(Minghui.org) El 12 de diciembre de 2018, la oficina de “Derechos Humanos, Libertad y Tolerancia” del gobierno canadiense organizó un foro para conmemorar el 70.° Aniversario del Día Internacional de los Derechos Humanos. El foro fue organizado por el Ministro de Asuntos Exteriores Chrystia Freeland.
La Asociación Canadiense de Falun Dafa fue invitada al foro, y su presidente, Li Xun, presentó al Ministro de Asuntos Exteriores una lista de 14 nombres de funcionarios comunistas chinos responsables de graves violaciones a los derechos humanos. Estos nombres incluían a funcionarios actuales y anteriores, incluyendo a Jiang Zemin, el exjefe del régimen comunista.
En una carta que acompañaba a la lista se pedía al gobierno canadiense que sancionara a estos violadores de los derechos humanos en virtud de la Ley de Víctimas de Funcionarios Extranjeros Corruptos, también llamada Ley de Magnitksy.
Violando el Pacto Internacional
La carta indicaba que los funcionarios enumerados eran responsables de graves violaciones a los derechos humanos, incluida tortura y ejecuciones clandestinas, contra personas que intentan ejercer y defender su libertad de religión, creencia, expresión y pensamiento, satisfaciendo así la subsección 4 (2) de la Ley. Las violaciones tenían como objetivo erradicar a Falun Gong, también llamado Falun Dafa, y a sus practicantes, en una campaña lanzada por el partido comunista chino (PCCh). Falun Dafa es una práctica espiritual china de antiguas tradiciones budistas que promueve los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia.
La persecución viola la ley china y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, del cual China es parte firmante. Las atrocidades son llevadas a cabo por una organización extrajudicial del PCCh similar a la Gestapo, conocida como la Oficina 610.
La persecución del PCCh a Falun Dafa es un crimen de proporciones masivas y ha sido reconocido por gobiernos y ONG en todo el mundo. Si bien muchos agentes del PCCh en China son perpetradores en esta operación, solo unos pocos han sido elegidos para esta presentación.
Principales líderes chinos en la lista de violadores de derechos humanos
Los funcionarios que figuran en la lista han sido seleccionados por su participación y su papel de liderazgo en estas atrocidades a los derechos humanos. Estas violaciones son tan graves y extensas que han ganado cierto grado de notoriedad y simbolismo. Los compiladores de la lista creen que las sanciones contra estos individuos serían las más merecedoras y efectivas para promover la causa de la justicia internacional y los derechos humanos.
La mayoría de los individuos enumerados ya no ocupan cargos públicos.Algunos han recibido juicios por sus violaciones a los derechos humanos, como Jiang Zemin y Luo Gan, quienes han sido acusados en Argentina por su papel en los crímenes de lesa humanidad cometidos contra los practicantes de Falun Dafa y se han emitido órdenes de arresto en ese país. Estos dos exfuncionarios, junto con Bo Xilai y Wu Guanzheng, también han sido acusados en España por su participación en el genocidio y la tortura contra Falun Dafa. Además, Zhou Yongkang y Bo Xilai están cumpliendo cadena perpetua en China por corrupción. La lista también incluye a otros que han sido sancionados por los actuales líderes chinos por razones aparentemente políticas.
Exponiendo las atrocidades y sus encubrimientos
La carta decía que la recopilación de materiales se basó en 18 años de minuciosas y detalladas investigaciones para ayudar al Ministerio de Asuntos Exteriores a tomar una decisión conforme a la Ley. Los materiales hablan de la naturaleza de la evidencia, el aparato de persecución, la cadena de mando, los crímenes contextuales de lesa humanidad y la participación individual.Representan un valiente y perseverante esfuerzo por exponer el encubrimiento en China y arrojar luz sobre todos los aspectos de la persecución, desde torturas y ejecuciones extrajudiciales en centros de detención hasta la sustracción forzada de órganos orquestada por el estado en hospitales militares y civiles chinos.
En una conferencia de prensa, el presidente de la Asociación de Falun Dafa, Li Xun, citó un caso de la ciudadana canadiense Sun Xi, quien ha estado encarcelada en China durante 21 meses por su creencia en Falun Dafa. También dio 11 nombres de canadienses o familiares de ciudadanos canadienses que han sido arrestados en China por creer en Falun Dafa.
Según Peter Kent, diputado y presidente de Amigos de Falun Dafa, lasviolaciones de los derechos humanos están empeorando en China y el mundo debería usar más la Ley Magnitsky, ya que "se ha demostrado que la Ley es una herramienta eficaz para sancionar a los implicados de violaciones a los derechos humanos”.
Sanciones de la Ley Magnitsky
Esta no es la primera acción dirigida a los violadores comunistas de los derechos humanos. El 3 de diciembre, Michael Danby, un parlamentario australiano del Partido Laborista presentó al Congreso la Ley de Derechos Humanos y Corrupción Internacional (Sanciones de la Ley Magnitsky) de 2018.
El proyecto de ley envió un mensaje claro a los violadores de los derechos humanos de que sus delitos se enfrentan a investigaciones de la sociedad internacional.
La Ley Magnitsky se convirtió en ley en los Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido. Si Australia aprueba la ley, se prohibirá a los infractores de los derechos humanos ingresar a Australia, se congelarán sus activos y se prohibirán que sus hijos asistan a colegios y universidades en dicho país.
Los Estados Unidos aprobaron la Ley Global Magnitsky de Responsabilidad de los Derechos Humanos en 2016. El presidente Trump firmó una orden administrativa para sancionar a 13 violadores extranjeros de derechos humanos y funcionarios corruptos el 21 de diciembre de 2017.
El secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Mnuchin, dijo que el Tesoro de los Estados Unidos congelaría sus activos, condenaría abiertamente los crímenes que cometieron y los obligaría a pagar por sus delitos.
La reciente reafirmación de la Ley Magnitsky en Australia y Canadá ciertamente afectará a los funcionarios involucrados en la persecución de Falun Dafa en China. Serán responsables de sus acciones cuando violen la ley internacional de los derechos humanos.
Los violadores de los derechos humanos, desde los responsables políticos hasta los oficiales que siguen órdenes, finalmente enfrentarán un juicio legal y una condena.
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