(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa, con la ayuda de mi madre cuando era niña. Han pasado más de 20 años, pero recientemente caí en la cuenta de que solo había estado dando vueltas alrededor de la entrada y ni siquiera había comenzado a cultivarme realmente.
Aunque crecí con el Fa, realmente no había obtenido el Fa. Cada vez que me desvío en mi cultivación, el Maestro me guía de regreso, con gran benevolencia, pero hasta hoy me resulta difícil permanecer constantemente diligente en la práctica.
Estoy profundamente avergonzada de mí misma. Escribo y comparto esta experiencia con el resto de practicantes con el objetivo de exponer mis apegos humanos y nociones para lograr, de esta manera, eliminarlos y ser más diligente en mi cultivación.
Eliminando los apegos
Estudio en la universidad y he formado muchos malos hábitos a lo largo de los años, que han acabado interfiriendo con mi estudio y asimilación al Fa. Sin darme cuenta, mezclo los métodos, pensamientos y motivaciones de la gente común cuando estudio el Fa.
Por ejemplo, a veces trato de resumir un párrafo o una oración cuando estudio el Fa, o me surge el pensamiento que ya he leído y entendido esta parte. Estos pensamientos incorrectos me interfieren. Entonces, cuando estudio el Fa, me siento inquieta e irritable. Comprendí que esto se había convertido en un problema para mi cultivación.
Cuando leía el Fa, en el fondo, intentaba comprender los significados más profundos detrás de las palabras y ahondar en los principios del Fa. Cuando estaba experimentando tribulaciones o pasando por pruebas de xinxing, estudiaba más el Fa, lo cual es por supuesto algo bueno, pero también he llegado a entender que mi motivación no es correcta.
Consideraba el estudio del Fa como la forma de resolver mis problemas, tener una vida cómoda, poder ostentar frente a otros practicantes y hacer que todo funcionara a la perfección. No estaba tomando el estudio del Fa como una oportunidad para asimilarme al Fa y cultivarme realmente. Como resultado, con frecuencia me sentía agotada a lo largo del día.
Solía pasar una buena parte del día estudiando el Fa, tras lo cual salía a hablarle a la gente sobre Dafa. Después asistía a clase. Esto me dejaba poco tiempo y casi sin energía para cumplir con mis tareas escolares. A menudo, me acostaba después de la medianoche o cuando ya no podía permanecer despierta. Por la mañana, me volvía a levantar a las 5:00 a. m. para estudiar el Fa. Esto se convirtió en mi rutina durante mucho tiempo.
Shifu me dio indicaciones en mis sueños de que había un problema en mi estado de cultivación. Lloré y le dije a Shifu que no sabía qué hacer, que había hecho todo lo posible, pero que no conseguía que funcionara.
Mi estilo de vida, se había convertido en algo inamovible: cuánto tiempo dedicar al estudio del Fa, cuántas cartas de aclaración de la verdad enviar, con cuántas personas hablar acerca de Dafa, cuántas horas para hacer mi tarea escolar, cuándo escuchar experiencias de otros practicantes, cuándo recitar el Fa, etc.
Sentí que gestionaba bien mi tiempo, pero en cuanto surgía algo extra que hacer, alguna otra tarea, me estresaba por completo: "¿Qué voy a hacer? ¿Cómo voy a terminar mi tarea hoy?”. Me irritaba fácilmente.
Sentía que no solo mi enfoque del estudio del Fa, sino que también la manera de lidiar con todo lo demás estaba mal, pero no me atrevía a cambiarlo. Centrándome en la cantidad y no en la calidad del estudio del Fa, comencé a sentirme agotada, y terminé aflojando en mi cultivación.
Mientras profundizaba buscando en mi interior y me preguntaba por qué estudiaba el Fa, llegué a la conclusión de que si no lo hacía podría fácilmente comenzar a perder la rectitud en mis pensamientos. Es muy fácil convertirse en una persona común. Es muy fácil adquirir interés en leer novelas, ver películas, comer alimentos deliciosos, maquillarse y vestir a la moda, etc. Sin darse cuenta, una puede sentirse cautivada por todas esas cosas que la gente habla y hace.
En ocasiones, cuando me dejaba llevar por todas estas cosas, me sentía vacía. Después lamentaba haber perdido el tiempo en eso. Varias veces, Shifu me guió de regreso al camino correcto, y me mantenía diligente por un corto período de tiempo antes de volver a dejarme llevar y caer otra vez en los viejos hábitos.
Hasta hoy, no le había presentado cara a la raíz de mi problema. Sentía gran miedo a quedarme rezagada en mi cultivación. Nunca me atreví, ni quise, cavar profundamente hasta encontrar verdaderamente mis apegos: a la fama, la reputación, el interés personal, el miedo y demás; para eliminarlos de una vez por todas.
Tampoco tomaba en serio el envío de pensamientos rectos y no limpiaba mi campo aunque todas estas cosas nocivas lo inundaran.
Eliminando las persecuciones en la cultivación
Un artículo de intercambio en Minghui.org, que leí recientemente, me ayudó a darme cuenta de un problema que me preocupaba. He estado estudiando el Fa desde que tengo uso de razón. He sido muy afortunada de haber tenido a Dafa para guiarme desde que era pequeña, pero a causa a las presiones fruto de la persecución, las influencias y el lavado de cerebro de las mentiras del partido comunista, no sabía cómo cultivar mis pensamientos y acciones de acuerdo con el Fa.
