(Minghui.org) El año pasado [2004], un sitio web de Falun Dafa publicó un artículo titulado 'Por qué el policía dijo: 'Los practicantes de Falun Gong son personas sabias''. El artículo comentaba cómo un policía había presenciado que la curvatura pronunciada de la columna vertebral (cifosis) de una mujer mayor que había sufrido esta condición más de veinte años, se había enderezado después de practicar Falun Dafa durante tres meses. Después de una prolongada y difícil búsqueda, finalmente encontré a esta mujer. Esta es la historia que me contó:
Leí el artículo publicado sobre mí en Internet. Lo que dijo el policía fue en gran parte cierto pero no totalmente fiel. Después de practicar Falun Dafa mi enfermedad se curó en tres días, no en tres meses. Realmente, ¡en solo tres días, mi columna vertebral que había estado curvada por veinte años se enderezó! Falun Dafa es tan maravilloso. Soy un ejemplo vivo. Mi nombre es Wu Weiyu. Vivo en la aldea de Yishan, ciudad de Liuzhou. Desde que tuve 50 años, no había podido mantener mi espalda erguida. Durante los últimos 20 años, sentí dolor en la espalda cada día. Mi cuerpo estaba doblado casi en ángulo recto. Busqué tratamiento en todas partes. Tomé mucha medicina y gasté mucho dinero. Mi hijo fue muy amable conmigo. Cada vez que se enteraba de que había un buen médico chino en alguna parte, me llevaba para el tratamiento. También dijo que estaba dispuesto a gastar decenas de miles de yuanes siempre que se curara mi enfermedad. En ese momento, decenas de miles de yuanes no eran un número pequeño.
Un día, mi vecina, la Sra. Li, me contó acerca de una persona cuya curvatura espinal de más de diez años se había vuelto recta después de que practicó Falun Dafa por solo un año. Ella me preguntó si lo creía. Dije de inmediato: "Lo creo, lo creo. Por favor enséñame. Estoy dispuesta a pagar por ello". La Sra. Li dijo: "Quienes enseñamos Falun Dafa somos voluntarios. No cobramos ninguna tarifa”. Después de decirlo, me dio algunos materiales informativos de otros practicantes de Falun Dafa.
Luego me dio una copia de Zhuan Falun [las enseñanzas principales de Falun Dafa]. Me pidió que leyera el libro con cuidado y me enseñó los ejercicios.
Después de leer Zhuan Falun, entendí muchos principios. Muchas preguntas que nunca pude entender quedaron claras. El tercer día después de comenzar a practicar Falun Dafa fue el día más inolvidable de mi vida. Era el 25 de diciembre de 1998. Ese día me levanté muy temprano. Aunque solo había aprendido dos de los ejercicios, y ni siquiera podía sentarme con las piernas cruzadas, fui al parque a las 4:30 a. m. En el camino hacia el parque, me sentía distinta como nunca antes; mi cuerpo se sentía ligero y los músculos de mi estómago no estaban tan tensos como antes. Había más de diez personas en el sitio de práctica. Nos paramos en un círculo escuchando la música de los ejercicios. Cuando estábamos haciendo el segundo ejercicios, Estaca parada Falun, mi columna vertebral de repente emitió un sonido, "crac, crac, crac". Estaba muy tranquila en ese momento. Todos escucharon el sonido de mi columna vertebral resquebrajándose. Sentí que mi cuerpo se estaba enderezando lentamente. Un momento después, pude ver las cabezas de los compañeros practicantes. Antes, solo podía ver las piernas de otras personas. Durante 20 años, soporté la pesada carga de mi enfermedad; con frecuencia no entendía por qué estaba viva. Es nuestro Maestro quien me dio un cuerpo sano. No pude describir lo que sentí entonces. Miles de palabras no pudieron expresar mi gratitud a nuestro Maestro.
Tras terminar nuestros ejercicios, mis compañeros practicantes abrieron los ojos y preguntaron qué fue ese sonido. Cuando me vieron allí de pie, se sorprendieron: '¡Ah! Sra. Wu, ¿eras tan alta?'. Todos en el sitio derramaron lágrimas de felicidad, juntaron las manos en el gesto de Heshi [Heshi, un signo de respeto], y agradecieron a nuestro Maestro por su compasión.
Unos seis meses después, llegó el 20 de julio de 1999. La persecución de los practicantes de Falun Dafa comenzó ese día. El comité municipal del partido de la ciudad de Liuzhou, la administración de la ciudad, la oficina de policía y las estaciones de policía de todos los distritos y vecindarios hicieron turnos para arrestar a los practicantes de Falun Dafa, saquear nuestras casas, amenazarnos y tratar de obligarnos a abandonar Falun Dafa. Los policías trajeron papel y pluma y me pidieron que escribiera una carta de garantía [para renunciar a Falun Dafa]. Escribí: "Mi Maestro es la persona más benevolente del mundo. Su favor hacia mí es más grande que una montaña. Garantizo que seguiré a mi Maestro toda esta vida, y para siempre”.
Les conté mi historia a todos los policías. Reuní a todos mis vecinos y compañeros de trabajo como mis testigos. Todos declararon que la espalda de Wu Weiyu estuvo doblada por más de veinte años. Es verdad que se curó hace medio año.
El 28 de julio de 1999, dos periodistas de la columna ‘Situación presente de la policía en un periódico de la oficina de policía de la ciudad de Liuzhou, y dos policías de la oficina de policía vinieron a mi casa con una cámara de televisión. Me exigieron que leyera una declaración que ellos habían escrito, diciendo que mi enfermedad se curó tomando medicamentos. En cambio, dije directamente a la cámara: Durante más de veinte años sufrí de curvatura severa de la columna, viví una vida muy difícil. ¿El partido se preocupó por mí entonces? Ahora, mi Maestro curó mis enfermedades sin pedir nada a cambio. Ahora quieren que traicione a mi Maestro y haga cosas contra el Cielo y mi propia conciencia. No lo haré.
Un policía amenazó con enviarme a un campo de trabajo forzado si no cooperaba. Dije: mátame con un cuchillo o una bala si te atreves. Por lo tanto, la cinta de video no pudo servir a su propósito. Este incidente fue simplemente olvidado con el tiempo. En los últimos cinco años, he persistido en el estudio del Fa (1) y practico los ejercicios. No he necesitado tomar ningún medicamento y mi cuerpo se ha vuelto más saludable. Mi experiencia personal ha demostrado que practicar Falun Dafa puede hacer que uno llegue a estar más y más saludable. ¡Nunca abandonaré la cultivación, nunca!
Nota del editor:
Publicado en el libro: Vida y esperanza renovadas: El poder curativo de Falun Dafa
Copyright (C) 2005, www.FalunDafa.Org