(Minghui.org) Antes de compartir mi entendimiento acerca de las elecciones generales de los Estados Unidos de 2020, déjame contarte una historia. Ocasionalmente vendo cosas en un mercado local. Los demás vendedores son muy amables. Se ayudan entre ellos y a los menos afortunados, como los vendedores que tienen problemas físicos. Sus interacciones siempre han sido amables y armoniosas.
Un día, un hombre que había llegado de China recientemente instaló un puesto. Su mentalidad era muy diferente; era combativo y criticaba los productos de los demás vendedores. Habló mal de los otros vendedores a sus espaldas. Incluso les dijo a los clientes que solo podían confiar en él y que solo debían comprarle a él. Su comportamiento era increíble para el resto de vendedores. Provocó que la gente se peleara entre sí. Olvidó cómo los demás vendedores le habían ayudado amablemente a empezar cuando llegó por primera vez.
Yo ofrezco la mejor calidad, pero él le dijo a todo el mundo que mis artículos eran de mala calidad. Me menospreció e intentó hacerme sentir que no debería estar allí. Me sorprendió cómo alguien tan descaradamente podía hacer tantas afirmaciones falsas. Como practicante, era una gran oportunidad para mi cultivación.
A partir de entonces, tuve un problema adicional cuando fui allí a vender –escuchar a los demás vendedores quejarse de este hombre problemático. Entendí que se comportaba así porque venía de China y estaba influenciado por la mentalidad del PCCh (partido comunista chino) de menospreciar a los demás y sabotearlos. Simplemente no sabía cómo llevarse bien con las demás personas, o cómo es la sociedad fuera de China.
Un día otro vendedor se paró frente a mi puesto y se quejó de este hombre problemático hasta que todos los clientes se fueron. No solo él no vendió nada, sino que bloqueó mi puesto y los clientes no pudieron comprarme. Al día siguiente traje una copia de Zhuan Falun y le pedí que leyera la parte de “La transformación del yeli” en la Cuarta Lección. Le dije que le ayudaría a entender mejor la situación.
La siguiente vez que lo vi parecía relajado. Dijo: “No creo que hayas hecho bien en decirme que lea solo esas páginas. Creo que debo terminar de leer todo el libro antes de devolvértelo”. ¡Me sentí tan feliz de escuchar eso!
Cuando regresé dos semanas después, me devolvió el libro. Aunque no dijo que quería practicar Falun Dafa, se corrió la voz de que había tomado prestado el libro. Todos sabían que había un libro llamado Zhuan Falun. Algunos sabían un poco sobre su contenido y sobre Falun Dafa, pero no fui yo quien habló de ello.
Lo que es aún más sorprendente es que el hombre que había estado causando todos estos problemas dejó de venir. Para cuando recuperé Zhuan Falun, ya se había ido. El ambiente en nuestro pequeño mercado se volvió feliz y pacífico de nuevo.
Creo que todo lo que está sucediendo en las actuales elecciones de los Estados Unidos es una oportunidad para que el pueblo americano obtenga y entienda Dafa a gran escala. No importa cuán desenfrenado parezca el espectro comunista y las viejas fuerzas, hay un camino más alto, uno por encima de las viejas fuerzas.
Mientras obtengamos la sabiduría del Fa, no importa cómo cambie la situación, podemos lograr que la gente de los Estados Unidos y del mundo vea la gran compasión y tolerancia de Dafa. Debemos hablarles sobre Dafa y mostrarles los libros. Cuando las personas entiendan, aunque solo sea un poquito, sabrán naturalmente cómo lidiar con la situación actual.