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Nueva York: el condado de Orange celebró su Conferencia de Intercambio de Experiencias de Falun Dafa de 2021

Mayo 13, 2021 |   Por un practicante de Falun Dafa en Nueva York

(Minghui.org) Como parte de las celebraciones para conmemorar el 22.º Día Mundial de Falun Dafa, los practicantes de Falun Dafa del norte del estado de Nueva York celebraron el 8 de mayo su Conferencia de Intercambio de Experiencias de Falun Dafa del condado de Orange de 2021. Dieciocho practicantes hablaron de sus experiencias al dar a conocer Falun Dafa y de la eliminación de sus apegos.

El 8 de mayo, el condado de Orange celebró la Conferencia de Intercambio de Experiencias de Falun Dafa de 2021.

Los practicantes hablaron de sus experiencias en su cultivación.

Una niña de diez años hace llamadas a China para aclarar la verdad

Alina Chen, de diez años, está haciendo llamadas telefónicas a China para aclarar la verdad y ayudar a la gente a renunciar al partido comunista chino (PCCh) desde 2019. Compartió su experiencia de crecer en el proceso.

Alina dijo: "Estaba un poco asustada la primera vez que llamé. Pero después de hacer muchas llamadas, mi miedo disminuyó. Cuando llamé, mucha gente se limitó a escuchar.

"Un día, un joven que trabajaba en una empresa respondió a mi llamada. Me dijo: 'Hermanita, estoy en el trabajo. Sé todo lo que has dicho. ¡Gracias! Presta atención a la seguridad'. Al terminar la llamada, me pareció que era muy amable".

Alina dijo que una vez un hombre de mediana edad respondió a su llamada: "Le aclaré la verdad. No me escuchó, sino que me insultó. Después de colgar, me sentí muy triste. Mi tía me dijo que esta persona era malvada y me había dado mucha virtud. Al oír eso, me tranquilicé y seguí llamando a la gente".

Creando conciencia frente al consulado chino en Nueva York

La Sra. Wu habló de la superación en las dificultades para participar en la colocación de pancartas frente al consulado chino en Nueva York para crear conciencia sobre la persecución a Falun Dafa por parte del PCCh.

Sale de casa a las 5 de la mañana y vuelve a las 4 de la tarde. Durante la pandemia de coronavirus, con el servicio de autobuses públicos reducido, aún se las arregló para ir al consulado chino.

Dijo que no tenía hambre ni estaba cansada después de hacer los ejercicios, enviar pensamientos rectos y sostener las pancartas durante más de seis horas frente al consulado. Por el contrario, cada vez que iba, sentía que era milagroso. Al mirarse introspectivamente consideró que, hiciera lo que hiciera, tenía que hacerlo bien. Sintió que el Maestro Li (el fundador de Falun Dafa) la animaba y la bendecía.

En invierno, hace mucho frío en el exterior del consulado chino en Nueva York. Al principio le preocupaba si podría estar de pie al aire libre durante varias horas. Recordó cómo otros practicantes habían permanecido de pie frente al consulado chino durante años, así que perseveró alentada por otros practicantes.

Cómo deshacerse de la adicción al teléfono inteligente

Feng Ming es un estudiante de secundaria. Dice que, a principios de marzo de 2020, debido a la pandemia, los cursos escolares se ofrecieron en línea. Durante unos siete meses (de marzo a septiembre), se volvió adicto a jugar con su teléfono móvil. Era como si el teléfono estuviera pegado a su mano y no hubiera forma de soltarlo.

Dijo que mientras escuchaba los cursos online en casa, los objetos que le rodeaban (especialmente su teléfono) le distraían y tenía dificultades para concentrarse y escuchar a su profesor. En su lugar, a menudo miraba por la ventana o navegaba por Internet. Su mente se llenaba de pensamientos de búsqueda de placeres materiales.

Siete meses después, la escuela volvió a abrir. Después de volver a la escuela, Ming empezó a leer Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa, y se dio cuenta de que Dafa es la base para el mejoramiento de uno mismo. Trabajó para eliminar su apego a las redes sociales y a Internet.

"Esta experiencia me ayudó a darme cuenta de que debo mejorar mis valores morales basados en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Debo comportarme como un auténtico cultivador. Necesito identificar y eliminar proactivamente mis apegos. Solo así podré ayudar a los que me rodean", dijo.

Mirando hacia dentro

La Sra. Dai comentó que tenía una personalidad directa, pero no se dio cuenta de que había muchas nociones humanas detrás de su franqueza.

Cuando observaba las deficiencias de los demás, las señalaba directamente con un tono lleno de queja e impaciencia. Más tarde, cuando sus compañeros se lo recordaron, comprendió que debía seguir los requisitos del Fa.

"Al mirar hacia dentro, descubrí que tenía un apego a mí misma". "Creí que estaba ayudando a los demás practicantes a mejorar al señalarles directamente sus apegos. Si no seguían mis sugerencias, los culpaba y me quejaba de ello. Esto no era compasivo", dijo.

Comentó que también identificó sus otros apegos, como la impaciencia, la intolerancia, el desprecio por los demás, los celos y la mentalidad competitiva.

Afirmó que, a través de los conflictos, mejoró su xinxing, se volvió abierta de mente y aumentó su capacidad para soportar las dificultades.

Alcanzando realmente el reino de la abnegación

Larry Li compartió su entendimiento sobre cómo resolver los problemas en los proyectos. Dijo que los practicantes que participan en proyectos para validar Dafa no deben cultivarse solo desde la perspectiva de la cultivación personal. Manejar los problemas de esa manera es también una manifestación de la característica egoísta del viejo universo, dijo; en cambio, uno debe pensar en los problemas y tomar decisiones desde una perspectiva que sea beneficiosa para el desarrollo del proyecto.

El Sr. Li se dio cuenta de que para alcanzar verdaderamente el reino del desinterés se requiere una sólida cultivación. Diferentes apegos pueden manifestarse en diferentes reinos. A veces pensaba: "No he alcanzado ese nivel y mi bondad no es suficiente. Es mejor que no señale el problema". Pero luego pensaba: "El Maestro me ha hecho ver el problema para que pueda señalarlo. Soy responsable del proyecto, no de validarme. Incluso si no tengo una gran compasión, señalar el problema también jugará un papel porque mi pensamiento es recto".

Contó que, en este proceso de cultivación, no dejaba de enfrentarse a conflictos y de mirar hacia dentro. Poco a poco comprendió que todas estas pruebas habían sido arregladas por el Maestro. Reunir en un proyecto a un grupo de practicantes de diferentes edades, diversas experiencias de vida, diferentes patrones de pensamiento y diferentes personalidades permite que sus características choquen entre sí y expongan sus apegos.

Dijo que, si cada practicante puede aprovechar estas oportunidades para cultivarse bien, puede ayudar mejor al proyecto y también cumplir con el título sagrado de discípulo de Dafa.

El Sr. Li agregó que cada practicante representa su propio sistema cósmico y que quizás el carácter de cada practicante representa las características de ese sistema. Es imposible que todo el mundo tenga el mismo carácter, por lo que los conflictos y las deficiencias que encontramos en el proceso de cultivación nos ayudan a mejorar, y todos deberían tener compasión por los demás.

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