(Minghui.org) Aunque he practicado Falun Dafa durante más de 20 años, siempre miraba hacia afuera en lugar de mirar hacia adentro. Por ejemplo, encontraba que mis seres queridos eran egoístas o tenían mal genio, y juzgaba a mis amigos de acuerdo con mis propios estándares, así que los veía codiciosos, hipócritas y falsos. En cuanto a los compañeros practicantes, como siempre me fijaba en sus deficiencias, pensaba que no estaban alineados con Dafa. Encontraba que hablaban de cosas muy comunes y siempre sentí que no eran tan buenos como yo.
Siempre usaba mi propio punto de vista para medir a los demás. Cuando me encontraba con personas o cosas que no me agradaban, me indignaba inconscientemente y entablaba discusiones.
A principios de agosto del año pasado, el Maestro Li me dio una pista que me llevó a comprender que todo en el mundo exterior es un reflejo de mi propia mente. En el pasado, solo trataba de corregir a los demás, en lugar de a mí. Pero yo tenía muchos apegos todavía.
Hablaba sobre mirar hacia adentro, pero realmente no lo aplicaba a mi comportamiento. Estudiaba el Fa superficialmente y solo lo usaba para medir a otros en lugar de evaluar mi propia conducta. Ahora me doy cuenta de que no cumplía con el estándar de un cultivador.
Mientras otros podían mirar hacia adentro, yo me centraba en tener la razón. Después de empezar a cultivarme, esta sensación de engreimiento solamente aumentó. Esto podría estar relacionado con el hecho de que enseñé durante 30 años de mi vida o a que he tenido un temperamento fuerte desde la infancia.
No dejaba que nadie me criticara acerca de nada; me daba aires de superioridad. Por otro lado, crecer en la cultura del partido comunista me había envenenado. Me esforzaba por ser el mejor en todo lo que hacía, incluso llegando a los extremos. Esto me llevó a desdeñar a otras personas.
En el pasado, cada vez que alguien trataba de criticarme, simplemente dejaba de prestarle atención. Desde joven, nunca quise que nadie me cuidara e incluso menospreciaba a aquellos que intentaban mimarme. Mis amigos, parientes y todos los que conocía, cambiaban su actitud en un intento por no ofenderme. Entre los compañeros practicantes, muy pocos me decían algo negativo directamente. Con el tiempo, mis apegos crecieron. Así transcurrió, hasta que en junio de 2019 me arrestaron y recluyeron en un centro de detención durante siete días.
Fue entonces cuando me di cuenta completamente de que la cultivación se trata de cultivarse uno mismo y de cultivar el xinxing propio. Durante mis más de 20 años como practicante, realmente no me había cultivado.
El maestro Li nos dijo:
“Sólo cuando estás estudiando el Fa y cultivando tu corazón además de los medios para completar la cultivación –los ejercicios, y realmente transformándote esencialmente a ti mismo mientras mejoras tu xinxing y elevas tu nivel– podrá llamarse la genuina práctica de cultivación” (Qué es xiulian, Escrituras esenciales para mayor avance).
“El xiulian genuino requiere cultivarse hacia dentro del corazón, cultivarse hacia el interior, buscar hacia el interior; no hay búsqueda externa” (Novena Lección, Zhuan Falun).
Cualquier cosa que nos inquiete distinta a cultivarnos, se asemeja a "el hombre de Qi que se sentía angustiado por el temor de que el cielo pudiera caerse". En un tema tan importante como esto, yo no había podido cultivarme de acuerdo con los principios de Dafa: Verdad-Benevolencia-Tolerancia. No había logrado cambiar mucho después de tanto tiempo y no había podido validar bien la belleza de Dafa.
Cuando pienso en eso ahora, veo que estaba obsesionado con lo correcto y lo incorrecto, lo bueno y lo malo. Pero estas son nociones ordinarias, no es lo que un ser divino quiere. Un ser divino debe liberarse por completo de todos los apegos. Todo el universo fue creado por el Fa, y Dafa es de todos. ¿Por qué tendría que inquietarme por los demás?
Con frecuencia me preocupaba demasiado por otros practicantes: que si alguno se estaba quedando atrás o que si algún otro se encontraba en un mal estado. Basándonos en el Fa, todas estas son apariencias superficiales. Necesitamos prestar atención a nuestros pensamientos.
Si podemos basarnos en el Fa al considerar todos los conflictos, ¿acaso no ha sido todo arreglado por el Maestro? ¿Todo lo que nos sucede no es para nuestra cultivación? ¿Cómo podíamos llegar a preocuparnos?
La cultivación consiste en liberarse de las nociones. Mientras recitaba el Fa, me di cuenta de que estas nociones no son mi verdadero yo y que debo eliminarlas activamente. No puedo apegarme a cosas que me impiden cultivarme. Tengo que dejar todos mis apegos y evaluar todo de acuerdo con los requisitos del Maestro. Cuando encuentro algo, sin importar lo difícil que me resulte, debo mirar hacia adentro y cultivarme. Pienso que así no habrá nada que me lo pueda impedir.
También entiendo la diferencia entre los seres humanos y los seres divinos. Los dioses son armoniosos y compasivos y ven que todos los seres están sufriendo. Los dioses ven a todos con compasión. Por lo tanto, no debería tener ningún motivo para clasificar a las personas como buenas o malas.
Los seres divinos no pueden verse afectados por los seres humanos. No importa cómo otros me traten, yo los trataré basándome en el Fa, y no basándome en cómo me tratan. Podemos salvar verdaderamente a las personas, solo cuando las tratamos con compasión
Las lágrimas corrieron por mi cara mientras escribía este artículo. Como no me cultivé bien durante mucho tiempo, le di más trabajo a Shifu. Sé que nunca me ha abandonado y siempre me guía. Gracias Shifu. Ahora sé qué es la cultivación, y me restringiré estrictamente a los estándares de Dafa. Me cultivaré diligentemente y haré bien las tres cosas. ¡Cuánto tardé en arrepentirme!