Residente canadiense habla en favor de la señora Wu: ¿Por qué el régimen comunista tortura a una anciana por sus creencias?
(Minghui.org) Soy de la provincia de Guangdong, China, y actualmente vivo en Canadá. Mi corazón se sintió abatido cuando me encontré con un artículo sobre una mujer que conozco bien.
El artículo decía: "En noviembre de 2016, una mujer de 70 años fue atada con las dos piernas cruzadas durante largos períodos de tiempo mientras estaba detenida en un centro de lavado de cerebro en la ciudad de Guangzhou. La tortura le causó la ceguera total en el ojo derecho, y la pérdida parcial de la visión de su ojo izquierdo que se encuentra severamente afectado".
Conocí a la Sra. Wu Yangzhen en 2001. En ese momento yo trabajaba para su hija como ama de llaves. La Sra. Wu acababa de salir de un campo de trabajo forzado de Guangzhou.
Sra. Wu Yangzhen.
La Sra. Wu me dijo que fue detenida por negarse a renunciar a Falun Gong. En ese momento no sabía mucho sobre la práctica, excepto por la propaganda difamatoria del gobierno. Sin embargo, fui testigo que la tía Wu no se parecía en nada a lo que describía la propaganda calumniosa del partido.
Cuando se enteró que todos los días iba a la casa de su hija en bicicleta, me dio dinero extra para que pudiera ir en autobús. No podía creer que ella hiciera esto por mí cuando hoy tanta gente solo se preocupa por sus propios intereses.
A menudo compartía conmigo sobre los beneficios de practicar Falun Gong, de cómo había mejorado su salud tanto física como mental. En ocasiones tenía conflictos con su nuera, pero siempre había sido capaz de manejar las cosas bien siguiendo los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia.
Me interesé por Falun Gong y quise probarlo. Desafortunadamente, la Sra. Wu fue arrestada nuevamente por su fe, no mucho después de su liberación en 2001.
Durante el brote de SARS en 2003, mi hijo a menudo tenía fiebre y yo también sentía molestias en todo mi cuerpo. Me acordé de la Sra. Wu y llamé a su hija. Cuando me enteré que justo acababa de salir de la cárcel, fui inmediatamente a visitarla. Me consiguió algunos libros de Falun Gong y también me enseñó a hacer los ejercicios.
Debido a las torturas y arrestos que sufrió presentó una denuncia penal contra el exdictador chino Jiang Zemin en julio de 2015 por haber iniciado la persecución contra Falun Gong. Por hacer esto, fue arrestada nuevamente el 2 de noviembre de 2016 y quedó ciega del ojo derecho después de solo 19 días de detención.
Me pregunto, qué tipo de gobierno tiene China que obliga a una persona de buen corazón como la Sra. Wu, a pagar un precio tan alto, por el simple ejercicio de su derecho constitucional a la libertad de creencia.
Hago un llamamiento a la comunidad internacional para que preste atención a la difícil situación de la Sra. Wu y ayude a poner fin a la persecución que sufre Falun Gong.
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