(Minghui.org) La versión de Minghui.org en chino recientemente empezó a mostrar el número de clics que reciben sus artículos. Muchos practicantes empezaron a comentar los artículos que recibían más clics y algunos incluso se molestaron. Algunos practicantes pensaron que la calidad de estos artículos populares no era tan buena como la de los que habían enviado pero que nunca se publicaron. Se exaltaron tanto que incluso criticaron a los editores. Otros practicantes leían los artículos "populares" simplemente por curiosidad o porque no querían quedarse atrás en la cultivación ya que otros los habían leído.
Creo que el número de clics refleja el estado de cultivación de los practicantes fuera de China. Cuando digo practicantes fuera de China, incluyo a los practicantes que vinieron de China. Los practicantes de China casi nunca visitan el sitio web de Minghui directamente por razones de seguridad y censura técnica, pero varios acceden a la información de Minghui indirectamente, a través de otros practicantes o de artículos impresos.
Los tipos de artículos más visitados reflejan la curiosidad, los oficios y los intereses personales de los practicantes de fuera de China.
La mayoría de los artículos que tratan sobre cómo salvar a la gente, detener la persecución, ayudar a otros a abandonar el partido comunista chino (PCCh) y los materiales que ayudan a aclarar la verdad tienen muy pocos clics. Estas bajas cifras reflejan la cantidad de practicantes que se comprometen a esclarecer la verdad en primera línea cada día; probablemente también explican por qué la cantidad de personas que renuncian al PCCh se ha incrementado lentamente.
Los artículos sobre la persecución fueron los que tuvieron menos clics. Cuando comenzó la persecución, a muchos practicantes de fuera de China no les gustaba leerlos. Afirmaban que se sentían incómodos por la brutalidad que exponían los artículos. Les gustaba leer artículos sobre experiencias de cultivación, actividades en el extranjero, cultura tradicional y música, que les permitían experimentar la belleza de Falun Dafa. El problema es que actuaban como si oponerse a la persecución no fuera asunto suyo.
Después de 22 años de persecución, es evidente que si los practicantes se oponen a la persecución fuera de China ayuda a eliminar el mal y a aliviar el sufrimiento de los practicantes en China. El efecto es tremendo. Pero muchos todavía tenemos la mentalidad y el hábito de no leer los artículos sobre la persecución. ¿Acaso la cultivación no consiste en romper las nociones, ser compasivos y mejorarnos?
Hay otras situaciones similares. Muchos practicantes suelen participar activamente en actividades como los desfiles de autos. Sin embargo, cuando se trata de aclarar la verdad de forma individual y ayudar a otros a renunciar al PCCh, pocos quieren afrontar la tarea.
Esto lo vi cuando los practicantes llamaban a China para aclarar la verdad. Un practicante al teléfono se limitó a leer de un papel, mientras que docenas de otros practicantes se limitaron a escuchar, diciendo que estaban aprendiendo. Comparados con los practicantes que se ofrecieron a llamar a la gente en China al principio de la persecución, ¡hay una enorme diferencia! En aquel tiempo, los practicantes estaban ansiosos por decirle a la gente en China lo que realmente estaba sucediendo. Hablaban con el corazón, no con guiones. Querían salvar a la gente en China, salvaguardar el Fa y eliminar al mal. Esa energía y poder del Fa realmente beneficiaba a los que escuchaban y se ganaba su respeto.
Un practicante de Nueva York hizo las cuentas: Si quisiéramos salvar a 500 millones de personas, basándonos en el número diario de personas que renuncian al PCCh, ¡nos tomaría otros 8,5 años! ¿Shifu esperará tanto tiempo si seguimos priorizando la comodidad, nuestros intereses personales y nuestros hábitos?
Shifu dijo una vez:
“El número de los que alcanzaremos la perfección es, como yo lo veo, lejos de lo que es suficiente. Originalmente yo había planeado tener por lo menos cincuenta millones; nunca les había dicho esto antes (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional de Washington D.C., Guiando el Viaje).
Si 50 millones de practicantes alcanzarán la perfección, ¿estaremos entre ellos? ¿Qué haremos si no?
Alguien puede pensar: "Mientras mi vida sea buena y me esfuerce en la cultivación, estaré bien". En mi opinión, esto es un pensamiento humano. Si pudiéramos ver la verdad del universo, pensaríamos de forma diferente. Ahora, algunos practicantes lo dejarían todo para proporcionar lo mejor a sus hijos y se golpearían a sí mismos si no pueden. Si no hacen lo que juraron hacer por los seres conscientes de su universo, nada ayudará a detener el dolor y el arrepentimiento cuando descubran que la vida y el futuro de sus hijos se han perdido porque los practicantes no hicieron bien su cultivación.
Todo lo que ocurre frente a nosotros es para que lo cultivemos. Si vemos las cosas de forma que nos lleve a culpar a los demás, no nos centramos en mejorarnos ni en salvar a la gente. No siempre hay una segunda oportunidad. Recomiendo a todo el mundo que estudie Escrituras esenciales para mayor avance y seguramente podremos identificar algunos de nuestros apegos después de leerlo.
Nota del editor: El artículo representa únicamente la opinión del autor. Se recomienda la discreción de los lectores.
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