(Minghui.org) La Sra. A Mei [alias] vive en un área rural y comenzó a practicar Falun Dafa en 1996.
Debido a que tenía muchos hermanos y su familia tenía poco dinero, abandonó la escuela en tercer grado para permitir que sus hermanos asistieran a la escuela en su lugar. Cuando Mei creció, se casó y tuvo cuatro hijas. Sin embargo, dado que no tenía hijos, su suegra la miraba con desprecio y no quiso ayudar a cuidar a las niñas. También criticaba constantemente a Mei, y aprovechó cada oportunidad para hacerle la vida difícil.
Después de que Mei comenzó a practicar Falun Dafa, siguió los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia y dejó de sentir resentimiento por el comportamiento de su suegra. En cambio, se volvió muy respetuosa con sus suegros. Lavaba la ropa de cama y la vestimenta, también cocinaba para ellos. Su esposo es el hijo más joven y tiene dos hermanos mayores. En contraste, sus cuñados no parecían preocuparse por sus padres ancianos. Su suegro estaba muy conmovido por la bondad de Mei
Cuando Mei notó que la mesa de su suegra estuvo a punto de colapsar, compró una mesa nueva para ellos. Su cuñado la criticó y dijo que debería haber arreglado la mesa en lugar de gastar dinero en una nueva. Cuando la cuñada de Mei vio que sus suegros tenían un televisor nuevo, se lo llevó a su casa. Mei inmediatamente compró otro nuevo para reemplazarlo y lo llevó a la casa de sus suegros.
En un momento dado, la bicicleta vieja de su suegro se rompió, por lo que Mei le compró una nueva. Cuando notó que su cama anterior se había vuelto inestable, compró una cama nueva. Ella también instaló una estufa de gas y calentador para que lo usaran en invierno.
Los suegros de Mei se conmovieron por su compasión, y hablaron muy bien de ella con los demás aldeanos.
Todos los aldeanos sabían que Mei practicaba Falun Dafa y comentaban que era amable y compasiva porque Dafa enseña a las personas a ser buenas. Poco a poco, todos comenzaron a pensar positivamente sobre Dafa, especialmente cuando comparaban el comportamiento de los otros dos hermanos y sus esposas con los padres ancianos.
Cuando su suegro murió, Mei mostró aún más cuidado hacia su suegra. Le cortó las uñas, la bañó, le lavó la ropa de cama, le compró ropa nueva para ocasiones especiales e hizo una nueva ropa de cama. Se aseguró de que su suegra estuviera limpia y cómoda. Cuando su suegra enfermó, Mei la llevó al médico, le cocinó y la cuidó. Incluso cuando la anciana perdió el control de sus esfínteres. Mei limpiaba inmediatamente después de ello. Sus cuñados no ayudaron, sino que se marcharon rápidamente.
En un momento dado, los tres hermanos acordaron que deberían turnarse para cuidar a su madre. En la casa de Mei, a la madre le dieron la mejor habitación, que es cálida en invierno y fresca en verano, y ropa de cama limpia. Cuando llegó el momento de que los otros dos hermanos cuidaran de su madre, la colocaron en la peor habitación de sus casas. La suegra no pudo evitar elogiar a Mei. Ella dijo que no quería irse de la casa de Mei y cuando lo hizo, no podía esperar para regresar.
En 2017, la suegra fue hospitalizada. Mei le compró ropa de cama nueva y fue al hospital a cuidarla. Incluso se quedó toda la noche. Los parientes de los otros pacientes notaron cuán cuidadosamente Mei se hizo cargo de ella y le preguntaron si Mei era su hija. Mei le explicó que practicaba Falun Dafa y que el Maestro le enseñó a ser considerada con otras personas. Aprovechó la oportunidad para aclararles la verdad a ellos y a sus familiares y los ayudó a renunciar al partido comunista chino (PCCh) y sus organizaciones juveniles.
Después de que la suegra falleciera, se suponía que debía ser enterrada con el suegro en la tierra propiedad del segundo hijo. Pero él se negó a permitir que fuera enterrada allí, y fue incluso bastante grosero al respecto. El jefe de la aldea trató de intervenir, porque si alguien moría y no tenían dónde enterrarlo, era un gran problema. Mei decidió ofrecer su tierra para enterrarla. Al final, los restos de los tres parientes de la familia, incluido su suegro, fueron exhumados y enterrados en la tierra de Mei. La suegra recibió un entierro digno y adecuado.
Debido a que Mei hizo esto, se hizo muy conocida en la aldea por su extraordinaria bondad. Todos sabían que, si ella no hubiera practicado Falun Dafa, no habría estado dispuesta a hacer todo lo que había hecho. La situación habría causado muchos problemas en la familia y los habría separado. Peor aún, la familia habría sido ridiculizada por los aldeanos. Debido a la generosidad de Mei, la situación se resolvió de manera tranquila y silenciosa. Ahora todos los aldeanos dicen cosas positivas sobre Mei y Falun Dafa, y muchos han dicho: "¡Falun Dafa es bueno!”.
Después, fue fácil para Mei hablar con la gente sobre Falun Dafa y pedirles que renuncien al PCCh. Ahora, cuando publica información sobre Dafa, los materiales permanecen activos durante mucho tiempo en toda la aldea. Algunos aldeanos incluso le piden materiales sobre Dafa para leer.
Mei es muy diligente y no ha dejado de hacer las tres cosas. Aunque su nivel de alfabetización es bajo, con la ayuda del Maestro y la asistencia de compañeros practicantes, dirige un pequeño sitio de producción de materiales de Dafa en su casa. Ha estado en operación durante los últimos años sin problemas. Toda su familia apoya su práctica de Falun Dafa.
Si los discípulos de Dafa hacen un buen trabajo, nadie creerá en las mentiras del mal. A medida que se conoce la verdad de Falun Dafa, los discípulos de Dafa son de hecho "...la única esperanza de salvación para la gente del mundo..." (Enseñando el Fa en la reunión de La Gran Época).