(Minghui.org) Constanza, una de las ciudades más antiguas de Rumania, tiene el puerto más grande en el Mar Negro y se llena de turistas en el verano. Los practicantes de Falun Dafa vinieron a Constanza los días 29 y 30 de julio para contarle a las personas acerca de la antigua práctica de ejercicios y meditación de la Escuela Buda.
En un parque cerca del puerto Tomis, los practicantes colocaron carteles sobre los beneficios de Falun Dafa y la persecución por el régimen comunista a los practicantes en China. En un estand les contaban a los peatones sobre la práctica y respondían a las preguntas de las personas, mientras que otros demostraban los ejercicios de Dafa.
Carteles creados por los practicantes de Falun Dafa en un parque en Constanza, Rumanía. No muy lejos, hay practicantes que hacen los ejercicios de Falun Dafa.
La persecución en China es ‘absurda’
Muchos turistas y residentes locales leyeron los folletos. El Sr. Ungur, dueño de un restaurante, dijo que los funcionarios comunistas en China que persiguen a Falun Dafa son “despiadados ... no tienen derecho a privarlos de su credo, porque todo el mundo tiene libertad de creencia”.
Un hombre de cuarenta años dijo que nadie puede matar a otros y que "lo que hace el partido comunista chino es un crimen".
Un turista de Tulcea y su sobrina, estuvieron de acuerdo en firmar la petición pidiendo al gobierno rumano y a las Naciones Unidas que ayuden a detener la persecución en China.
Otra mujer que firmó la petición con lágrimas en los ojos, dijo: "Esto es absurdo", refiriéndose a la persecución. Luego agregó "el partido comunista de China ha dañado a demasiadas personas y es muy peligroso si no tomamos medidas. Debemos detener la persecución a los practicantes en China".
La gente lee los materiales y firma la petición para poner fin a la persecución en China.
"Debemos dejar que más personas conozcan esto"
Un estudiante universitario de sociología que estudia en el país vecino de Moldavia dijo que es difícil comprender que en la actualidad el régimen chino continúe asesinando a los practicantes de Falun Dafa por sus órganos. "Creo que debemos hacer que más personas conozcan esto a través de Internet para que todos puedan decir no a esta atrocidad".
Valentin Vasile, electricista, fue al parque con sus amigos y dijo: “La sustracción forzada de órganos puede ocurrir en un régimen totalitario”. Y agregó: "Sé que algunas personas pueden considerar trivial firmar una petición. Pero no estoy de acuerdo con ellos, porque cada voz cuenta”.
Muchas personas estaban interesadas en aprender los ejercicios de Dafa, incluyendo una niña que le preguntó a sus padres si podía aprender también. Cuando asintieron, se unió a otros niños para aprender los ejercicios.