(Minghui.org) Knack, la revista más influyente de la región belga de Flandes, con casi medio millón de lectores, publicó el 25 de febrero un artículo sobre la exposición de cuerpos humanos y su relación con las violaciones de derechos humanos en China.
Escrito por Trui Engels y basado en información de la Coalición Internacional para Acabar con los Abusos en los Trasplantes en China (ETAC), el artículo explica que los cuerpos plastinados expuestos en el Antwerps Sportpaleis procedían de personas que habían sido detenidas, torturadas y asesinadas en China.
Un artículo de Knack, una importante revista belga, sobre la sustracción forzada de órganos en China.
Elke Van den Brande, directora nacional de ETAC en el Benelux (Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo), dijo que cualquier exposición moralmente responsable debe revelar las identidades auténticas de los cuerpos y las causas de la muerte. También dijo que el organizador de la mencionada exposición de cuerpos había reconocido que se trataba de cuerpos no reclamados procedentes de China y que no tenían los documentos exigidos por las organizaciones internacionales.
Las pruebas indican que los cuerpos plastinados no procedían de donaciones ni de personas no reclamadas. De hecho, el ETAC cree que proceden de presos de conciencia de cárceles y campos de trabajo cercanos a la empresa de plastinación de la ciudad de Dalian, provincia de Liaoning. La empresa se fundó el mismo año en que el partido comunista chino lanzó una campaña nacional contra Falun Dafa, un sistema de meditación con unos 100 millones de practicantes.
Un gran número de practicantes han sido detenidos, torturados o incluso asesinados por defender su fe en Falun Dafa durante las dos últimas décadas, periodo en el que la industria de la plastinación de cuerpos en China despegó y el número de trasplantes de órganos aumentó exponencialmente. Van den Brande dijo que el momento de la creación de la empresa de plastinación de Dalian sugiere que los practicantes de Falun Dafa han sido el principal objetivo desde el comienzo de la persecución y que la mayoría de los cuerpos expuestos eran de practicantes de Falun Dafa.
La industria de la plastinación en China tiene unos 20 años de historia, continuó Van den Brande. Dalian es un importante centro de trasplante de órganos, plastinación y de persecución a Falun Dafa.
El Fiscal General de Nueva York emitió una orden en 2008 que exigía a los organizadores de exposiciones de cuerpos que pusieran un cartel en la entrada indicando que no podían verificar si esos cuerpos procedían de cárceles chinas. Por razones éticas, Van den Brande también recomienda que se prohíba la importación de cuerpos plastinados procedentes de países con pena de muerte, incluida China. Algunos gobiernos han aplicado esta práctica, como Francia, la República Checa, Israel, Hawai y otros estados de Estados Unidos.
Van den Brande refutó la afirmación de algunos de que tal exposición tiene beneficios educativos o que estos cuerpos son "respetados". Dijo que el cuerpo de una persona asesinada nunca puede exhibirse de forma respetuosa y que solo tienen sentido con fines educativos cuando no hay crímenes de por medio.
El PCCh ha sido acusado de matar a presos de conciencia en las últimas décadas. Los datos muestran que, tras el inicio de la persecución contra Falun Dafa en 1999, fueron detenidos entre 500.000 y un millón de practicantes entre 2000 y 2001.
Van den Brande dijo que la policía ha estado involucrada. Un correo electrónico que había obtenido decía que acababan de llegar a la empresa de plastinación de Dalian dos cadáveres frescos de primera calidad, y que los hígados habían sido extraídos apenas unas horas antes. La exposición incluye cuerpos a los que les falta un hígado o un riñón.
El PCCh anunció en 2015 que dejaría de utilizar los órganos de los presos y ha publicado datos que muestran que los órganos se tomaron de donantes "voluntarios", pero el análisis muestra que esas cifras fueron falsificadas y que el PCCh ha mentido a la comunidad internacional.
Los investigadores se han puesto en contacto con hospitales chinos después de que en 2006 se denunciara por primera vez la sustracción forzada de órganos a presos de conciencia por parte del PCCh. Los médicos de muchos hospitales admitieron que los practicantes de Falun Dafa eran utilizados como fuente de órganos. Investigaciones posteriores en 2018 y 2019 revelaron que los órganos estaban fácilmente disponibles y se obtenían de adultos jóvenes.
Un médico del hospital Yuhuangding de la ciudad de Yantai, en la provincia de Shandong, dijo en 2017 que había eludido el sistema oficial de distribución de órganos para obtenerlos y que también había realizado cientos de trasplantes.
Un tribunal independiente de Londres determinó en 2019 que la sustracción de órganos se ha estado produciendo en China durante muchos años y que los practicantes de Falun Dafa probablemente eran la principal fuente de estos órganos.