(Minghui.org) El año 2020 es inusual. Si bien la pandemia de coronavirus todavía está devastando el mundo, también se han estado desarrollando varios eventos inesperados uno tras otro. Mi entendimiento inicial fue que enfrentar estos problemas aparentemente caóticos y complicados, mantener una mente en paz y permanecer tranquilo era fundamental. En cuanto a lo que pasaba en Estados Unidos, aunque sí le presté atención, siempre me recordaba que no debía dejarme llevar por los asuntos mundanos.
Cuando se supo la noticia el 1 de octubre de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, había sido infectado con coronavirus, dos compañeros practicantes y yo estábamos cenando fuera. Estaban desconcertados por la noticia y yo compartí mi entendimiento. En primer lugar, esto podría ser una prueba de las viejas fuerzas para desafiar a los discípulos de Dafa. Nos habían dicho que el coronavirus llegó para atacar al partido comunista chino (PCCh) y sus seguidores. Trump había estado contrarrestando al PCCh todo el tiempo, pero aún estaba infectado. A las viejas fuerzas les gustaría ver si todavía tenemos fe en el Maestro. En segundo lugar, las viejas fuerzas podrían estar usando esto para interferir con nuestros esfuerzos por salvar a la gente común. Le habíamos dicho a la gente que el coronavirus estaba dirigido contra el PCCh, pero con la infección de Trump, muchas personas pueden confundirse y dejar de creernos.
Luego vino el 3 de noviembre, las elecciones generales en los Estados Unidos. Cuando los resultados se volvieron desfavorables para Trump, un pariente mío, también practicante de Falun Dafa, me llamó para decirme que mucha gente estaba desconcertada por los resultados y se sentía muy mal por ello. Le recordé que no se dejara influenciar porque los perversos nunca pueden superar a los rectos. Agregué que el resultado final sería bueno, y que, para algo tan grande en la sociedad humana, podría haber cierta resistencia. Por lo tanto, no estaba apegado a los resultados, ni le presté mucha atención.
Sin embargo, después de leer la editorial de Minghui el 7 de noviembre, titulada “Tenemos que comprender y estar claros en los principios y puntos básicos”, me di cuenta de que mi comprensión había sido muy limitada o incorrecta.
He llegado a ver que mis fundamentos de mantener mi corazón indiferente a los asuntos mundanos eran equivocados, y que era un error de mi parte no hacer nada cuando el mal estaba atacando a los rectos de manera imprudente en el mundo humano. La infección de Trump el 1 de octubre tampoco fue tan simple como pensaba. En este momento, creo que fue un intento de las viejas fuerzas de eliminarlo, el “hombre elegido por lo divino para volver a la tradición y desintegrar el partido comunista chino (PCCh)”, en forma de enfermedad. Es parte de un plan más grande de las viejas fuerzas para interferir con la rectificación del Fa.
El Maestro dijo:
“Si bajo los cambios cósmicos nadie actuara, aún no se podría traer un tipo de estado a la sociedad de la gente común y entonces tampoco podría denominarse cambio cósmico” (Séptima Lección, Zhuan Falun).
Por lo tanto, la elección general que vemos hoy es una manifestación de cambios cósmicos en este mundo humano. En la superficie, es la contienda electoral entre dos candidatos presidenciales, pero en un nivel más profundo, está más allá del mundo humano. Es un reflejo de la batalla entre los rectos y los perversos. Son las viejas fuerzas las que interfieren y hacen daño cuando la rectificación del Fa de Shifu está penetrando en este mundo humano. Es una manifestación de la guerra entre lo divino y el demonio.
En el lado divino, tenemos al Maestro Li (fundador de Falun Dafa), discípulos de Dafa y seres divinos que apoyan la rectificación del Fa.
En el lado del demonio, está el espectro comunista, la gente que apoya al comunismo y las viejas fuerzas y otros seres bajo su control en varias dimensiones. Por envidia, estos elementos malvados quieren proteger sus propios intereses mientras ignoran la seguridad del cosmos y de todos los seres concientes.
En el mundo humano, Trump fue elegido por los dioses para ayudar a los discípulos de Dafa y llevar a la gente a regresar a la tradición. Su oponente de elección fue seleccionado por las viejas fuerzas que persiguen a los discípulos de Dafa y reprimen la fe en lo divino. Su objetivo es destruir completamente la moral e implementar el comunismo vicioso a través de medidas legales y administrativas.
Las elecciones estadounidenses han entrado ahora en una fase muy complicada. Pero este caos bien puede ser parte del arreglo divino. Nosotros, los discípulos de Dafa, debemos tener claro esto y mejorar nuestra comprensión al respecto. En el momento histórico crítico pero fugaz, y en la aterradora guerra entre el bien y el mal, ¿cómo podemos hacer bien lo que se supone que debemos hacer como discípulos de Dafa?
Como discípulo de Dafa, ¿debería simplemente esperar a que las cosas se desarrollen en el mundo humano con la noción de permanecer tranquilo y no involucrarme en política? ¿O debería hacer algo con mi poder divino como discípulo de Dafa? Es cierto que los discípulos no participamos en política, y no tenemos una agenda política o búsquedas de fama e interés en el mundo humano. Sin embargo, eso no significa que dejamos de distinguir entre el bien y el mal, y que permitimos que la situación empeore por sí sola.
Desde la perspectiva de la cultivación, dado que es una guerra entre lo divino y el mal, no podemos quedarnos al margen mirando, aunque nuestras acciones no son las mismas que las de la gente común que busca justicia para sí misma.
El Maestro dijo:
“Hay algo que les dije anteriormente. Dije: ¿qué es un fo? “Rulai” es lo que los humanos llaman a alguien que ha venido con la verdad y el poder de hacer lo que quiera, mientras que los verdaderos fo son guardianes del cosmos y son responsables de todos los elementos rectos en el cosmos” (Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de Estados Unidos, Guiando el viaje, 21 de octubre del 2000, en San Francisco).
Como discípulos de Dafa, es nuestra misión y responsabilidad salvaguardar el nuevo cosmos y ayudar a Shifu con la rectificación del Fa, y ayudar a proteger a todos los elementos rectos del cosmos. Haciendo el mejor uso del poder divino que nos ha otorgado el Maestro, podemos participar en la batalla entre el bien y el mal y eliminar toda interferencia en los resultados de las elecciones.
Arriba están mis entendimientos personales. Por favor, háganme saber si hay algo inapropiado.