(Minghui.org) Practicar Falun Dafa me hace la persona más feliz. Tengo 63 años. A lo largo de los últimos veinte años, he prestado mucha atención al estudio y a recitar el Fa. Al estudiar el Fa he comprendido que salvar a los seres conscientes es la noble misión de los discípulos de Dafa.
La importancia de estudiar o recitar el Fa
He estado estudiando, memorizando y recitando el Fa desde que empecé a practicar Falun Dafa. Es lo más importante que hago cada día, y considero que este es el momento más feliz del día. Incluso cuando fui detenida ilegalmente en 2004, persistí en recitar el Fa, enviar pensamientos rectos y aclarar la verdad sobre Dafa. No cooperé con los perseguidores. Fui liberada y regresé a casa sana y salva. Nada podía impedirme creer en el Maestro y en el Fa.
El Maestro nos enseña que estudiemos más el Fa en muchas de sus conferencias. Él dijo:
"A menudo he dicho que he incorporado dentro de este Fa todo lo que puede permitir que ustedes practiquen la cultivación y que avancen, y todo lo que pueden obtener a través de la cultivación. Aunque están en diferentes reinos, ninguno de ustedes puede entender realmente cuán grande es el peso de mis palabras. Con tal que practiques la cultivación, obtendrás todo. ¿Pero saben ustedes cuántas cosas mías han sido incorporadas dentro de lo que ustedes van a obtener? (Exponiendo el Fa en el Fahui de Suiza)
"Una persona es como un contenedor. Él es lo que contiene. Si está lleno del Fa, entonces estará en armonía con el Fa. Si está lleno de lodo, entonces será lodo". (Exponiendo el Fa en el Fahui de Singapur)
Estaba decidida a mantener los principios del Fa en mi mente y asimilarme con el Fa. Esta determinación se estableció en mi mente en 2007 cuando comencé a recitar Zhuan Falun. Desde entonces, lo he recitado 60 veces. Me tomó medio año recitarlo completo la primera vez, y el resultado fue excelente.
Al aprender el Fa de memoria fortaleció mi fuerza de voluntad. Cuanto más recito, más fácil me resulta recordar lo que he aprendido y más preciso me resulta. Cuando persisto, recitar el Fa me ayuda a entender los principios del Fa en diferentes niveles. Cuanto más estudio, más descubro sobre mí, y es más fácil resolver los problemas, ya que puedo corregirme constantemente.
Cuando memorizo el Fa, me concentro en lo que está delante de mí y dejo ir cualquier noción humana. Puedo disciplinarme mejor y deshacerme de los malos pensamientos y otras interferencias. A veces, cuando hay distracciones, las suprimo conscientemente. Cuando estoy en buen estado, es fácil deshacerme de las distracciones, ya que recitar el Fa las elimina inmediatamente. Cuando algo me desconcierta sobre el Fa, normalmente se resuelve en el proceso de recitar el Fa. A veces también experimento una corriente caliente que pasa a través de mi cuerpo. Sé que en ese momento el Maestro me está purificando.
Me iluminé a que cuando recito bien el Fa, también recito el Fa en mis sueños, y sé que soy una cultivadora en cualquier momento. Por lo tanto, las pruebas que encuentro en mis sueños son fáciles de pasar. A veces sueño que estoy aclarando la verdad, o veo algunas escenas hermosas, como imágenes del Maestro o el Falun girando.
A menudo, todo lo que encuentro es reflejo de un principio del Fa, y puedo tomar la decisión correcta. Cualquier yeli (karma) de enfermedad que experimento se resuelve rápidamente debido a mis fuertes pensamientos rectos.
Cuando hay conflictos, puedo encontrar mis defectos y eliminarlos. Interactuar con mis suegros fue muy difícil, pero pude manejar la injusticia como un practicante y no tomé represalias. La benévola resolución tuvo buenos resultados porque los problemas que tuve con mi suegro durante muchos años se resolvieron. Ahora, nos llevamos bien y él apoya a Dafa. Por lo tanto, entiendo que las tres cosas que el Maestro nos pide que hagamos están interrelacionadas.
El significado interno de Zhuan Falun es muy profundo. Sólo puedo entender algo de la iluminación en mi mente, ya que ninguna palabra puede describir mis sentimientos. Lo que consigo comunicar a través del lenguaje es sólo en la superficie. Siento que mi xinxing está mejorando y mi reino está en continuo crecimiento. Soy capaz de tomarme la fama y el dinero a la ligera y a menudo siento que estoy en el estado de Dao.
El Maestro me dio cuadernos y plumas de oro
Experimenté un gran avance en 2007 cuando recitaba el Fa. Un practicante me ayudó a comprar una computadora y me enseñó a usarla. Aprendí a navegar por Internet, descargar archivos, enviar listas de personas que abandonaron el partido comunista chino (PCCh) y sus organizaciones juveniles, descargar clips de audio de Minghui y Minghui Weekly, ayudar a los compañeros practicantes a instalar archivos MP3, y muchas cosas más.
