(Minghui.org) Soy un practicante nuevo de Falun Dafa. Antes de comenzar a practicar, la idea de “la muerte" a menudo me preocupaba. Estaba atormentado por las enfermedades, era severamente adicto a los videojuegos y estaba inmerso en la búsqueda de la fama, el interés personal y el sentimentalismo.
A veces, fui al último piso de nuestro edificio de oficinas con el deseo de terminar mi vida saltando. Una vez soñé que después de morir, mi espíritu seguiría jugando videojuegos. La vida parecía no tener esperanza.
Cuando llegué a lo profundo de la desesperación, el Maestro Li me salvó del infierno ayudándome a obtener el Fa universal y a comprender verdaderamente el significado de la vida.
Fue Dafa que me cambió por completo, de ser alguien muy negativo y que a menudo se iba a los extremos, a convertirme en un practicante que se guía por los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.
Por la gracia salvadora de Shifu, mi gratitud está más allá de cualquier descripción. Con motivo del 13 de mayo, Día Mundial de Falun Dafa, me gustaría compartir mi historia para alentar a las personas a ser conscientes de las muchas trampas en la sociedad de hoy y comprender verdaderamente que ¡Falun Dafa es maravilloso!
Adicto a los juegos, mi sentido de la moral y la ética declinan
Nací en los años ochenta. Cuando comencé a ir a la escuela, las películas de dibujos animados estaban en auge. Y las veía para pasar el tiempo. Más tarde, a menudo frecuentaba salas de juegos sin decírselo a mis padres. Para cuando estaba en la escuela secundaria, me había vuelto adicto a los juegos de computadora.
Mi casa estaba lejos de la escuela, así que me iba de casa temprano y llegaba a clase muy tarde todos los días. Me gustaba ir al cibercafé o a la sala de juegos. Cuando me faltaba efectivo, simplemente se lo robaba a mis padres. Nadie sabía que llegaba tarde a la escuela porque había estado en la sala de juegos; y que no tenía nada que ver con vivir lejos de la escuela.
Durante mi residencia en el campus en los años superiores de la escuela secundaria, a menudo fui a jugar juegos toda la noche. Aunque pasaba menos tiempo jugando juegos que cuando estaba en los años inferiores de la escuela secundaria, no puse mi corazón en estudiar y terminé reprobando exámenes.
Mis padres tuvieron que usar sus conexiones para sobornar a la escuela y así lograr que pueda ingresar a la universidad. Había tres carreras para elegir. Para que mis padres paguen por una computadora costosa, decidí estudiar informática. Pasé de jugar juegos en secreto a jugar abiertamente. En mis últimos dos años, apenas fui a clase y simplemente pasé mucho tiempo jugando juegos en mi dormitorio.
Después de que comencé a trabajar, tenía un ingreso y tenía el control de mi tiempo libre. Solo caí más profundo en mi adicción. A menudo iba a la tienda de juegos para jugar. En los tres años antes de comenzar a practicar Dafa, me costó aproximadamente cuarenta mil yuanes invertir en un solo juego de computadora.
Utilicé mi salario para jugar juegos en secreto sin que mi esposa lo supiera. Cuando se agotó mi salario, comencé a usar tarjetas de crédito. Intenté cubrir el costo de jugar juegos de todas las formas posibles. Como resultado, después de trabajar durante ocho años, tuve muy pocos ahorros.
Pasé mi tiempo jugando juegos todos los días. Jugué en el trabajo y en casa. Los fines de semana o días festivos, me reunía con mis amigos e iba al cibercafé para jugar. Pasaba todo el día allí y dejaba de lado a mi familia. Cuando mi familia me pedía que volviera a casa, que apagara la computadora o que fuera a cenar, a menudo les dije que estaría allí pronto.
Entonces simplemente los ignoraba. Solo me detuve cuando estaba completamente agotado. Llamaba a mis amigos de la sala de juegos para hablar sobre juegos sin parar. Los juegos se convirtieron en mi mundo entero. Tenía muy poco tiempo para cualquier otra cosa.
Tanto mi esposa como mi padre estaban muy enojados conmigo. Me había perdido completamente. No importaba cuánto mi familia intentara persuadirme, nada podía cambiarme.
Mi sentido del bien y el mal se fueron por la ventana, y mi salud se deterioró. Ahora, mirando hacia atrás, veo que mi comportamiento era muy inferior al de una persona promedio.
