(Minghui.org) Una profesora de secundaria jubilada de la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, fue arrestada el 20 de marzo de 2019 por negarse a renunciar a Falun Dafa, una práctica de mente y cuerpo que es perseguida por el régimen comunista chino desde julio de 1999.
La señora Ouyang Ruyun fue secuestrada por agentes de la división de seguridad nacional de la ciudad de Wuhan. Esta es la decimoquinta vez que es arrestada por su fe durante las últimas dos décadas.
La mujer de 73 años fue maltratada en el centro de detención N.º 1 de la ciudad de Wuhan tras su último arresto. Su salud se deterioró con rapidez y las reiteradas solicitudes de su familia para que la liberaran bajo fianza por motivos médicos fueron denegadas. Se les dijo que Wuhan está organizando para octubre los juegos mundiales militares y que las autoridades no permitirían que un practicante de Falun Dafa como la señora Ouyang fuera puesta en libertad.
Se confirmó que la señora Ouyang fue trasladada hace poco al hospital ankang de Wuhan. Su familia está cada vez más preocupada por su condición, dada la notoriedad de los hospitales de ankang, que se traducen en "centros de paz y salud para los enfermos mentales".
Según un artículo publicado en Minghui.org: "Es bien sabido que el partido comunista chino (PCCh) utiliza con frecuencia los servicios de salud mental para torturar a disidentes o activistas políticos. Aunque se denunciaron abusos en un gran número de centros de tratamiento de la salud mental en China, solo los hospitales de Ankang fueron designados oficialmente como capaces de retener a los pacientes contra su voluntad y restringir su libertad".
El artículo también señala: "Los hospitales de Ankang, hospitales psiquiátricos administrados directamente por el ministerio de seguridad pública, tienen una estructura y un proceso extra legal muy similares al del antiguo sistema de campos de trabajo que fue declarado cerrado en 2013, la policía puede enviar arbitrariamente a cualquiera a los hospitales por encarcelamiento ilegal sin el debido proceso".
"Se establecieron más hospitales Ankang después de que la persecución a Falun Dafa comenzó en 1999. En septiembre de 2004, el ministerio de seguridad pública emitió un aviso público exigiendo a las provincias, regiones autónomas y municipios que establecieran hospitales de Ankang lo antes posible si no los tenían", señalaba el artículo.
La señora Ouyang ya estuvo detenida en centros psiquiátricos por su fe en Falun Dafa. En julio de 2000, fue enviada al hospital psiquiátrico de Wuhan, donde recibió medicamentos psiquiátricos que dañaron su sistema nervioso central. Ella dijo: "Después de recibir la inyección, empecé a babear, mis manos empezaron a temblar, mi lengua se volvió rígida y perdí el equilibrio al caminar".
A pesar de que su salud está empeorando, la señora Ouyang no padece ninguna enfermedad mental. A su familia le preocupa que esta vez se enfrente a abusos psiquiátricos aún peores en el hospital de Ankang, controlado por la policía.
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