(Minghui.org) Mi casa ancestral se vendió por 1.2 millones de yuanes en 2010. Según la ley de herencia china, yo tenía derecho a una parte del dinero. Sin embargo, mis hermanos y hermanas dividieron el dinero entre ellos sin decírmelo. Después un hermano me llamó y me lo contó. Me envió 10.000 yuanes que mi madre había dejado, como compensación.
Al oír las noticias, me quedé conmocionado e entristecido. Era el más joven de todos los hermanos. Siempre había sido muy bueno con ellos, pero en ese momento difícil de mi vida, no solo no me ayudaron, sino que me sacaron de la herencia. Sabía que podía ejercer mis derechos a través de medios legales, pero también sabía que como discípulo de Falun Dafa, no debía luchar por ganancia personal.
"Entonces nosotros, los cultivadores, aún menos debemos comportarnos de este modo; nosotros los cultivadores hablamos de seguir el curso natural: si algo te pertenece, no lo pierdes, y si algo no es tuyo, no lo consigues por más que luches. Por supuesto, esto tampoco es absoluto. Si todo fuera tan absoluto, tampoco existiría el problema de que el hombre cometa maldades, es decir que pueden existir algunos factores inestables. Sin embargo, nosotros, siendo personas que refinan gong, en principio los Fashen del Maestro se hacen cargo, y por más que otros deseen tomar tus pertenencias, no pueden. Por eso hablamos de seguir el curso natural; a veces piensas que esa cosa es tuya e incluso los demás te dicen que esta cosa es tuya, pero en realidad no es tuya. Probablemente consideres que es tuya, pero en última instancia no es tuya y, en medio de esto, se te pone a prueba para ver si puedes dejarlo o no; si no puedes dejarlo, entonces es un corazón de apego y se tiene que emplear este medio para quitarte este corazón de búsqueda de beneficios, es precisamente esta cuestión" (Séptima Lección, Zhuan Falun).
Pensé que tal vez este dinero no me pertenecía a mí; o tal vez les debía a mis hermanos del pasado; pero, aunque estuvieran equivocados, no debería manejarlo como una persona común porque soy un practicante. Un año después, cuando mi hermano me visitó y se disculpó por lo que hicieron, le dije: "Seguimos siendo familia. Olvidémoslo". Debido a la manera que traté este asunto, mis hermanos y hermanas apoyaron a Falun Dafa; 22 parientes renunciaron al partido comunista chino y sus organizaciones afiliadas.
Mi actitud cuando se infringió un derecho de autor
Fui el editor de un libro popular en 1996. En ese momento, las copias impresas del libro estaban casi agotadas. Unos años más tarde, me sorprendió descubrir que alguien estaba vendiendo mi libro en Internet. La persona incluso dejó su información de contacto. Podría haberle demandado por violar los derechos de autor y haberle exigido una compensación económica.
Pero para ese entonces, había empezado a practicar Falun Dafa. Shifu dijo:
"En medio del complicado ambiente de la gente común y de las fricciones de xinxing entre uno y otro, que puedas destacarte y salir, esto es lo más difícil. La dificultad está en sufrir pérdidas consciente y claramente en medio de las ganancias y los beneficios de la gente común, si se mueve o no tu corazón ante los beneficios personales, si se mueve o no tu corazón en las intrigas y contiendas entre unos y otros, si se mueve o no tu corazón cuando tus parientes y amigos encuentran sufrimientos, y como evalúas todo eso. ¡Ser una persona que refina gong es justamente así de difícil!" (Octava Lección, Zhuan Falun).
Mi corazón se calmó rápidamente después de leer este pasaje del Fa. En vez de resentirme con la persona, sentí lástima por él por tomar el riesgo de quebrantar la ley. Podría haberse metido en un gran problema legal. Una vez que dejé de lado el interés propio, todo continuó como si nada hubiera pasado.
Error en el cheque de pago
Salí de China cuando tenía sesenta años. Una vez en el extranjero, trabajé en un supermercado chino para ganarme la vida. Debido a que no hablo inglés, solo pude hacer trabajos menores en la parte de atrás de la tienda y recibí una paga mínima. Normalmente me pagaban alrededor de 300 dólares por semana, basado en el número de horas trabajados. Una vez recibí mi cheque de paga y el monto era más de 700 dólares. Sabía que había un error. También sabía que podía conservar el dinero y que nadie lo sabría, pero era un practicante.
Fui a ver el gerente y le dije que había un error en el pago del cheque. Al principio, pensaba que estaba protestando por ser mal pagado. Cuando le dije que le devolvía el dinero extra, se sorprendió y me lo agradeció. Al día siguiente, me dijo que era un error de contabilidad y que sería corregido.