¿He cambiado desde que empecé a cultivarme? Me he hecho esta pregunta una y otra vez pero, de algún modo, nunca he podido encontrar una buena respuesta. Siento que mi estándar moral no es mejor que el del resto de la gente y que mi rendimiento académico, ciertamente, no es nada extraordinario.
Mis notas se ajustan al promedio, porque a menudo juego con mi celular en clase, leo novelas y no tomo las tareas en serio. ¿Cómo va a cambiar mi cuerpo si todavía estoy apegada a la comodidad y ni siquiera hago los ejercicios? Al igual que una persona común y corriente, estoy demasiado preocupada por perder peso y verme bien. No me considero, realmente, una practicante de Dafa.
Mi corazón no es recto, y no logro diferenciar mi ser verdadero del falso.
Poco a poco, los apegos y deseos del falso yo, se han ido mezclando y han interferido en mi cultivación. La rectitud de mi verdadero ser se ha visto sepultada, y los apegos del falso yo se han apoderado de mí, una y otra vez.
Aún así, el Maestro me ha levantado en todas esas ocasiones, me ha guiado y me ha colocado en el camino correcto. Tan pronto como mejoraba un poco, me ponía muy contenta y empezaba a presumir. En cuanto no hacía algo bien, el miedo a quedarme atrás y a ser perseguida volvía.
Shifu dijo:
“Esto es porque esta materia negra forma un campo alrededor de tu cuerpo, te envuelve justamente adentro y te aparta de la característica del universo Zhen-Shan-Ren, por lo tanto, la cualidad de iluminación de esta clase de gente probablemente se quede corta” (Zhuan Falun).
Cada vez que no hacía algo bien, miraba hacia adentro y encontraba miedo. Mirando aún más profundo, encontraba que albergaba dudas. Me incapacitaban para depositar mi fe completamente en el Fa y el Maestro. No podía reconocer que poseía un corazón de búsqueda.
Shifu siempre me ha estado cuidando y protegiendo. La primera vez que hablé con un extraño sobre Dafa en la calle, un oficial de policía se encontraba en las cercanías, pero no advirtió nada. Siempre encuentro seres predestinados esperándome, a la vuelta de la esquina, si quiero hablarle a la gente sobre Dafa.
Cuando no tengo tiempo para prepararme para un examen, mi mente se vuelve tan clara que recuerdo perfectamente cada palabra que leo, y los resultados son sorprendentemente buenos. Mi enfermedad, yeli, también desaparece tan pronto como la niego con pensamientos rectos. Shifu siempre me ha estado cuidando. Soy yo quien no lo ha hecho bien. Decepcioné al Maestro.
Eliminando mi apego al interés personal
Siempre pensé que no estaba muy apegada al interés propio. Eso fue hasta que, recientemente, un incidente me hizo observar este asunto más profundamente. Llegaba tarde a un examen porque me había confundido con el horario. Cuando me encontraba atrapada en un atasco de tráfico, decidí dejar todo en manos del Maestro. Al final llegué a tiempo, minutos antes de que empezara.
Mientras esperaba a que repartieran los exámenes, miré hacia adentro y pedí a Shifu que me ayudara a encontrar mi apego. De repente lo descubrí: Estaba apegada al interés propio, especialmente en cosas insignificantes.
Por ejemplo, la razón por la que casi llego tarde a la prueba, fue mi decisión de quedarme más tiempo en la cálida residencia universitaria, ya que no deseaba llegar con antelación y tener que esperar en el exterior, expuesta al frío, a que llegara la hora del examen. Pero de alguna manera, confundí los horarios y casi llego tarde.
Estoy muy preocupada por la pérdida y la ganancia, y planifico lo que hago para beneficiarme al máximo. Si no puedo idear un plan en el que claramente pueda beneficiarme, entonces espero y pospongo mis acciones; así evito cometer errores.
Este apego se vuelve aún peor cuando se trata de dinero. A pesar de que he cometido errores en este aspecto no he aprendido y no he renunciado, por completo, al apego a los beneficios materiales. Temo volver a cometer los mismos errores.
Me aferro firmemente al interés personal y no me atrevo a eliminarlo ni, tan siquiera, un poco.
Debido a que mi corazón no es recto, me asusto con facilidad y le temo a todo tipo de cosas. Me siento apegada a lo que la gente común cree, como las señales y los sueños. Por ejemplo, me da miedo que mis párpados tiemblen o que mi corazón lata más rápido.
Mientras escribo este intercambio, siento que realmente he llegado a explorar el fondo de mis problemas en la cultivación. No he estado cultivándome realmente. He estado tratando de ocultar mis apegos. Si no cambio mis nociones desde el núcleo, entonces no podré estudiar el Fa con una mente clara.
Tampoco he negado las viejas fuerzas por completo. No abandonar el ego es lo mismo que hacer las cosas de acuerdo con los arreglos de las viejas fuerzas. Tengo que rechazar completamente a las viejas fuerzas y sus arreglos, para finalmente encontrar mi verdadero yo. Entonces podré ir fortaleciendo continuamente mi conciencia principal, hasta obtener verdaderamente el Fa.
Necesito cultivarme diligentemente y dejar de presumir frente a otros practicantes. Abandonar esa noción insana.
Estas son mis experiencias y pensamientos personales. Por favor señalen cualquier cosa inapropiada.