Pasé de estar en forma a estar plagado de síntomas de enfermedad. Tuve pérdida de cabello y me volví miope. A menudo no podía orinar durante mucho tiempo, lo que resultó en una vejiga hinchada, dolor de próstata y acné. Me dolía la parte inferior de la espalda, el cuello y la cabeza, y se desarrolló un bulto entre mi tercera y cuarta vértebra cervicales. Como resultado, no pude sentarme ni pararme derecho. ¡Parecía mucho mayor que alguien de mi edad!
Persuadido por mi madre, comencé a leer los libros de Falun Dafa.
Tenía que hacerme un electrocardiograma en preparación para una operación de hemorroides. Los latidos de mi corazón eran irregulares, pero ignoré el resultado y seguí adelante con la cirugía. Resultó ser un procedimiento pequeño, pero luego perdí fuerza en ambas piernas y los músculos de mis piernas se convirtieron en grandes bultos.
Caminando hacia una tierra pura y una nueva vida
Me estaba recuperando en el sofá cuando un compañero practicante vino a visitar a mi madre. Invitó a mi madre y a mi hermana a asistir a una conferencia de intercambio de experiencias local para jóvenes practicantes. El asiento estaba reservado para mi hermana menor, pero ella no quería ir.
Al ver mi condición, el practicante sugirió que mi madre me llevara en su lugar. Inicialmente, no quería ir, pero insistieron y, al final, me sentí obligado a ir. Mientras subía a la sala de reuniones, tenía que tomar un descanso cada dos pasos, incluso con alguien que me ayudara.
Vi a muchos practicantes jóvenes que no conocía y me senté en una esquina para ver las Conferencias del Maestro Li en Guangzhou. ¡Hasta ahora puedo recordar esto vívidamente!
Sabía de antemano que Dafa era excelente y que mi madre se había beneficiado enormemente de la práctica cuando todas sus enfermedades fueron curadas. Nuestra familia vivía en armonía, y ella esperaba que yo obtuviera el Fa también.
Sin embargo, fui educado para ser ateo y fui interferido por mi adicción a los juegos de computadora, así que no pudía entender los principios del Fa de Shifu. No comprendía el significado de cultivarse y elevar el xinxing. Sospechaba de Dafa y no creía completamente en Shifu.
Pero cuando vi el Seminario de nueve días del Maestro Li en Guangzhou, todo el campo de energía fue muy compasivo y pacífico. Poco a poco comencé a entender las enseñanzas de Shifu, como “Zhen-Shan-Ren es el único criterio para evaluar si una persona es buena o mala” (Primera Lección, Zhuan Falun).
Aprendí a eliminar mis apegos y a mirar hacia adentro. Llegué a entender que esta era la ley Buda que ofrece salvación a todos. Mi visión del mundo cambió drásticamente. Mis ideas perversas se vinieron abajo y fueron reemplazadas por una visión saludable del mundo.
Todos los días, después de que terminábamos de ver la conferencia de Shifu, nos juntábamos a hacer los cinco ejercicios. Al principio, no podía sentarme en la posición de loto completa, así que me senté en la posición de medio loto. Más tarde, cuando traté de bajar la pierna, otro practicante me animó firmemente a que persistiera. Todos estudiábamos el Fa, hacíamos los ejercicios y compartíamos.
Después de unos días, cambié por completo. Al principio necesité ayuda para caminar, pero luego pude caminar por mi cuenta. Cuando estaba subiendo las escaleras, mi madre no pudo alcanzarme. En el octavo día cuando la clase estaba terminando, los bultos en los músculos de mis piernas desaparecieron.
Shifu dijo: “Éste es el único pedazo de tierra pura que queda en el mundo humano. Esta clase de ambiente verdaderamente puede elevar la moralidad de los seres humanos y hacerla noble. Puede convertirlos en gente buena y cambiar a las personas muy malas y devolverlas a su mejor estado” (Exponiendo el Fa en el Fahui de Canadá).
Las enseñanzas me causaron una profunda impresión. De hecho, no hay tierra pura en nuestra sociedad actual. El único lugar donde uno puede encontrarlo es en Dafa. En nuestro grupo de estudio del Fa, no hubo conflictos ni luchas por intereses propios, solo paz y serenidad.
Muchos practicantes con los que nunca me había visto antes me ofrecieron mucha ayuda. Podía compartir con ellos mi confusión y mis problemas en la vida cotidiana, incluido el trabajo. Cada uno sinceramente ofrecía su ayuda y trataba de pensar desde mi punto de vista. ¡Era como si me estuvieran ayudando a eliminar las hilos que me unían a mis apegos!
