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​Cultivándonos juntos: Campamento de verano de la escuela Minghui en Toronto

Ago. 16, 2018 |   Por Zhang Yun, corresponsal de Minghui

(Minghui.org) "Pasaron seis semanas. ¡De verdad que no quiero irme! Estoy deseando que llegue el Campamento de Verano de Minghui el próximo verano", dijo un estudiante de 12 años. El Campamento de verano de la Escuela Minghui de Toronto 2018 se llevó a cabo del 3 de julio al 10 de agosto. El campamento ofreció clases de danza clásica china, música y cultura tradicional china, basadas en las obras literarias clásicas Viaje al Oeste y Romance de los Tres Reinos.

Los estudiantes del Campamento de verano de la Escuela Minghui de Toronto, realizan los ejercicios de forma grupal a diario y estudian el Fa.

"Pedí venir a la Escuela Minghui"

Gordon Wei (a la derecha).

Gordon meditando (a la derecha).

Fue la primera experiencia en el Campamento de Verano de Minghui para Gordon Wei, un niño de 11 años de sexto grado. "Mi madre y yo practicamos Falun Dafa y mi padre siempre me enviaba a campamentos de verano de otras escuelas. Pedí el campamento de verano de Minghui este año. Mi padre respetó mi decisión y me trajo aquí".

"Esta es una escuela muy diferente. Estoy tan contento porque tenemos un horario para el estudio del Fa y para hacer los ejercicios. Puedo reunirme con ellos aquí. Suelo tener muchas distracciones en casa y no puedo dedicarle tiempo. También tengo tiempo para practicar con el violín".

Gordon dijo que su chino mejoró mucho desde el estudio diario del Fa, leyendo Zhuan Falun en chino. "Aprendí muchos caracteres tradicionales chinos e historias de la cultura tradicional china". "Esto es algo que no lo habría podido aprender en otras escuelas. Me encantan las historias. Soy chino. Sería una pena si no conociera mi propia cultura".

"Pocas veces tenemos conflictos aquí", continuó. "Porque cada estudiante es un practicante de Falun Dafa. Todos conocemos los requisitos. No tuve ningún conflicto en las últimas seis semanas. Todo el mundo es bueno conmigo. Todos sabemos buscar en nuestro interior y ser considerados y tolerantes con los demás".

La escuela no permite juegos de Internet ni teléfonos celulares. Gordon dijo: "Mi mamá me dijo que los videojuegos no eran buenos. Así que dejé de jugar. En 4.º grado, mi escuela proporcionaba videojuegos a los alumnos durante el recreo del almuerzo. Una vez jugué durante 10 minutos. Me dolía la cabeza, estaba mareado y sudando. No jugué videojuegos desde entonces. Ni siquiera pensé en esto en la escuela Minghui porque nadie los juega aquí".

Annie Cheng (al frente).

"Quería venir a la escuela Minghui. Le pedí a mi mamá que me envíe. Descubrió el Campamento de verano de Minghui en Toronto. Así que aquí estoy", dijo Annie Cheng, una niña de ocho años de Minnesota, Estados Unidos.

"Aquí me gusta mucho, porque podemos estudiar el Fa y hacer los ejercicios juntos. Los compañeros pocas veces discuten o pelean. Todos buscamos hacia adentro y decimos "es mi culpa". Los conflictos desaparecen entonces".

Annie no quería irse cuando su madre vino a recogerla a la escuela: "¿Tengo que irme, tan pronto? Se sintió como si fuera solo una semana. No me quiero ir. Hice muchos mejores amigos aquí"."Me siento mucho más tranquila desde que dejé de jugar con los videojuegos".

Michael Wang (primero a la derecha).

Michael Wang es un estudiante de quinto grado. "Me cultivo con mi mamá desde que era muy pequeño", dijo. "Empecé a memorizar Hong Yin, cuando tenía dos años. La escuela Minghui es diferente. Todos resolvemos los conflictos inmediatamente y luego volvemos a ser buenos amigos. La gente no pelea aquí y no hay necesidad de reportar a los profesores cuando se necesita resolver un problema".

