(Minghui.org) Recientemente leí una carta de un practicante que señalaba algunos errores en nuestros materiales informativos de Falun Dafa.
El practicante escribió: "Un profesor de chino expresó que nuestra escritura es pobre, y nuestra redacción es deficiente. Los artículos de los practicantes a menudo usan los caracteres equivocados, frases incorrectas o significados contradictorios. Sus comentarios me llamaron la atención, y ahora repaso con cautela los materiales informativos sobre Falun Dafa y la persecución antes de distribuirlos".
Siento que hemos descuidado pulir o mejorar nuestras habilidades escritas. Tradicionalmente, en Occidente se da mucha importancia al estilo, la gramática, la composición y la ortografía. Estos pueden ser observados como el reflejo inmediato del nivel de educación del escritor.
Hay una expresión china: "La escritura refleja al escritor", lo que significa que la forma en que se escribe el artículo refleja la personalidad y la mentalidad del autor.
Creo que nuestros artículos no deben contener información incorrecta, mensajes empalagosos o exageraciones. Nuestros escritos deben ser veraces, apropiados y mostrar a los lectores las maravillas de Dafa.
En lo que respecta al uso de los caracteres chinos equivocados, puede que no lo consideremos un gran problema. Tal vez sentimos que no tenemos tiempo para hacer correcciones o que tenemos cosas más importantes a qué dedicarnos, así que no necesitamos prestarle atención. Sin embargo, refleja la actitud que tomamos para con nuestros lectores y nuestro nivel de profesionalismo.
Si prestamos atención a todo, tanto a lo grande como a lo pequeño, seremos más convincentes cuando aclaramos la verdad. Cuando nuestros artículos no contienen errores estamos mostrándonos respeto a nosotros mismos, a los editores y a los lectores.
La carta del practicante también decía: "Escribir no es difícil y no requiere un título avanzado. Entonces, ¿qué se necesita? Primero, escribir la información y luego leerla varias veces. Mirar si lo que se ha escrito expresa claramente los pensamientos de uno, luego modificarlo y corregirlo en consecuencia, asegurándose de que el mensaje quede claro y sea coherente".
Espero que los practicantes recuerden las palabras del Maestro:
"...abriga altas aspiraciones, pero es cauteloso también en pequeños detalles" (El Santo, Escrituras esenciales para mayor avance).