(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa el 6 de junio de 1998. Actualmente tengo 64 años. Antes, tuve enfisema y apenas podía respirar. Me encontraba imposibilitado de hacer trabajos físicos, no podía cargar dos baldes de agua. Mi esposa estaba relegada a hacer toda la tarea pesada.
Mi respiración mejoró después de practicar Falun Dafa por tres meses. Mi cuerpo continuó recuperándose y me volví saludable. Pronto fui capaz de hacer el trabajo pesado, mi esposa e hijos estaban felices por mí.
El Maestro Li Hongzhi, el Fundador de Falun Dafa, nos enseña a ser buenas personas. Además de ser un buen esposo y padre, también ayudé a otros en mi área. El siguiente un ejemplo reciente.
Una de mis vecinas tiene 90 años. Fue madre de cuatro hijos, pero tres de ellos fallecieron. El que le queda no cuida de ella. Su nieto confiscó el único espacio de tierra y ni siquiera le provee alimentos. Fue muy difícil para esta mujer sobrevivir.
Viendo su necesidad, le di casi la tercera parte de mi terreno. Luego la ayudé a plantar, cultivar, cosechar y llevar la producción a su casa. Quiso pagarme, pero rechacé el dinero, incluso el de las semillas.
Estaba agradecida y dijo: “Muchas gracias. ¡Eres una buena persona!”.
“Debe agradecerle a mi Maestro y a Dafa”, le respondí. “Es porque practico Falun Dafa que he aprendido a ser una buena persona. Recuerde que “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”. Estaba encantada y repetía las frases, jurando que siempre las recordaría.
Lo que hice tuvo un gran impacto en mi aldea. Algunos aldeanos exclamaron: “¡Los practicantes de Falun Dafa son verdaderamente espectaculares!”. A mis vecinos ahora les gusta escucharme contar los hechos sobre Falun Dafa, y muchos han renunciado al partido comunista chino. ¡Ellos tendrán un gran futuro!”.