Hablando de videojuegos, Michael dijo: "Los abandoné por completo el año pasado. Mamá me dijo que no juegue videojuegos. Sé que no es bueno para mí y sé que me enojo cada vez que los juego. No podía controlarme y tenía que hacer cosas malas, como tomar cosas sin permiso o pelear con otros. No quería ser controlado por los demonios, así que decidí dejarlos".

"Fue difícil al principio. A veces salía a correr o a caminar, cuando realmente quería jugar a los videojuegos. Tardé dos semanas en dejarlos. Me siento mucho más tranquilo, desde que dejé los videojuegos. Mi humor también está mucho mejor".

"Aprendí a ser considerada con los demás"

Emma (a la derecha).

Emma He, de nueve años de edad, está aprendiendo danza clásica china, erhu (un instrumento de cuerdas tradicional chino) y piano. Dijo: "Mi madre me dijo que escucho el Fa desde que nací y me cultivo desde que era muy pequeña. En la escuela de Minghui aprendí a ser considerada con los demás. Por ejemplo, cuando estaba jugando ajedrez y empecé a ganar y vi que mi amiga no estaba contenta, la dejé ganar. Entonces ella era feliz y yo también lo era. Juntas nos divertirnos.

"También tolero a mi madre, cuando está enfadada. Soporto sus regaños y no le contesto. De lo contrario, se enfadará más. A veces le recuerdo que no se enfade, que no huya, si no puede mejorar su humor. Una vez que estaba practicando el erhu, ella vino a mi lado y empezó a decirme que cometía errores. Ella no sabe tocar Erhu, pero me quedé callada. Entonces se calmó y sonrió. Sé que ella se preocupa por mí".

Sophie.

Sophie, de diez años de edad, dijo: "Una vez, un compañero de práctica quería jugar un juego que nos gustaba a ambos, pero el otro practicante quería jugar un juego diferente. No estábamos de acuerdo y él no estaba contento y se hizo a un lado. Pensé: “¿No se supone que debemos divertirnos? Todos deberíamos ser felices. Así que convencí a mi amigo de jugar al otro juego juntos”.

"El ambiente es muy puro"

Lisa (a la derecha).

Lisa, de 12 años, dijo que el ambiente en la escuela de Minghui es muy puro."Tenemos tiempo para el estudio del Fa en grupo y para hacer los ejercicios. No puedo hacerlos en casa, porque siempre me distraigo. Es por eso que esperaba el campamento de verano. Todos los días estudiamos el Fa y hacemos los ejercicios. Siento mucha paz interior, porque los practicantes deben estudiar el Fa y hacer los ejercicios. Además, aprendemos cultura tradicional china y los caracteres tradicionales del idioma chino. Nos recordamos mirar en nuestro interior".

Lisa dio un ejemplo: Si le cuento a un amigo de la escuela Minghui que tengo un conflicto con otro, entonces él dirá: "Primero piensa si tienes tú la culpa". Entonces Lisa mira hacia adentro y se disculpa con el estudiante con el que tuvo el conflicto. El otro estudiante también buscará hacia adentro. Entonces el conflicto se resolverá pronto y no quedará ninguna brecha sin resolver. Lisa comentó: "Sin embargo, en otra escuela, mi amiga podría empezar a decir cosas malas sobre el otro estudiante y empeorar el conflicto. Esto puede eventualmente crear divisiones entre los estudiantes".

Lisa también dijo que no había bullying en la escuela Minghui, dijo que conocía a una chica en su escuela. La niña tenía cicatrices en las muñecas y le dijo a Lisa que intentó suicidarse varias veces a causa del bullying. Ella le contó a Lisa sobre sus experiencias y su dolor. Lisa le dijo que fuera tolerante con los intimidadores, porque estaban haciendo cosas malas y que en realidad se estaban haciendo daño ellos mismos. Ella le presentó a Falun Dafa y le recomendó que leyera a Zhuan Falun. Su amiga está más segura ahora y su situación mejoró mucho.

Foto grupal, después de la obra de teatro "Viaje al Oeste", en el último día del campamento.