(Minghui.org) Cinco residentes de la ciudad de Yingtan, provincia de Jiangxi, China, fueron arrestadas el año pasado en una redada policíaca y a principios de febrero de 2021 han sido condenadas a prisión de dos a ocho años por mantener su fe en Falun Dafa.

Falun Dafa, también conocida como Falun Gong, es una disciplina de cuerpo y mente perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

Al menos ocho practicantes fueron arrestados entre mediados y fines de marzo del 2020. Dos oficiales obligaron a la señora Lu Jinrong a arrodillarse en el suelo y la fotografiaron. Una novena practicante, la señora Tang Xiaobao, de unos 70 años, falleció a principios de abril de 2020 después de ser acosada por la policía en la redada.

Además de monitorear y seguir a los practicantes, la policía también instaló dispositivos de vigilancia 5G en sus puertas. Cada vez que los practicantes abrían la puerta, el personal del comité residencial era notificado en sus teléfonos celulares. También han utilizado herramientas de vigilancia similares en ciudades cercanas, incluidas Nanchang y Jiujiang.

La oficina 610 y el comité de asuntos políticos y legales, las dos agencias extralegales y extrajudiciales encargadas de perseguir a Falun Dafa, movilizaron a las policías local y de tránsito, al personal de gestión urbana, a los trabajadores de saneamiento y al personal del comité residencial para realizar los arrestos.

Cinco de los practicantes, las señoras Li Meilian, Xu Huihua, Lu, Zhang Jinrong y Wang Yumei, tuvieron sus arrestos aprobados el 22 de abril de 2020. La policía presentó sus casos a la procuraduría de la ciudad Guixi acusándolas de "socavar la aplicación de la ley con una organización de culto", un pretexto estándar usado para criminalizar a los practicantes de Falun Dafa.

La señora Li fue trasladada a un hospital el 6 de mayo de 2020. Los otros practicantes permanecen detenidos en el centro de detención de la ciudad de Yingtan.

Minghui.org confirmó el 5 de febrero de 2021 que la señora Li ha sido condenada a ocho años, la señora Xu a cinco años y dos meses, la señora Zhang a dos años y ocho meses, la señora Wang a dos años y tres meses y la señora Lu a dos años.

El estado de otros tres practicantes objeto de la misma redada policial, incluidas las señoras Wei Qinglan, Wang Yumei y el señor Ai Guoxiang, también está por ser investigado.

El arresto del señor Ai dejó a su familia en una profunda angustia. Como su hija es aún pequeña, su esposa, que se queda en casa para cuidar de su hija, no pudo seguir administrando su tienda de conveniencia, así que se vio obligada a cerrarla y ponerla a la venta.