(Minghui.org) Antes de contraer matrimonio era contable, pero renuncié a mi trabajo para tener un bebé. Puse toda mi energía en la familia y confié en mi esposo financieramente. Siempre esperé que me tratara bien. La realidad, sin embargo, fue diferente. Después de la boda me enfermé, con problemas ginecológicos y estomacales. ¡Nuestra relación de pareja estaba completamente desprovista de romance!
El hermano de mi marido es sordo. No pudo encontrar trabajo, así que trabajó para mi marido. Mi esposo dejó que su hermano administrara todos nuestros ingresos y le encargó que me diera una asignación para los gastos diarios.
Sentí que esto era injusto. Renuncié a mi trabajo y mi carrera por nuestra familia, pero él no me confiaba sus ingresos. A menudo también nos peleábamos por cuestiones sin importancia. En ocasiones, él recurría a chatear con mujeres en sitios pornográficos.
Sentí que mi matrimonio estaba llegando a su fin y perdí la esperanza por el futuro. Sufrí mucho tanto física como mentalmente, sin embargo, solo pude mantener este dolor en mi corazón. Yo no quería el divorcio, pero la vida era tan difícil.
Mi vida cambió después de practicar Falun Dafa
Mi madre practica Falun Dafa. Fui testigo de los milagros que le acontecieron después de que comenzó a practicar. Estaba demasiado enferma incluso para cocinar. Pero poco tiempo después, se recuperó completamente.
Después de estudiar el Fa, aprendí muchas verdades que subyacen a la vida. Me di cuenta de que todo nuestro sufrimiento en la vida se debe al yeli (karma) que nosotros mismos creamos, también de vidas pasadas. Comprendí que todo el conflicto y el resentimiento en mi matrimonio estaba ocurriendo por una razón.
El Maestro Li Hongzhi dijo:
“Si mantienes en todo momento un corazón misericordioso y una actitud serena y pacífica, al encontrarte con problemas podrás actuar bien, porque eso da espacio para amortiguar. Si siempre eres misericordioso, tratas a los demás benevolentemente, consideras a los demás al hacer cualquier cosa, y cada vez que se presenta un problema piensas primero si los demás podrán aguantar o no y si dañas a otros o no, entonces no surgirá ningún problema. Por consiguiente, debes refinar gong según estándares altos, exigirte con estándares aún más altos” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).
Al estudiar el Fa, comprendí que siempre debemos ser considerados con los demás, ser compasivos, seguir los principios universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y mirar hacia adentro en busca de nuestros propios defectos cuando hay conflictos. Siguiendo las enseñanzas del Maestro comencé a cambiar.
Dejé de pelear con mi marido y empecé a pensar desde su perspectiva. Me di cuenta de que había cosas que yo también había hecho mal. No me preocupaba lo suficiente por él y siempre me quejaba de él. También dejé de preocuparme por la cuestión económica. Decidí que, mientras tuviera suficiente dinero para los gastos diarios, estaría bien.
El Maestro Li dijo:
“Tu consideras que eres capaz de hacer todo bien, pero no lo tienes en tu vida; el no hace nada bien, pero lo tiene predestinado en su vida y por eso le dan un puesto importante. No importa cómo piense una persona común, eso es el punto de vista de una persona común. Al modo de ver de las vidas superiores, el desarrollo de la sociedad humana está progresando meramente de acuerdo con el orden y las normas del desarrollo específicamente determinados; por lo tanto, lo que haces en tu vida humana entera, ellas de ninguna manera lo arreglan según tus capacidades. En la religión budista se habla sobre la retribución del yeli, ellas arreglan tu vida según tu yeli; no importa cuán capaz eres, si no tienes de, quizás no tengas nada en esta vida. Tú ves que él no sabe hacer nada, pero él tiene gran de, es un alto funcionario y le llega una gran riqueza. Una persona común no puede ver este punto y siempre siente que debe hacer exactamente las cosas que ella misma piensa que debe hacer. Por eso, tal persona compite y pelea durante toda su vida y su corazon sufre mucho daño; el siente mucha amargura, está muy agotado y dentro del corazon siempre esta desequilibrado. No come ni duerme bien y esta descorazonado, sin voluntad, y al llegar a la vejez ya ha hecho un gran embrollo en su cuerpo y le vienen toda clase de enfermedades” (Séptima Lección, Zhuan Falun).
