(Minghui.org) A menudo vamos a los mercados a repartir materiales y a contarle a la gente sobre la persecución por parte del partido comunista chino (PCCh) a Falun Dafa. Un día, fuimos a otro condado.
Cuando estábamos comenzando a distribuir volantes, un hombre nos reportó. Una patrulla de policía se detuvo y los oficiales nos llevaron a la comisaría local. En el camino, enviamos pensamientos rectos.
Allí nos preguntaron: “¿Dónde consiguen estos materiales?”. Les respondimos: “Nosotros los hacemos”.
Un oficial nos interrogó: "¿Por qué llevan tantas copias?". Una practicante dijo: "Hacemos muchas para poder entregárselas a más personas". La información que tienen es la verdad detrás de la persecución. Mucha gente ahora está decepcionada y enojada con el PCCh. Maldice al partido, pero porque ha sido engañada por su propaganda, también maldice a Falun Dafa".
Además explicó: "Falun Dafa es una práctica espiritual recta. El Maestro Li nos enseña a ser amables y a tener valores morales para poder ser mejores personas. Esto también beneficia a los que nos rodean”. De repente, un joven oficial se puso de pie y dijo: "¡Creo que ustedes son buena gente!”.
Les explicamos por qué practicamos Falun Dafa y desmentimos muchas de las afirmaciones difamatorias del partido contra la disciplina. Les contamos nuestras historias y cómo nos beneficiamos.
Señalé a una practicante y manifesté: "Mírala. Antes de comenzar a practicar, tenía más de diez enfermedades. Los médicos le dijeron que solo le quedaban unos pocos años de vida. Después de hacerlo, todas sus enfermedades desaparecieron. ¿Les parece que esté enferma?”.
Dije: "Todos saben que el PCCh es muy corrupto y que esta situación no puede continuar". Todos debemos distanciarnos para no estar implicados cuando colapse". Algunos de los oficiales asintieron con la cabeza.
Cuando un policía preguntó:"¿Tienen miedo?". Le respondí: "Solo tratamos que la gente conozca la verdad. No estamos haciendo nada malo, entonces ¿a qué debemos temerle?".
Me di cuenta que era casi mediodía, así que expresé: "Déjennos ir. No hemos quebrado ninguna ley. ¿No deberían tratar de atrapar criminales? ¿Por qué nos trajeron aquí?”.
Uno que parecía estar a cargo dijo: “Fueron informados, necesitamos continuar el proceso. No se preocupen. Les serviremos el almuerzo. Los dejaremos ir una vez que hablemos con mi supervisor”.
Al rato nos trajeron alimentos. Después de comer necesitamos usar el baño. Un joven policía estaba parado en el pasillo, y le pregunté: “¿Crees que debemos irnos?”. Y respondió: “Por favor, no lo hagan. Seré responsable por ello”.
Le manifesté: “Nosotros también necesitamos ser responsables por ustedes. Por favor renuncia a tu membresía al PCCh y a sus organizaciones afiliadas. No querrás estar implicado cuando las cosas se derrumben".
Expresó: “¡De acuerdo, renunciaré ahora mismo!”. Y le dije: “Por favor recuerda que `Falun Dafa es bueno´”. Respondió: “Lo recordaré”.
Después de un rato entró y señaló: "Por favor, tomen sus bolsos y caminen hacia el sur". Salimos seguros de la comisaría y más agentes entendieron la verdad detrás de la persecución.