(Minghui.org) Con la compasión y protección del Maestro, el año pasado pude escapar de los encuentros cercanos que tuve con los oficiales implicados en la persecución a Falun Dafa en China, soporté dificultades y sentí la alegría de elevar mi xinxing. También reconocí algunos apegos humanos al hacer las tres cosas. Me gustaría relatar mis experiencias del año pasado al Maestro y compartirlas con los compañeros practicantes.
Responsabilidad y perseverancia
El Maestro dijo:
“Como cultivadores, y sobre todo como Dafa dizi del período de la rectificación del Fa, ustedes han cargado sobre sus espaldas responsabilidades enormes, y tienen una gran misión que la historia les ha confiado" (...) "Aunque las cosas que ustedes hacen en este mundo se parecen mucho a las cosas cotidianas que hace la gente común, el hecho es que en lo que se basan los Dafa dizi y el propósito de lo que ustedes hacen es completamente diferente” (Exponiendo el Fa en el Fahui Internacional de Nueva York, 2004)
De las enseñanzas del Fa del Maestro, me iluminé al hecho de que cada discípulo de Dafa es una partícula del Fa, y cada partícula actúa al unísono, pero también son formas de vida individuales e independientes. Al validar el Fa y salvar a los seres conscientes, como se manifiesta en el nivel humano, cada discípulo de Dafa tiene responsabilidades y misiones diferentes. Nuestras responsabilidades son las tres cosas que el Maestro nos pide que hagamos, y debemos asumir la responsabilidad de las misiones que hemos elegido. El proyecto que yo elegí fue poner carteles de aclaración de la verdad.
Trato de poner carteles en áreas limpias y visibles donde habrá mucho tránsito peatonal y suprimir el mal al mismo tiempo. Siempre hago mi máximo esfuerzo. Nunca me permito sentir que estoy completando una tarea. Cada noche, antes de salir a poner carteles, envío pensamientos rectos: "Eliminar cualquier elemento maligno y seres que interfieran con la colocación de carteles de aclaración de la verdad; desintegrar el espectro comunista detrás de todas las personas que estarán cerca de los carteles; y eliminar a todos los seres malvados que controlan las cámaras de video que estarán a mi paso. Las cámaras están ahí para la gente mala, no para la gente buena, y deben proteger a los discípulos de la Dafa".
Mientras caminaba para poner los carteles, recuerdo el Fa del Maestro:
“Hay un Fa tan grande, y en el pensamiento recto Dafa está junto con ustedes, esta es una protección y una garantía gigantes” (Enseñando el Fa en Manhattan).
No importa qué época del año sea; si veo un buen lugar, pondré el cartel allí.
Este proceso ha sido peligroso y difícil, pero he podido completarlo con la protección del Maestro.
Por ejemplo, la noche anterior a la elección del 19.º presidente del partido comunista chino (PCCh) en 2017, la policía de toda China registró, acosó y arrestó ilegalmente a los practicantes. Incluso en mi ciudad, la policía aumentó sus patrullas y la vigilancia de los practicantes. Otro practicante fue arrestado por colocar carteles. Mi familia se enteró del arresto y trató de persuadirme de que no saliera a poner carteles. "Solo escóndete por un par de días. Son tan despiadados", dijeron.
Comprendí cómo se sentían. Les dije: "Gracias por acompañarme todas las noches durante el año pasado mientras colgaba los carteles. Algún día estarán orgullosos de sus esfuerzos. Estos policías son despiadados porque están controlados por el espectro del PCCh. Si supieran la verdad sobre Falun Dafa, nunca arrestarían a un practicante incluso si se les ordenara hacerlo. Además, si dejo de poner los carteles, pensarán que el practicante que arrestaron era el que estaba poniendo los carteles. Para ayudar a terminar con la persecución, debo seguir haciendo lo que debo hacer. Yo tengo al Maestro, así que no tienen que preocuparse. Tendré cuidado".
Intensifiqué el envío de pensamientos rectos y en silencio recité el Fa del Maestro: “Hay un Fa tan grande, y en el pensamiento recto Dafa está junto con ustedes, esta es una protección y una garantía gigantes” (Enseñando el Fa en Manhattan).
