(Minghui.org) Se ha descubierto recientemente que la Sra. Yang Aihua falleció a finales de 2012 o a principios de 2013, un año después de ser liberada de un centro de lavado de cerebro local.
Esta vecina de la ciudad de Shouguang, fue tomada como objetivo por las autoridades por negarse a renunciar a practicar Falun Dafa, una práctica para mejorar cuerpo y mente, basada en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.
La Sra. Yang testimonió que Falun Dafa le devolvió la salud y la capacitó para disfrutar de la vida.
Solía sufrir de infinidad de enfermedades, entre las que se contaban una enfermedad crónica de la piel que le provocaba que todo el cuerpo se le cubriera de erupciones. Tenía que evitar 28 tipos de comida para no desencadenar reacciones adversas. Nada parecía ayudarla a mejorar. Se volvió irritable al presenciar cómo su cuerpo se deterioraba día tras día. Empezó a perder los estribos con facilidad. Discutía con todo el mundo a toda hora.
Todos sus problemas de salud desaparecieron en cuanto empezó a practicar Falun Dafa, en 1996. Poseer un cuerpo saludable nuevamente elevó su ánimo. Le entusiasmaba la idea de poder disfrutar de cualquier comida, sin preocupaciones. Decía que Falun Dafa le había concedido una segunda vida.
La Sra. Yang no vaciló en su fe cuando el régimen comunista chino lanzó una campaña nacional contra Falun Dafa, en julio de 1999. Fue a Beijing, hasta en tres ocasiones, para apelar en favor de Falun Dafa.
Durante su tercer viaje, el oficial Ma Chunlan del gobierno local, ordenó que la arrestaran y la mantuvieran detenida en la oficina de planificación familiar local. Allí sufrió privación del sueño durante varios días consecutivos. Además, le propinaban palizas y la insultaban. La liberaron a los 40 días, después de que su familia pagara 5.000 yuanes. Ma envió a personas a saquear el hogar de la Sra. Yang. Confiscaron el único televisor y el único DVD que poseía la familia.
Aunque varios agentes de la comisaría de Shouguang se presentaron en su casa el 24 de octubre de 2009, logró escapar.
En noviembre de 2011, la policía la arrestó irrumpiendo en casa de su vecina, mientras la visitaba. La condujeron a un centro de lavado de cerebro, una instalación extrajudicial destinada a la detención de los practicantes de Falun Dafa.
Todo el tiempo que permaneció en el centro de lavado de cerebro lo hizo atada a una silla, con las manos esposadas y los pies encadenados. Fue debilitándose con el paso de los días. Hasta que sus familiares no pagaron la extorsión, unos 40.000 yuanes, no pudieron llevársela de nuevo a casa.
La Sra. Yang Aihua murió aproximadamente un año después de abandonar el complejo de lavado de cerebro. Las fechas exactas de su liberación y de su muerte todavía deben ser investigadas.