Me sentí muy inspirada por la tarea, especialmente cuando leí los artículos de experiencia de los practicantes. Pensé en hacer una contribución y escribir mi experiencia para ayudar a nutrir el ambiente de cultivación en el sitio web Minghui. Este simple pensamiento me llevó a tener un sueño por la noche: vi cuatro cuadernos y bolígrafos de oro. Me conmovió mucho. Sentí el aliento del Maestro.
A partir de entonces, a menudo escribo sobre mis experiencias de cultivación. Escribí para la celebración del Fahui en China y para el Día Mundial de Falun Dafa. Aprecié la cuidadosa edición de los artículos de experiencia, ya que me beneficié mucho de ellos. De hecho cada artículo de estos que se publique queda un registro en el universo. En mi sueño, cada experiencia compartida era una brillante flor celestial.
Descubrí que el proceso de escribirlos también es un proceso de cultivación. Me iluminé con el inmenso poder de los pensamientos rectos. Incluso cuando el bloqueo estaba en su apogeo, todavía podía conectarme a Internet y rara vez necesitaba ayuda técnica de otros practicantes. Básicamente podía resolver los problemas mirando hacia adentro y pidiendo ayuda al Maestro. Sentí que me elevaba constantemente en mi camino de cultivación.
Aclarando la verdad
Después de la publicación de los Nueve Comentarios en 2004, comencé a aclarar la verdad a todos mis familiares y los ayudé a abandonar el partido. También ayudé a parientes, compañeros de trabajo, compañeros de clase y vecinos a abandonar el PCCh, y todo salió bien.
La gente confiaba en mí porque fue testigo de mi recuperación de mis enfermedades después de empezar a practicar Dafa. Solía tener migrañas, neurastenia, sinusitis, amigdalitis y otras enfermedades. Después de dar a luz a mi hijo, también me diagnosticaron reumatismo. Todas estas enfermedades desaparecieron después del comienzo de mi cultivación.
Todos mis familiares y amigos fueron testigos de los cambios en mí. Me volví amable y tolerante y siempre estaba de buen humor. Me veían mucho más joven que mi edad real. Todos con los que me asocié llegaron a entender los hechos de la persecución. Estuvieron de acuerdo en renunciar al PCCh, y unos pocos comenzaron a practicar Dafa.
Después de comenzar a recitar Zhuan Falun, dejé de lado el apego al miedo. Ya no tenía miedo de acercarme a extraños para aclarar la verdad y pedirles que renuncian el PCCh. También me di cuenta de que estaba demasiado preocupada por no perder la cara y un fuerte apego a la comodidad.
Sentí que el Maestro me ayudó a ampliar mis habilidades de aclarar la verdad y me dio sabiduría. Le hablaba a la gente como si fueran mis buenos amigos. Cuando me encontré con aquellos que se negaron a escuchar la verdad, les hablé con calma y acepté este hecho porque creía que tendrían otra oportunidad de escuchar la verdad en el futuro. Mi entendimiento hacía que la gente se sintiera a gusto. Por lo tanto, no fui reportada a la policía.
Antes de salir a aclarar la verdad, le pedía al Maestro que me ayudara a encontrarme con las personas predestinadas. Llevo conmigo todo tipo de material informativo de Dafa, porque esperaba conocer la gente que viniera con un propósito a mí. Ya sea que estuviera esperando un autobús o sentado en un tren, siempre había gente que estaba dispuesta a escucharme. Ocasionalmente me saltaba una parada porque estaba demasiado concentrada en la conversación, pero no importaba, porque hacía lo que tenía que hacer.
A menudo llevaba un paraguas, incluso en días calurosos, para evitar que la gente se mojara o para que les diera sombra. No regateé cuando fui de compras y no me aproveché de nadie. Si la gente preguntaba por direcciones, usualmente los llevaba a su destino y aclaraba la verdad mientras caminaba con ellos. Estos pequeños actos de bondad al azar me ayudaron a hablar con más gente. Ellos estaban agradecidos por mi ayuda, y cuando escucharon que soy una practicante de Falun Dafa, agradecieron al Maestro Li Hongzhi (el Fundador de Falun Dafa) por enseñar a estudiantes como yo a ser tan amables.
Trato de encontrar buenas oportunidades para iniciar una conversación saludando o sonriendo a la gente. Por lo general, esto es efectivo. Si tuviéramos una conversación más larga, me dispongo a aclarar la verdad. De lo contrario, la inclinación de cabeza o la sonrisa todavía ayudan a plantar una semilla en las mentes de estas personas. Por supuesto, hay también algunos que toman la iniciativa de saludarme e iniciar una conversación. Nunca perdí una oportunidad y considero a todas estas personas como predestinadas.
Creo que todas las personas con las que me cruzo están predestinadas a conocerme.
Sé que el Maestro hace todos los arreglos. Todo lo que hacemos es mover la boca y las piernas, y el Maestro nos ayuda a establecer nuestra poderosa virtud. Me siento honrada de ser una practicante de Dafa.