Varios patrulleros circulaban a un costado de la carretera mientras yo colgaba los carteles.
Inmediatamente después de que terminé de poner el cartel y me di la vuelta, una patrullero se acercó lentamente hacia mí. Yo estaba en la acera, y lo único entre nosotros era un poste de teléfono. Pensé para mí: "Maestro, por favor, hazme invisible a la policía". El patrullero no me vio y siguió adelante.
Mi marido se me acercó rápidamente y me dijo: "Estaba tan preocupado por ti. Gracias a Dios que estás delgada y el poste de teléfono te escondió".
Yo le respondí: "No era el poste de teléfono. Fue el Maestro quien me protegió".
Durante esos días, el PCCh era más despiadado que de costumbre. Sin embargo, los carteles que coloqué en diferentes áreas duraron más de lo habitual. Me di cuenta de que no importa cuál sea la situación, no debemos dejarnos engañar por las circunstancias. Debemos creer en el Maestro, creer en Dafa y hacer lo que se debe hacer.
Con frecuencia tengo que ir a la casa de un practicante para conseguir los carteles que necesito. Se tarda unas dos horas en hacer el camino de ida y vuelta. Debido a que hay muchos lugares en el trayecto que son buenos para poner carteles, elijo caminar. Este año, alrededor del Año Nuevo Chino, el practicante sabía que necesitaba más cantidad de lo habitual, así que empacó una pequeña caja llena de materiales. Por suerte, traje una mochila lo suficientemente grande para ello. Era muy pesado cuando lo cargué sobre mi espalda, pero no dije nada al respecto y simplemente me fui.
Por razones de seguridad, nunca permito que ninguno de mis familiares que no son practicantes vayan a la casa de un practicante. Así que hice que mi marido me esperara en un lugar determinado. Tomó la bolsa y se dio cuenta de lo pesada que era. Después de caminar un poco, tiró la bolsa al suelo y se fue después de decir algunas cosas inapropiadas.
No estaba enfadada con él porque sabía que la bolsa era muy pesada. Me esforcé mucho para llevar la bolsa sobre la espalda porque me ponía muy tensa en los hombros y los brazos. Le rogué al Maestro que me ayudara. Sabía que al día siguiente habría un gran mercado en la zona, con mucha gente caminando. Por lo tanto, sabía que tenía que poner carteles aquí para que la gente los viera. De repente, mi cuerpo se sintió liviano.
Cuando mi marido volvió a verme, me dijo: "Eres tan delgada, pero tan fuerte". Le dije que porque estaba haciendo lo correcto, el Maestro me fortaleció.
Nunca más se enojó por el tamaño de la bolsa. Aunque no practica la cultivación, sabe que Dafa es bueno y me ayuda mucho.
Un día, mientras memorizaba el Fa, me di cuenta de algo.
El Maestro dijo;
“Cuando una persona de mente mala piensa en algo incorrecto, el efecto poderoso de tu campo puede cambiar sus pensamientos y quizás en ese momento el ya deje de pensar en cosas malas” (Tercera Lección, Zhuan Falun).
Me di cuenta de que Fo Fa (Ley Buda) es verdaderamente grande y compasiva.
El practicante me dijo lo complejo y laborioso que era hacer cada póster de aclaración de la verdad, así que los aprecio a todos y cada uno de ellos. Son herramientas que pueden salvar a la gente y suprimir el mal.
Reflexionando sobre mis experiencias en la colocación de carteles durante el pasado año, he sido capaz de hacerlo sin interferencias, no porque fuera inteligente o audaz, sino porque Dafa me dio sabiduría y pensamientos rectos. El Fashen del Maestro me protegía constantemente. El Fa del Maestro me hizo comprender que tengo que asumir la responsabilidad, y este sentido de responsabilidad me motivó.