No dañar a otros por beneficiarme
Shifu dijo en Zhuan Falun: “Cuando la naturaleza fo emerge, sacude al mundo de diez direcciones”.
Con la protección benevolente de Shifu, dejé ir mi ego y obtuve una vida nueva. He eliminado completamente mi mal comportamiento, especialmente la adicción a los juegos de computadora que había tenido durante casi veinte años.
Noté que mis manos se entumecían tan pronto como me ponía a jugar videojuegos. Entonces entendí de inmediato que no debería jugarlos.
Luego pensé en vender mi cuenta de juego, pero muchos practicantes estaban en contra de que yo hiciera esto. Un practicante veterano me dijo: "Déjame darte una analogía". Si un adicto a las drogas decide dejar de fumar, ¿por qué las vendería? ¿No dañaría a la gente que las compraría?”.
Estaba aturdido. Él tenía toda la razón. Cultivo Verdad-Benevolencia-Tolerancia y no debería dañar a otros. Pero me costó mucho borrar la cuenta. Cada vez que visitaba el sitio web del juego para eliminarlo, mi deseo de jugar se volvía loco. Pero persistí, y con la ayuda de otros jóvenes practicantes, lo logré.
Los juegos de computadora que solían ocupar mi mente ya no aparecían. Mi mente se volvió clara; el hábito de jugarlos fue completamente eliminado. Un amigo bromeó una vez: "¡Si puedes abandonar los videojuegos, dejaré de comer!". Es realmente difícil de creer, pero, como resultado de cultivar Dafa, ¡lo logré!
Me di cuenta de que había muchas cosas de las que tenía que ocuparme en mi vida cotidiana. También me di cuenta de lo egoísta que había sido. Ahora me guío por Verdad-Benevolencia-Tolerancia y paso más tiempo con mi familia. Cuando vieron cómo había cambiado, quedaron maravillados.
Los principios de Dafa me han permitido actuar de una manera más justa. Ahora tengo un buen control sobre mi futuro y sé cómo educar a mi hijo.
Dejé de luchar por la fama y el interés propio y de todo corazón me dediqué a ser un buen empleado. Ahora ayudo a otros y soy tolerante cuando encuentro conflictos. En mi tiempo libre, incluso reparo el equipo de la compañía, lo que le ahorra a mi empleador una gran cantidad de dinero.
Después de aprender Dafa, también devolví cosas que antes había tomado de mi compañía. Todos han sido testigos de mis cambios positivos.
Shifu dijo:
“Hay un estudiante que trabajaba en una fábrica de tejer en cierta ciudad de la provincia de Shandong; después de aprender Falun Dafa, les enseñó a refinar gong a otros empleados, como resultado, todo el aspecto espiritual de la fábrica se elevó. En el pasado, los empleados y operarios de la fábrica de tejidos todos se llevaban restos de toallas a sus casas. Después de aprender Falun Dafa, este estudiante no solo no se llevó más a su casa, sino que devolvió las que se había llevado anteriormente. Cuando los demás vieron esto, nadie se llevó más y algunos empleados incluso devolvieron a la fábrica las toallas que habían tomado antes; en toda la fábrica apareció esta situación” (Cuarta Lección, Zhuan Falun).
Solía agregar un pequeño margen de ganancia cuando mis parientes y amigos me encargaban que les comprara equipos electrónicos. Después de comenzar la práctica, me di cuenta de que no debería comportarme de la misma manera que antes y solo tomé la cantidad que había pagado. Cuando un compañero de trabajo intentó pagarme para mostrar su agradecimiento, lo rechacé. Pudo sentir mi integridad y bondad, lo que creó la oportunidad de salvarlo aclarándole la verdad.
Mientras escribía este artículo, me di cuenta de que todavía hay muchas áreas en las que me quedo corto y muchos apegos que no han sido eliminados. Sé que aún no estoy a la altura de los estándares de Shifu. Sin embargo, con Dafa arraigado en mi corazón, ¡seguiré esforzándome diligentemente!
En la sociedad actual, donde la moralidad está en constante declive y llena de la cultura del partido, muchos jóvenes nacidos en los años ochenta y noventa se han perdido en actividades cotidianas.
Tampoco están al tanto de la persecución que está teniendo lugar hoy en China. Eso es trágico. Los practicantes deben aprovechar el tiempo en esta etapa final de la rectificación del Fa para ayudarlos a comprender la verdad.
(Presentación para "Celebrar el Día Mundial de Falun Dafa" 2018 en el sitio web de Minghui)