(Minghui.org) Soy un auditor interno. La auditoría interna es un proceso de control de calidad en el que se revisa un proyecto y su coste una vez que se ha completado. Hoy en día, mentir y falsear las cosas se ha convertido en la norma.

Frente a esta situación de deterioro, mi trabajo se ha vuelto cada vez más difícil. Las normas morales han sido pervertidas por el partido comunista chino (PCCh).

Shifu dijo: “… te he pedido que hagas bien tu trabajo” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Canadá).

Seguía las enseñanzas del Maestro de Verdad-Benevolencia-Tolerancia y hacía bien mi trabajo. Cuando nos auditaban, siempre decía la verdad y trataba cada proyecto de manera justa y cuidadosa.

Mi resolución puesta a prueba

Me gané una sólida reputación en la industria por mi dedicación e integridad. Las pruebas y tribulaciones con las que me topaba en el trabajo venían de todas partes, incluyendo los contratistas, todos los departamentos, y sus complejas redes.

A veces, la gente venía y me pedía que aprobara un proyecto antes de empezar la auditoría. Bajo presión es difícil cumplir con los procedimientos y seguir con la diligencia debida.

En tales circunstancias, siempre recordaba que soy un practicante que sigue los principios de Dafa y devolvía los regalos y el dinero que la gente me daba.

El director del departamento de instalaciones me pidió una vez que pasara la auditoría de su proyecto de jardín y me dio una pequeña caja de regalo.

No quise herir sus sentimientos. Era una caja pequeña, así que la acepté, pero resulta que dentro había un reloj caro. Fui a su oficina a devolverlo, diciéndole que los principios de Dafa no nos permiten aceptar sobornos. Seguía los procedimientos y las políticas durante la auditoría interna como de costumbre.

Más tarde, en una cena, el director les contó a todos que nada podía interferir conmigo. Dafa ha mejorado mi reino espiritual, lo cual se refleja en mi trabajo.

Al mismo tiempo, Dafa me ha dado sabiduría, y mis habilidades profesionales han mejorado. Siempre tenía buenas ideas que me inspiraban y podía resolver muchos problemas difíciles.

Shifu dijo:

“Cuando las personas comprenden cómo comportarse como seres humanos, cómo valorar la virtud (de), entonces esto también puede transformar la productividad. Los corazones de la gente están todos volviendo a la bondad y trabajan bien. Si quieres ser un buen cultivador, tienes que empezar desde la base, primero tienes que ser una buena persona. La gente buena tiene que mostrarse como tal en todos los aspectos, por lo que tienes que completar muy bien el trabajo que tu jefe te asigna. Debido a que estás cumpliendo con tu obligación para la sociedad, inevitablemente tendrá este tipo de efecto de mover las cosas hacia delante.” (“Enseñando el Fa en la ceremonia de publicación de Zhuan Falun en Beijing” Zhuan Falun Fajie).

"Dedicación" e "integridad" son las palabras que usan mis jefes y colegas cuando me evalúan. Dicen que mi trabajo es "extraordinario".

Por ejemplo, otra empresa me invitó una vez a ayudar en un proyecto y tuvimos que hacer una evaluación in situ. Al acabar, el supervisor me dijo: "Había oído hablar mucho de su dedicación y profesionalidad, pero no lo había visto por mí mismo". Hoy, ya sé por qué la gente dice todo eso de ti. Eres tan diferente de todos los demás". Le dije que solo hacía lo que debía hacer.

Aclarando la verdad en el trabajo

La calumniosa propaganda del PCCh sobre Dafa ha engañado a mucha gente. Es nuestra responsabilidad como practicantes contarle a la gente que Dafa es bueno y ayudarles aclarándoles los hechos.

Siempre soy amable y despreocupado. A veces sacaba a relucir el tema del caos social cuando socializaba con mis colegas, y luego naturalmente hablaba de la persecución a Dafa por parte del PCCh.

Durante un tiempo, a menudo recibía correos electrónicos de aclaración de la verdad en el trabajo. Al principio, no sabía por qué los recibía porque, como practicante, sabía la verdad.