Yendo hacia arriba
El Maestro dijo:
“No solo es la cuestión de que los humanos obtengan el Fa, ha impulsado a la gente para que tampoco haga más el trabajo bien, tampoco puede estudiar bien, usa gran cantidad del tiempo en la computadora, juegos electrónicos, tentándote a que veas y juegues con estas cosas. Ya no es el estado humano. Desde la antigüedad hasta hoy, los humanos no tuvieron este estado. Esto es la técnica de extraterrestres, y los demonios están usando esto, seduciéndote, haciendo que abandones todo lo que tienes, y te tiran adentro. Malgastas tu vida, ¡sin embargo ni quieres dejarlo! Desde el ángulo del comportamiento humano, ya estás mal, y aún más desde el ángulo del xiulian” (Fahui de Nueva York 2016).
Al estudiar el Fa del Maestro, me di cuenta de que las computadoras y los videojuegos son trampas demoníacas y que la popular aplicación WeChat es una de ellas. El Maestro ya nos dijo que todo está vivo en otras dimensiones. Los discípulos de Dafa no son comunes y tienen poder. Si lo aceptamos, entonces les estamos dando poder. ¿Cómo pueden los discípulos de Dafa darle poder a los demonios? ¿No estaríamos también alimentando nuestra propia naturaleza demoníaca? Así que decidí no instalar ni usar WeChat.
Durante algún tiempo, mis familiares y amigos me preguntaron por qué no usaba WeChat. Me contaron historias de cómo recibieron sobres rojos a través de él, lo conveniente que es, o lo animadas que son las charlas en grupo. No me sentí conmovida sin importar lo que dijeran.
Muchos amigos y familiares nos juntamos para la fiesta de cumpleaños de un pariente. Un pariente rico quería animar un poco el ambiente. Así que envió un par de sobres rojos por valor de varios cientos de yuanes a través de WeChat. Todo el mundo intentaba conseguir los sobres rojos excepto unos pocos ancianos. Él me vio sentada tranquilamente en mi asiento.
Me miró desconcertado y me dijo: "¿No tienes WeChat?".
Le contesté: "No".
Él respondió en un tono serio: "Admiro a los practicantes de Falun Dafa".
Después de un rato, dijo: " WeChat no es bueno".
Respondí rápidamente: "WeChat no es bueno para la gente. Controla la vida de las personas y es extremadamente perjudicial para su salud física y mental. No deberían usarlo. Deberían ser responsables de sus propias vidas".
La gente en la fiesta se rió de mí, me criticó y dijo que era muy anticuada. Al darme cuenta de que no podía convencerlos, me dije que no debía seguir la corriente de la sociedad y que debía ir hacia arriba.
Me he cultivado durante más de 22 años y, sin embargo, hubo momentos en los que todavía no podía aceptar las críticas y era autoritaria. De vez en cuando, estos apegos salían a la superficie. Sin embargo, desde el incidente de la fiesta, eliminé completamente estos apegos.
Las mejoras en mi cultivación provienen de la memorización del Fa. Durante el último año, más o menos, he cambiado mis hábitos de estudio del Fa de simplemente leerlo a memorizarlo. Me concentro mejor cuando memorizo el Fa, y me beneficio mucho de ello. Finalmente puedo asimilarme al Fa, y el significado del Fa se me revela. Cuando estoy a punto de enojarme, recuerdo el Fa del Maestro.
El Maestro dijo:
“Vagar es algo bastante sufrido; yendo a pie en la sociedad mendigando comida, se encuentra con toda clase de personas que se burlan de él, lo injurian o se aprovechan de él, puede encontrarse con toda clase de situaciones. Él se considera a sí mismo alguien que refina gong y balancea bien sus relaciones con la gente, preserva su xinxing, lo eleva constantemente y frente a las tentaciones de todo tipo de beneficios de la gente común, su corazón no se mueve” (Octava Lección, Zhuan Falun).
La comprensión del Fa del Maestro por parte de los discípulos de Dafa depende de su cualidad innata y de su virtud. Pero si el Maestro ya ha señalado el problema, uno debe escuchar al Maestro y considerarlo seriamente. Los discípulos deben cultivarse verdaderamente.