(Minghui.org) En una manifestación y un desfile de automóviles el 25 de octubre de 2020, en Auckland, Nueva Zelanda, los practicantes de Falun Dafa llamaron la atención sobre la persecución a los practicantes en China por parte del partido comunista chino (PCCh), una brutal represión que lleva ya 21 años.
Varios funcionarios públicos participaron en el evento en el suburbio de Otara en Auckland. Hablaron sobre el daño y el terror causado por el comunismo y llamaron al mundo libre a contrarrestar al régimen comunista y a defender la dignidad humana.
La Banda Marchante Tian Guo actúa en la manifestación para denunciar el comunismo.
Un desfile de automóviles promueve el fin del partido comunista chino (PCCh).
Vicepresidente del Nuevo Partido Conservador: Terror e infiltración del comunismo
Elliot Ikilei, vicepresidente del Nuevo Partido Conservador, dijo que tanto el comunismo como el nazismo son amenazas aterradoras para la humanidad y que el comunismo por sí solo es responsable de la muerte de unos 100 millones de personas en el último siglo.
Pero esto es solo una parte del daño que los regímenes comunistas causaron, dijo, porque estos regímenes también socavan lo que es bueno en la naturaleza humana. Al centrarse en la riqueza material, los regímenes comunistas alientan a la gente a apoderarse de la riqueza sin aportar nada a cambio. Al final, esto conduce a una sociedad sin democracia ni libertad de expresión. Todos los países que a lo largo de la historia probaron el comunismo encontraron los resultados muy negativos.
Elliot Ikilei, vicepresidente del Nuevo Partido Conservador.
Ikilei señaló que los regímenes comunistas dependen de una violencia indecible para mantener su gobierno. Durante un viaje a China hace dos años, Ikilei recordó que habló con un joven. La conversación fue cortés ya que hablaron de la familia, los viajes y sus ciudades natales, pero tan pronto como Ikilei habló sobre el gobierno y los principios del juego limpio, el hombre entró en pánico y no supo qué decir. Ikilei notó que el hombre estaba preocupado, como si cualquier palabra que dijera y cada movimiento que hiciera estuvieran bajo vigilancia. Era la primera vez que Ikilei experimentaba el terror causado por el comunismo de primera mano y estaba sorprendido por la realidad de ello.
Desafortunadamente, la ideología comunista se extendió a Occidente a través de la infiltración, dijo. La generación más joven ya no es pura. Más bien, a través del engaño y el lavado de cerebro, están heredando el comunismo. Destacó la importancia de contarle a los jóvenes lo que está bien y lo que está mal para que las generaciones futuras no sean víctimas del comunismo o de los demonios sin alma.
Ikilei llamó a la gente a decir no al comunismo y a trabajar duro para un futuro mejor.
Exconcejal de la ciudad: Un estado orwelliano
Anthony Brunt, exconcejal de la ciudad de Wellington.
Anthony Brunt, exconcejal de la ciudad de Wellington, dijo que acababa de ver una foto de una prisión en la provincia de Xinjiang, China. Era una de las más de 300 prisiones de Xinjiang utilizadas para encarcelar a uigures y otros grupos que el régimen comunista chino suprime. Esta prisión se extiende a lo largo de tres kilómetros. Señaló que el régimen tiránico convirtió a China en un estado orwelliano donde millones de personas están detenidas y muchas más están sufriendo.
Brunt también se preocupó por la sustracción forzada de órganos en China. Desde que Falun Dafa, un grupo de meditación pacífica, es suprimido desde 1999, se estima que un millón o más de personas fueron víctimas de la sustracción forzada de órganos, lo que significa que el PCCh los mató para beneficiarse de la venta de sus órganos. Este es un crimen a la par del holocausto que ocurrió durante la segunda guerra mundial.
Teniendo en cuenta estas cuestiones, Brunt reiteró que la gente debe ser cautelosa con las actividades del PCCh. De lo contrario, la próxima generación, incluso los niños de Nueva Zelanda, podrían verse afectados. Como la segunda economía más grande del mundo, el PCCh aprovecha su poder para suprimir los derechos humanos y la libertad de expresión e incluso interfiere en las elecciones de otros países.
Después de someter al Tíbet y a Xinjiang a sus atrocidades, el régimen ahora se extendió a Hong Kong con su régimen totalitario. Brunt subrayó que la gente debería estar en alerta ya que el mundo no estará seguro hasta que el PCCh sea erradicado.
Líder de ONG: salvaguardar los principios y valores
Geoffrey Fyers, secretario general de la Federación para la Paz Universal, dijo que apreciaba lo que se dijo en la manifestación porque el PCCh se infiltró realmente en el mundo entero y que esto es especialmente cierto en lo que respecta a la supresión de las creencias religiosas.
Según el marxismo, los seres humanos son meramente animales, un producto de la evolución. Por esta lógica, los animales pueden ser asesinados y por lo tanto los humanos pueden ser sacrificados. Pero la verdad es que los seres humanos son totalmente diferentes de los animales porque los humanos tienen la naturaleza humana. Las personas deben respetarse mutuamente. En China, por otro lado, mucha gente es asesinada por sus órganos.
Fyers dijo que todas las personas son iguales. A través de Internet, podemos acceder a información de todo el mundo. Eso significa que tenemos que indagar más y averiguar lo que el PCCh hace a su gente. Con ese conocimiento, debemos aumentar la conciencia sobre esos temas en lugar de cerrar los ojos y enterrar la cabeza en la arena como si nada estuviera pasando, porque lo que ocurre hoy en China podría ocurrir mañana en Nueva Zelanda.
Con lágrimas en los ojos, Fyers recordó la historia de su familia. A principios del siglo XX, su abuelo se embarcó en un acorazado para luchar contra Alemania en la primera guerra mundial para proteger la libertad de Nueva Zelanda y en la segunda guerra mundial, su padre de 17 años viajó a Oriente Medio y a Italia para luchar contra la Alemania nazi, todo ello para salvaguardar las libertades de creencia, expresión y democracia que los neozelandeses aprecian.
Geoffrey Fyers, secretario general de la Federación para la Paz Universal.
Fyers dijo que ahora era su turno. La libertad en Nueva Zelanda está amenazada y muchos medios de comunicación, así como los funcionarios públicos, no se atreven a decir o hacer nada por sus propios intereses materiales. Dijo que la gente debería dar un paso adelante y decir no al PCCh. Si no, la libertad y la democracia podrían perderse, porque el PCCh solo trae consigo una revolución violenta.
Dijo que Nueva Zelanda solía apoyar a China, pero ahora depende fuertemente de China. El PCCh lo sabe y tiene la intención de controlar Nueva Zelanda así como otros países de las islas del Pacífico. Dijo que Australia y Nueva Zelanda deberían tomar la delantera en la protección de esos países más pequeños.
El comunismo es una gran mentira
Tony Browning es un profesor que leyó mucho sobre el comunismo. Dijo que el comunismo se infiltra en todos los lugares a los que va y acosa a cualquiera que se interponga en su camino. Así es como es en Corea del Norte, donde la gente vive en el terror y la pobreza.
Dijo que el comunismo enfatiza demasiado la lucha de clases, como la que se da entre empleadores y empleados. "Aunque muchos jóvenes piensan que el comunismo es bueno en la superficie, no saben que en realidad lleva a la supresión de la religión y a las dictaduras. El comunismo es una gran mentira".