(Minghui.org) Cuatro residentes de la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, fueron condenados a prisión el 25 de enero de 2021 por su fe en Falun Gong. Todos ellos han recurrido las sentencias.
Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una práctica para mente y cuerpo perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.
Zhou Guoqiang fue condenado a 8,5 años y a una multa de 30.000 yuanes.
El Sr. Zhang Bo fue condenado a 3 años y a una multa de 8.000 yuanes.
Xiong Youyi fue condenado a 2,5 años y a una multa de 10.000 yuanes.
El Sr. Li Jun fue condenado a 2 años y a una multa de 5.000 yuanes.
Los cuatro practicantes trabajaban para la Oficina de Gestión de la Propiedad de Xi Garden, en el distrito de Donghu. Fueron detenidos juntos el 26 de diciembre de 2018. La policía saqueó sus casas y les confiscó un total de más de 80.000 yuanes en efectivo.
Los cuatro practicantes fueron amarrados en sillas metálicas e interrogados en la comisaría de Yujiatou. Posteriormente fueron trasladados al centro de detención de Wuchang, donde permanecieron dos años antes de ser condenados.
El padre del Sr. Zhang, de 78 años, quedó tan devastado por su detención que cayó enfermo y tuvo que ser hospitalizado. Falleció el 13 de abril de 2019.
Los practicantes comparecieron ante el tribunal del distrito de Wuchang el 24 de diciembre de 2020. Un total de cinco abogados los representaron y se declararon no culpables por ellos. Los abogados argumentaron que ninguna ley ha criminalizado a Falun Gong en China y que sus clientes hacían uso del derecho a la libertad de creencia al practicar Falun Gong.
Los practicantes fueron acusados de "socavar el orden público con una organización de culto", un pretexto estándar utilizado para criminalizar a Falun Gong. El abogado del Sr. Zhang preguntó al procurador qué ley había socavado su cliente y de qué modo. El procurador no pudo responder.
Los abogados también señalaron que las pruebas presentadas por el procurador contenían un relato de 11 páginas de un testigo. Pero las diferentes páginas tenían diferentes firmas del mismo nombre y el supuesto testigo no se presentó en el tribunal para el interrogatorio. "¿Quién es este testigo? ¿Es una persona real o la prueba fue fabricada?", preguntaron los abogados. Pero el procurador tampoco respondió a su pregunta.
Los practicantes declararon en su propia defensa. Negaron haber actuado mal simplemente por practicar Falun Gong y pidieron la absolución.
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