(Minghui.org) La revista médica Paciente, una publicación de la Asociación Médica Finlandesa, tenía un artículo del 7 de febrero con el título: "¿De dónde vienen los órganos para trasplantes en China?". Discutía las preocupaciones expresadas en publicaciones médicas sobre la ética de trasplantes en China.
La revista médica Paciente, una publicación de la Asociación Médica Finlandesa, publicó un artículo el 7 de febrero de 2018 discutiendo la sustracción forzada de órganos en China.
"China no tenía un sistema de donación de órganos sino hasta finales del 2013. En el 2011, solo 37 personas se registraron como donantes. El sistema nacional de donaciones no ha tenido éxito en adquirir cantidades significativas de órganos para trasplantes, ya que, según las prácticas chinas tradicionales, la gente que fallece no debe tocarse luego de su muerte", dijo el artículo.
Esto hizo surgir muchas preguntas ya que un largo número de trasplantes ocurren en China cada año. A causa de esto, China ha admitido que usa a prisioneros ejecutados como fuente de órganos. El número de prisioneros ejecutados es solo una fracción del total de los trasplantes que se realizan en China.
Cada vez más evidencia sugiere que prisioneros de consciencia vivos, incluyendo practicantes de Falun Gong, se han vuelto víctimas de esta mala praxis.
La Coalición Internacional para Poner Fin a la Sustracción de Órganos en China se formó para atender este tema. Entre sus miembros se encuentran expertos en medicina, ley y bioética como Wendy Rogers, Profesora de Ética Médica en la Universidad de Macquarie, y la Abogada de Derechos Humanos Eeva Heikkilä.
"Después de que el reporte de investigación de 680 páginas se publicara en junio de 2016, se han convencido de que las amenazas sistemáticas de China hacia los disidentes y prisioneros de consciencia son reales", decía el artículo.
De acuerdo a un artículo publicado en la revista Caijing en el año 2009, entre el año 1993 y 2007, el número de trasplantes de hígado en China incrementó a 400 veces la cantidad inicial. "El crecimiento explosivo de trasplantes de hígado comenzó en el 2000, seis meses luego que la persecución a practicantes de Falun Gong comenzara. Los ponen en prisión por sus convicciones religiosas", decía el artículo.
Esto ha causado preocupación en revistas científicas internacionales. "En el año 2017, BMJ reportó sobre cómo la revista internacional del hígado removió el artículo chino publicado en el 2016, ya que los orígenes de los trasplantes de órganos usados en el estudio no se pudieron determinar". En particular, los autores del artículo no pudieron convencerles de que los órganos internos no fueron sustraídos a prisioneros vivos de consciencia, como se sospechaba en la revista".
De acuerdo con un artículo publicado en la revista de Ética Médica en el 2016, los problemas éticos de los trasplantes de órganos en China continúan creciendo. La revista Americana de Trasplantes publicó un artículo en el 2016 diciendo que se necesita evidencia independiente y objetiva de que China ha puesto fin a tales prácticas inmorales.
"La comunidad médica tiene la obligación profesional de boicotear académicamente los trasplantes de órganos chinos", dijo el artículo.
Se han realizado esfuerzos alrededor del mundo relacionados con este importante asunto. El 12 de diciembre de 2013, el Parlamento Europeo publicó una resolución (2013/2981) (RSP) anunciando su posición. Más específicamente: "el Parlamento hace un llamado a la Unión y a sus Estados Miembros a prestar atención al tema de la sustracción de órganos en China; recomienda que la Unión y sus Estados Miembros condenen los trasplantes de órganos públicos en China e informen a sus ciudadanos en China sobre este asunto; hace un llamado a la Unión a realizar una investigación completa y trasparente sobre las prácticas de trasplante chinas y considera que los perpetradores de tales prácticas inmorales deben ser hechos responsables por sus acciones".
La Cámara de Representantes de los Estados Unidos emitió una resolución similar, H. Res. 343, en junio de 2016. Además, Médicos contra de la Sustracción Forzada de Órganos (DAFOH por sus siglas en inglés) ha enviado una petición a las Naciones Unidas para que pongan un fin inmediato a estas brutalidades.
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