten pérdidas innecesarias que afecten su cultivación.

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