(Minghui.org) La epidemia del coronavirus es incontrolable en Wuhan, y los practicantes sienten la urgencia de salvar a más gente. La mañana del 4 de febrero de 2020, fui a una gran zona residencial para distribuir folletos de aclaración de la verdad de Falun Dafa.

Había 3 puertas en el área. La puerta más grande del sureste ya estaba sellada con tejas de acero de color. La 2.ª puerta también estaba sellada. Cuando llegué a la 3.ª puerta, parecía que también estaba sellada, y una fila de autos estaba estacionada frente a ella. Me pregunté qué debía hacer. Entonces vi que uno de los paneles de las baldosas rojas de acero estaba suelto. Este panel no estaba atornillado. Me emocioné, ya que parecía que el Maestro me estaba ayudando. Entré en el área residencial y distribuí los materiales en 4 edificios.

Esa noche fui al área de nuevo y quise poner carteles con mensajes de cómo mantenerse a salvo durante la epidemia. Pero la puerta que atravesé por la mañana había sido sellada. Un hombre me pidió que entrara por la puerta de atrás, pero había varios guardias de seguridad. Un guardia me preguntó si tenía el pase. Le pregunté: "¿Qué pase?". Pero me permitió entrar cuando vio que tenía más de 70 años. Puse un cartel en la puerta de cada escalera sin ningún problema. Había más de 50 puertas en esta área. Sería bastante tarde cuando terminara todas ellas, y me preguntaba si podría salir por la puerta por la que había entrado. Pensándolo bien, sabía que el Maestro me ayudaría, así que mejor me apresuré a terminar el trabajo.

Mantuve mi mente tranquila y puse carteles mientras pensaba, "Gente por favor venga a ver los carteles. Recita las frases y difúndelas, y espero que todos estén a salvo...". Finalmente llegué a la puerta del sudeste. Puse carteles a cada lado de la puerta y luego encontré que una esquina de una teja de acero de color no estaba atornillada. La empujé para abrirla y encontré suficiente espacio para salir. Me sentí aliviada. Gracias Maestro por arreglar esto para mí. Pero necesitaba apurarme y terminar el último edificio. Eran casi las 9:00 p. m. después de que terminé y me dirigí a esa puerta. Fuera de la puerta había una gran plaza con luces brillantes. No había ni un alma allí. Me sentí tan feliz y le di las gracias al Maestro de nuevo en mi corazón.

Iba a poner carteles al día siguiente en otra zona residencial. Había unas cuantas subáreas dentro, con más de 20 edificios en cada subárea. Era un área complicada. Fui allí durante el día para ver las carreteras. Los guardias de seguridad estaban en las puertas. Encontré un estrecho camino en la maleza detrás de una de las subáreas. Me sentí aliviada cuando encontré 2 pequeñas puertas que podía usar para salir. Pero esa noche las 2 puertas pequeñas estaban selladas. Había una puerta en otra subárea grande, pero había unas cuantas cámaras encima de la puerta. Tuve miedo y no entré. Solo puse 30 carteles esa noche.

Miré dentro. En la primera noche mis pensamientos eran rectos. Solo pensé en salvar a la gente, así que el Maestro me ayudó a resolver el problema. En la 2.ª noche planeé con antelación y mantuve el miedo. Había usado métodos humanos.

El Maestro dijo:

"A veces cuando ustedes consideran un asunto, han formado un tipo de hábito: “Deseo hacer tal o tal cosa… así es como voy hacer esta cosa… así es como voy hacer esa otra cosa”. Reflexionas sobre eso a tal punto que sientes que has cubierto todo de forma satisfactoria. Pero cuando se trata de hacerlo realmente, la verdad, y las situaciones reales siempre están cambiando y verás que resulta que no funcionan. (Risas) Y como no funciona, vuelves nuevamente a pensar sobre ello. Pero ésa no es la forma en que debes hacer las cosas. Mantén pensamientos rectos. Si piensas que debes hacer las cosas de tal o cual manera, entonces anda y hazlo. Cuando confrontes problemas, naturalmente sabrás cómo resolverlos. Si tus pensamientos rectos son fuertes, todo saldrá sin incidentes y está garantizado que lo harás bien" (Exponiendo y enseñando el Fa en el Fahui del Área Metropolitana de Nueva York).

A través de este incidente he adquirido una mejor comprensión del Fa del Maestro. Tengo que mantener todos mis pensamientos rectos en todo momento. Tengo que cambiar mis nociones humanas, pensar desde la perspectiva del Fa y hacer las cosas con pensamientos rectos y divinos.