Más tarde me di cuenta de que el Maestro había arreglado esto para mí para ayudar a otros a conocer la verdad. Tenía la costumbre de abrir mis correos electrónicos durante los descansos y los mostraba a mis colegas.

Les contaba que la autoinmolación de Tiananmen fue un montaje y les hablaba sobre la difusión de Dafa en el mundo. Les hable de los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista.

También mencioné la tendencia a renunciar al PCCh y sus organizaciones afiliadas. Algunos de mis colegas tenían opiniones positivas sobre Dafa y algunos acordaron renunciar al PCCh.

Cuando vi cómo cambiaron, sentí genuinamente la grandeza y compasión del Maestro y realmente aprecié a mis compañeros practicantes que hacían circular esos correos electrónicos de aclaración de la verdad.

Ganando una reputación desinteresadamente

Mi trabajo me da una cierta cantidad de poder porque evaluamos los costos de los proyectos que auditamos. Por lo tanto, los requisitos éticos para alguien de mi profesión son altos. Podemos usar nuestra autoridad para satisfacer nuestros propios intereses o para ser una persona íntegra. Podemos manejar cada detalle con toda la debida seriedad o simplemente tratarlos descuidadamente.

Me di cuenta de que los discípulos de Dafa deben ser honorables. Nuestro trabajo no es la cultivación, pero nuestra forma de actuar refleja la imagen de los practicantes de Dafa en la sociedad ordinaria.

Shifu dijo:

“Ustedes son cultivadores, cuya conducta [debe ser] pura y recta. Hay tanta gente que piensa que ustedes son extraordinarios tan sólo al ver cómo actúan.” (“Exponiendo el Fa en el Fahui de Boston, 2002”, Colección de Enseñanzas del Fa, Vol. II)

Tengo una sólida reputación en mi industria basada en mis habilidades y ética. Una vez me reuní con un alto cargo de otra compañía. Nunca había interactuado con él profesionalmente, pero había oído que era arrogante y despreciaba a la mayoría de la gente. Me dijo: "Siento que eres diferente a los demás". Le pregunté de qué manera, y me dijo que averiguaría más sobre mí por sí mismo.

Más tarde, cuando participé en la evaluación de los títulos de licencia profesional, le pregunté a un director cómo rellenar el formulario. Me dijo que el formulario no era importante, así que le pregunté qué era lo importante.

Dijo: "La junta de evaluación es la clave. Hoy en día, tienes que averiguar quién está en la junta de evaluación, conocerlos y darles dinero o un regalo".

Me pregunté si debería seguir la tendencia actual y hacer lo mismo. Entonces lo evalué en relación con los requisitos del Fa y me di cuenta de que debía ser recto.

Pensé: "No estoy apegado al resultado. Dejaré que la junta vea qué tipo de personas son los practicantes de Dafa."

Unos meses después, vi a ese alto cargo "arrogante" en una cafetería. Se acercó a mí y me dijo: "¡Pasaste!"

Me di cuenta de que se refería a la evaluación, así que le pregunté si estaba en la junta. Admitió que sí y me preguntó si me había acercado a alguno de los otros miembros de la junta. Le dije que no. Me dijo: "Sabía que no lo harías. Le dije a los otros miembros del consejo que eres un practicante de Falun Dafa."

Continuó diciendo: "Eres la persona más dedicada en el trabajo. Aunque a veces ofendes a los demás con tu comportamiento recto, todas tus decisiones son justas porque eres desinteresado".

Me dijo además que yo había aprobado con el mayor número de votos en la primera ronda de votación.

Shifu dijo:

“La cultivación depende de uno mismo, el gong depende del shifu; si tienes este deseo, ya está bien. Pero el que realmente hace esto es el shifu, tú no puedes hacerlo en absoluto.” (Primera Lección, Zhuan Falun)

Este alto cargo nunca había tenido ningún contacto conmigo. Se enteró de cómo son los practicantes de Falun Dafa por el boca a boca y por mi forma de actuar.

Les dijo a otros sobre el impacto positivo de un practicante. Esto se debe a la compasión y la grandeza del Maestro.