(Minghui.org) En la Escuela Zen, hay una frase koutouchan (pinyin) o "Lip Zen", que hoy se interpreta como "latiguillo" o "muletilla".
En la Escuela Zen, esta palabra se refiere a monjes que son muy elocuentes en la teoría budista, pero que no practican la cultivación genuina. Aquí quisiera compartir cómo identifico los apegos detrás de nuestras "muletillas" diarias desde la perspectiva de la cultivación en Dafa.
Como las personas varían en personalidad, experiencia, medio ambiente, nociones, antecedentes educativos, etc., cada persona puede tener sus propias muletillas específicas.
Tomando como ejemplo a cierta practicante mayor, esta practicante hablaba a menudo de su pasado, desde el momento de su nacimiento hasta hoy: cuántas dificultades había experimentado en la infancia; lo mal que sus padres la trataban; la mala suerte de casarse con un mal marido; cómo su suegra y marido se aprovecharon de ella; lo mal que su nuera la trataba; estar desempleada en este momento; y qué vida tan grandiosa viven los demás. Su muletilla es "Soy tan lamentable".
Shifu dijo:
“Él utiliza los principios de la gente común para evaluar el xinxing del fo, ¿cómo se puede evaluar eso? Utilizar el estándar de la gente común para considerar cosas de niveles altos, ¿cómo puede funcionar? Por eso, frecuentemente aparecen problemas como este; al considerar las amarguras en la vida como injusticias contra uno mismo, muchas personas se derrumban y caen hacia abajo”. (Cuarta Lección, Zhuan Falun)
Compañeros practicantes, por favor, ¡reflexionen sobre eso! Verse a uno mismo lastimosamente equivale a la esperanza de ganar la comprensión de otros. Se basa en el deseo de felicidad en este mundo terrenal. Esta es una manifestación del sentimentalismo.
Como practicantes de Dafa, debemos ver las cosas desde la perspectiva del Fa, justo: ¡Shifu me escogió entre miles de millones de personas, cuán afortunado y honrado soy! Somos practicantes de Dafa durante el período de la rectificación del Fa, viviendo al mismo tiempo que Shifu, en la misma edad y en el mismo mundo, ayudando a Shifu a rectificar el Fa. Esta es la mayor gloria. ¿Por qué tomaríamos nuestra situación como "lamentable"?
Deberíamos decir: "¡Me siento muy honrado de ser un practicante de Dafa!".
Durante las reuniones de intercambio de experiencias, algunos practicantes a menudo dicen: "¡Escúchame!".
Esta frase de muletilla es una manifestación de la cultura del partido comunista chino (PCCh) y expone el apego del hablante a sí mismo y, a veces, una mentalidad de impaciencia y combatividad.
Debemos permanecer tranquilos, pacíficos, ser cordiales y respetuosos mientras compartimos nuestras experiencias de cultivación entre nosotros. Debemos mostrar una actitud sobresaliente como practicantes de Dafa y no interrumpir o forzar nuestras opiniones sobre los demás cuando están hablando. Es útil cuando se trata de salvar a la gente, también. Por otra parte, nuestro comportamiento afectará a las generaciones futuras, por lo que debemos tratar este asunto con absoluta seriedad.
He notado que muchos de nuestros practicantes locales usan lenguaje sucio, especialmente algunos practicantes masculinos. Las palabras sucias salen de sus bocas cuando encuentran problemas e interferencias o cuando se enojan. Algunas de estas palabras se entremezclan con palabras de odio y queja. Algunos practicantes dicen que están tan acostumbrados a usar un lenguaje asqueroso que ni siquiera son conscientes de eso.
Este es un muy mal hábito. También es una especie de cultura del PCCh. Destruye la imagen de los practicantes de Dafa y afecta negativamente a la salvación de la gente. Como practicantes de Dafa, debemos ser estrictos con nosotros mismos en la cultivación del habla y no debemos usar malas palabras.
He escuchado a compañeros practicantes usar muchas otras frases o muletillas, como "¿no es molesto?", "lo suficientemente bueno", "tan aburrido", "insípido", etc.
Si miramos en nuestro interior, podemos identificar muchos apegos detrás de estas frases. Todos son apegos que debemos soltar en nuestra cultivación.
Cultivemonos diligentemente y vivamos la gracia salvadora de Shifu.
Heshi.