(Minghui.org) Una residente de la ciudad de Daqing, provincia de Heilongjiang está experimentando seria enfermedad cardiaca y está demacrada después de un año de detención por su creencia en Falun Dafa, también llamada Falun Gong, una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.
La Sra. Ji Wenbo, de 65 años de edad, fue arrestada el 2 de noviembre de 2018 en la oficina del comité residencial donde se le instruyó que fuera allí para recibir subsidios de calefacción.
La policía arrestó a la Sra. Ji tratando de cerrar un caso contra ella en el 2014.
La Sra. Ji fue arrestada el 30 de octubre de 2014 mientras visitaba a la Sra. Cheng Jinzhi, otra practicante de Falun Dafa. Más tarde fue sentenciada a siente años y medio de prisión.
Ella experimentó falla cardiaca y estaba cadavérica después de hacer una huelga de hambre para protestar por la persecución en el centro de detención de la ciudad de Daqing y fue alimentada a la fuerza. Fue liberada bajo fianza en enero de 2015 después de que la policía le extorsionara 2,000 yuanes.
Antes de que se recuperara completamente, fue puesta bajo custodia cuatro años después en 2018.
Su condición se continuó deteriorando después de su último arresto. Estaba muy débil y a menudo su cuerpo temblaba descontroladamente. Su espalda le dolía tanto que cada paso que tomaba requería un gran esfuerzo. El más pequeño movimiento podía resultar en latidos rápidos anormales. La mayor parte del tiempo está en cama. No podía tomar mucho alimento y ahora está cadavérica.
A pesar de su condición física, la obligaron a ir al juicio en la corte del distrito de Ranghulu el 1 de abril de 2019. Su abogado emitió una declaración de inocencia para ella. La Sra. Ji también testificó en defensa propia. Dijo que ninguna ley ha criminalizado a Falun Dafa en China, y que Falun Dafa se ha difundido a más de 100 países y regiones, y solo es perseguido en su tierra natal.
Aunque después de la audiencia, el panel del tribunal colegiado no encontró suficiente evidencia en su caso, la corte se rehusó a absolverla y la dejó en custodia.
Dos jueces la visitaron en el centro de detención cuatro meses después y la interrogaron acerca de lo que le dijo a la Sra. Cheng durante su arresto en 2014. La Sra. Ji contestó que ella no habló acerca de cosas relacionadas con Falun Dafa.
La corte agendó otra audiencia el 7 de noviembre de 2019, sin informarle a ella ni a su familia. Solo cuando los policías de la corte fueron al centro de detención esa mañana para llevarla a la corte fue cuando se enteró de la audiencia.
Justo antes que caminara fuera del centro de detención, su cuerpo comenzó a temblar y su corazón a latir tan rápido que casi colapsa.
La corte tuvo que cancelar la audiencia y ella fue devuelta a su celda.
Ahora todavía está detenida en el centro de detención de la ciudad de Daqing y espera noticias de su próxima audiencia.