(Minghui.org) Este julio participé en las actividades en Washington D.C. que marcaron los 20 años de esfuerzo pacífico contra la persecución. Me conmoví profundamente.
Más de 10 practicantes, entre ellos varios jóvenes, se reunieron con dos senadores de nuestro estado. Al contar nuestras historias a los senadores y a sus asistentes en persona, comprendieron cómo nuestros familiares en China están siendo perseguidos. Durante las actividades del 20 de julio en D.C. cada año, practicantes de nuestro estado visitamos a la Cámara y al Senado para darle a nuestros legisladores la oportunidad de saber sobre Falun Dafa y la persecución y hacer preguntas.
Uno de nuestros senadores copatrocinó la nueva resolución presentada en el Senado. La resolución condena la sustracción forzada de órganos a practicantes de Falun Dafa con vida en China. Él ha apoyado los esfuerzos de practicantes de generar conciencia sobre la persecución durante 20 años.
Además, un congresista de nuestro estado habló en la manifestación de este año en el Capitolio, uniéndose a los practicantes para pedir por el fin de la persecución.
Hablando con políticos estadounidenses sobre la persecución
Inmediatamente después de que la persecución comenzó el 20 de julio de 1999, muchos practicantes de los EE. UU. se reunieron frente al Capitolio para practicar los ejercicios bajo el sol abrasador.
Después de una semana, algunos practicantes sugirieron ir al Congreso para aclarar los hechos de la persecución y pedirle a los legisladores que condenaran la persecución. Es así que otra practicante, su hija y yo decidimos ir a las oficinas del Congreso.
No sabía cómo hacer esto, y no había traído ropa formal. Así que fui a una tienda y compré unos zapatos y ropa. Nuestras caras estaban quemadas por el sol y peladas después de hacer los ejercicios bajo el sol abrasador durante varios días. Entramos en los edificios del Congreso por primera vez, y así es como nos embarcamos en nuestros esfuerzos por hablar con los legisladores a nivel federal.
Dándome cuenta de que tengo una misión
Recuerdo un sueño vívido que tuve al principio de la persecución. Vi que otros practicantes y yo estábamos en un vasto campo. Había innumerables grandes estanques de lodo y cada uno era responsable de uno. Saltamos al lodo profundo para rescatar a la gente. Recuerdo que vi a un congresista y a su esposa. Fui a hablar con ellos y les pedí ayuda. En ese momento sentí que el sueño me mostraba que esto era lo que debía hacer, era mi misión.
En muchas enseñanzas el Maestro ha dicho que una vez que los que están en el poder entiendan la verdad, tomarán decisiones favorables para sí mismos y para la gente en su distrito.
En los últimos 20 años, los practicantes de nuestro estado han coordinado nuestros esfuerzos por mantener un contacto regular con los miembros del Congreso. Una vez que los legisladores estadounidenses comprendieron la verdadera situación en China, aprobaron múltiples resoluciones condenando la persecución.
Superando las dificultades
No ha sido fácil reunirse con políticos en persona. Recuerdo que otro practicante y yo trabajamos durante 6 años, intentando reunirnos con el congresista de mi distrito. No recibimos ninguna respuesta de su oficina. No me di por vencido y seguí contactando a su oficina. Una vez quise entregarle el informe sobre la sustracción forzada de órganos a los practicantes. Encontré dónde y cuándo iba a votar, así que lo esperé en el estacionamiento. Esperé mucho tiempo y estaba preocupado porque tenía que irme a trabajar. Justo cuando estaba a punto de irme, él vino. Pude darle el informe y rápidamente le hablé de la persecución. El expresó su preocupación.
En otra ocasión tuvimos un asunto urgente y tuve que ir a Washington D.C. para presentar directamente una carta a los congresistas. Tenía mucha fiebre, pero la situación era urgente. Decidí tomar un avión. Me sorprendió ver en el avión a los dos congresistas a quienes iba a buscar. Uno estaba sentabo delante mío y el otro detrás mío. Les entregué la carta en mano y también pude concretar una cita para reunirme con ellos en sus oficinas de Washington, D.C. Siento que cuando tenemos el corazón para hacerlo, el Maestro nos ayuda y arregla las oportunidades para nosotros.
A lo largo de los últimos 20 años, hemos aprovechado todas las oportunidades para llegar a los legisladores, durante sus celebraciones de campaña, en las reuniones de los municipios locales y en varias ocasiones. Hemos establecido buenas relaciones con ellos. Muchos entienden la verdad y han expresado su apoyo.
Cooperando sin problemas el uno con el otro
Además de cooperar dentro del estado, es muy importante trabajar con los practicantes del D.C. para aclarar la verdad al congreso de manera integral. En los últimos 20 años, el Congreso de los Estados Unidos aprobó una serie de resoluciones apoyando a Falun Dafa y condenando la persecución del partido comunista chino (PCCh). Muchos miembros de nuestro estado han votado a favor.
Luego de más de 20 años de arduo trabajo y de explicar la situación, muchos políticos estadounidenses tienen una comprensión positiva de la Dafa y una comprensión profunda de la naturaleza malvada del PCCh. Han expresado públicamente sus preocupaciones y se han manifestado a favor de la justicia. La gente está despertando, pero nuestra misión aún no se ha completado. Debemos seguir trabajando duro y salvar a más gente.