Entendí que la razón por la que mi esposo no me dio mucho dinero podría haber estado relacionada con el hecho de que yo no tenía derecho a ello en esta vida. Siempre quise estar al mismo nivel que él financieramente y peleé con él por esto. ¡Así que siempre estaba estresada y terminé con muchas enfermedades!
A medida que mi mente cambió, mi corazón se hizo más grande. Ahora puedo tolerar su mal humor. Mi panorama general mejoró y mis dolencias desaparecieron. Cuando me deshice de esos apegos y mentalidades humanas, me sentí feliz y saludable. Mi familia ahora vive en armonía!
Mi marido habló conmigo sobre la compra de una casa en Tianjin el año pasado. Yo vivía con nuestro hijo en nuestra ciudad natal, mientras mi marido alquilaba una casa con su hermano en Tianjin.
Pagamos íntegramente el precio de una casa en los suburbios de Tianjin. Entonces me enteré de que el título de la propiedad estaba en realidad a nombre de su hermano.
Estaba furiosa y no entendía. ¡Él me ocultó un secreto tan grande! Le pregunté por qué la casa estaba a nombre de su hermano. Luego me explicó que era para no tener que pagar más impuestos, ya que tenía otras dos casas. Sin embargo, la política fiscal a la que hace referencia sigue siendo objeto de debate y no es una ley. ¡Me obligué para no perder los estribos!
Fue difícil dejar de lado el tema de la casa. Sabía que todo sucede por una razón y recordé lo que dijo el Maestro Li:
“Nosotros los cultivadores hablamos de seguir el curso natural: si algo te pertenece, no lo pierdes, y si algo no es tuyo, no lo consigues por más que luches. Por supuesto, esto tampoco es absoluto. Si todo fuera tan absoluto, tampoco existiría el problema de que el hombre cometa maldades, es decir que pueden existir algunos factores inestables. Sin embargo, nosotros, siendo personas que refinan gong, en principio los Fashen del Maestro se hacen cargo, y por más que otros deseen tomar tus pertenencias, no pueden. Por eso hablamos de seguir el curso natural; a veces piensas que esa cosa es tuya e incluso los demás te dicen que esta cosa es tuya, pero en realidad no es tuya. Probablemente consideres que es tuya, pero en última instancia no es tuya y, en medio de esto, se te pone a prueba para ver si puedes dejarlo o no; si no puedes dejarlo, entonces es un corazón de apego y se tiene que emplear este medio para quitarte este corazón de búsqueda de beneficios, es precisamente esta cuestión. Dado que la gente común no se ilumina a este principio, al estar enfrente de beneficios todos quieren competir y contender” (Séptima Lección, Zhuan Falun).
Hice todo lo que pude para corregir mi pensamiento siguiendo lo que dijo el Maestro. Tal vez le debía a mi esposo en una vida anterior, y esta era una forma de devolverlo. Tal vez el Maestro Li me estaba ayudando a deshacerme de mi apego a la búsqueda de ganancias. ¡Fue algo bueno sin importar el qué! ¿Por qué debería sentirme incómoda? Sin la casa, aún puedo ser feliz. ¡Tengo la bendición de ser una practicante de Dafa, la cual ninguna suma de dinero puede comprar! El hermano de mi marido es un hombre pobre y discapacitado. ¡Está bien darle una casa donde vivir!
Cuando mi mente cambió, mi enojo desapareció, y de repente me sentí renovada. El Maestro Li dijo:
“Decimos que si frente a un conflicto uno puede dar un paso atrás, se encontrara con un vasto mar y un cielo sin límites; está garantizado que habrá un escenario diferente” (Zhuan Falun).
Experimenté la felicidad después de que mi xinxing mejoró a través de la cultivación. Esto demuestra el extraordinario poder de Dafa, que mejora la moralidad humana y cura las enfermedades. Si más gente practicara Dafa, nuestra sociedad se volvería más armoniosa y maravillosa. Espero que todos puedan entender la verdad sobre Falun Dafa y poder obtener la gracia y la bendición de Dafa.