(Minghui.org) Se identificaron dos casos de coronavirus en la ciudad de Heihe, provincia de Heilongjiang, en la tarde del 28 de diciembre de 2020. Uno de ellos es un estudiante de último año de secundaria sin ningún síntoma, y otro es la abuela del estudiante que vive en la misma casa.
En los días siguientes se confirmaron más casos. Las autoridades chinas informaron el 3 de enero de 2021 que 13 casos habían sido confirmados hasta la media noche del 2 de enero. No está claro si los 13 casos eran de la ciudad de Heihe.
Las pruebas de ADN de las muestras del estudiante y de la abuela dieron positivo según el Segundo Hospital de Heihe. Sus muestras fueron enviadas a las agencias provinciales. Según la política sobre el virus en China, los casos positivos solo pueden denominarse “casos sospechosos” hasta que las autoridades provinciales lo verifiquen y los incluyan oficialmente en la lista de “casos confirmados”.
Otro caso confirmado fue el de Ding Yu, cuyos padres fueron confirmados como pacientes asintomáticos. Ding también fue puesto en cuarentena.
El análisis de las muestras de sangre de estos 13 pacientes mostró que el virus había sufrido mutaciones. Más específicamente, la mutación es diferente a todas las otras variantes de coronavirus observadas en el mundo hasta ahora. Además, la fuente del virus mutado sigue siendo desconocida.
Muestras tomadas a 100.000 personas
Desde la tarde del 28 de diciembre hasta la madrugada del 29 de diciembre de 2020, la escuela secundaria Heihe notificó a todos los estudiantes y profesores que se hicieran pruebas de ADN en el estadio de la escuela. Seguidamente fueron aislados a la espera de los resultados de las pruebas al día siguiente. Profesionales médicos de las regiones cercanas también fueron convocados para llevar a cabo las pruebas para los 100.000 residentes en el área metropolitana de Heihe. La obtención de muestras se completó desde la noche del 29 de diciembre hasta el 31 de diciembre.
Según la información recibida por Minghui, los residentes fueron divididos por comunidades y se les dijo que fueran a los estadios escolares cercanos, a las instalaciones recreativas de la comunidad, a los centros corporativos y a los vestíbulos de los hoteles para hacerse la prueba.
Ubicada al norte de la provincia de Heilongjiang, la ciudad de Heihe tiene una temperatura media durante el día de -27ºF (o -16ºC) en enero, que bajó aún más durante la noche. Después de permanecer en la calle un par de horas esperando ser examinados, la gente se quejó. Entonces se les permitió esperar dentro, pero no fue posible mantener el distanciamiento social entre personas.
Algunos residentes comenzaron a hacer cola a las 8 p. m. y no se les hizo la prueba hasta después de la medianoche. Los expertos en salud advirtieron que tales multitudes podrían dar lugar a grupos de infección. Un funcionario del PCCh dijo que como habían sido confirmados nuevos casos de forma continua, podría ser necesaria una segunda ronda de pruebas en toda la ciudad.
La ciudad de Heihe emitió un comunicado el 3 de enero instando a los ciudadanos a trabajar desde casa si es posible. Los taxis y el transporte público fueron suspendidos ese mismo día. Ciertos tipos de negocios, así como los de entretenimiento, dejaron de funcionar el 29 de diciembre.
Un funcionario del PCCh afirmó que el viceprimer ministro Sun Chunlan vendría a Heihe, seguido de otra visita de funcionarios provinciales. Algunos funcionarios podrían ser degradados en los lugares donde se reportaron casos positivos.
Cuando Sun visitó el epicentro de Wuhan el 5 de marzo de 2020, los insatisfechos residentes descargaron su rabia por el encubrimiento de información gritando: "¡Falso, falso!" "¡Todo es falso!".
Graves abusos de los derechos humanos y sus consecuencias
A pesar de la pandemia, el comité de asuntos políticos y legales de la ciudad de Heihe (PLAC) y la oficina 610 han estado implementando las políticas del PCCh en la persecución contra Falun Dafa. En junio de 2020, estos dos organismos ilegales ordenaron a la policía local que visitara a las familias una por una para asegurarse de que nadie practicara Falun Dafa.
Después de que los países occidentales, incluido los Estados Unidos, impusieran sanciones contra el PCCh por los abusos de los derechos humanos, estas agencias continuaron presionando a los organismos de nivel inferior para que intensificaran la represión contra Falun Dafa. También amenazaron con cancelar sus pagas o llevar a los practicantes de Falun Dafa a centros de lavado de cerebro.
Cuando Jia Wenjiang, secretario del partido de la aldea de Xiangyanyang en la ciudad de Heihe, y otros funcionarios acosaron repetidamente a los practicantes en octubre de 2019, el practicante Liu Zhigang les aconsejó que dejaran de participar en la persecución, ya que los practicantes solo desean ser mejores ciudadanos siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia de Falun Dafa. También les explicó la creencia tradicional de que el bien es recompensado mientras que el mal es castigado.
Jia y otros funcionarios dijeron que la orden vino de los funcionarios del condado y de la ciudad. También amenazó con que, si estos practicantes no dejaban de practicar Falun Dafa, podría afectar negativamente la escolarización y el empleo de sus hijos.