Falun Dafa Minghui.org www.minghui.org IMPRIMIR

Experimentando las maravillas de la cultivación

Mayo 3, 2017 |   Por una practicante de Falun Dafa de la provincia de Hubei, China

(Minghui.org) Recientemente, me visitó una compañera practicante de unos 70 años, vestida con ropa liviana. Me dijo que no tenía frío y que usaba estas prendas aún en el frío del invierno. Ese día, sentía la necesidad de usar un abrigo y sólo tengo 50 años.

Ella había cambiado en los últimos seis meses y parecía más joven que su edad. Me dijo que se trataba del poder de Falun Dafa.

Su rutina diaria incluye levantarse a las 2:30 a.m. para meditar durante dos horas. Después de la meditación envía pensamientos rectos y lee una lección de Zhuan Falun. Luego sale a aclarar los hechos sobre Falun Dafa a la gente, y por la tarde lee dos o, a veces, tres lecciones de Zhuan Falun.

Me dejó impresionada y mis ojos se llenaron de lágrimas. Sentía que me había quedado atrás en mi cultivación.

Ella tenía prisa y se fue después de nuestra conversación. Me di cuenta que Shifu había arreglado la reunión, ya que mi xinxing no estaba mejorando. Había una gran diferencia entre el nivel de cultivación de esta practicante y el mío.

Esforzándome por volverme diligente en la cultivación

Reflexioné sobre mi reciente camino de cultivación, que había sido extremadamente difícil. No me podía levantar para el envío de pensamientos rectos en la mañana y me quedaba dormida después de que sonaba la alarma. Antes de darme cuenta, había pasado una hora, así que me levantaba sintiéndome triste. Trataba de ponerme al día con mi práctica en la noche, pero entonces me sentía somnolienta mientras leía el Fa.

Sabía que este estado no era bueno y me esforcé por ser diligente. Miré hacia adentro y me di cuento que no había eliminado mis apegos a la fama, ganancias y emociones. También tenía el apego a hacer cosas, ostentar, competir y buscar comodidad.

Me volví determinada en enviar pensamientos rectos para atravesar estos obstáculos y le prometí a Shifu que sería capaz de superar este desafío. Les dije a las viejas fuerzas que sólo seguiría el camino que Shifu había arreglado.

La perseverancia trae resultados

Cuando hacía la meditación sentada y enviaba pensamientos rectos empezaba a luchar con el dolor de las piernas después de 30 minutos, y no podía llegar a tranquilizarme. Pensé que había sufrido varias tribulaciones durante la meditación. Me di cuenta que me había llenado de ideas humanas y que no me había iluminando al poder y a la magnificencia del Fa. Estaba decidida a mejorar de allí en adelante.

También estaba decidida a mejorar en mi estudio del Fa. Anteriormente no podía quedarme a leer una lección completa sin volverme somnolienta. Ese día leí más de cinco lecciones y no me sentí con sueño.

Antes de dormir, programé mí alarma a las 3:00 a.m. y le pedí a Shifu que fortaleciera mis pensamientos rectos, para que pudiera hacer los ejercicios. Las viejas fuerzas pusieron un pensamiento en mi mente –no te puedes levantar tan temprano, ¡estarás adormilada! Eliminé ese pensamiento. Me sentí lúcida e hice la meditación sentada durante una hora y cuarenta y cinco minutos, seguida de 30 minutos de envío de pensamientos rectos.

Esta fue la primera vez que pude atravesar dos horas de estar sentada en meditación. No me sentí cansada o soñolienta, y llegué a una tranquilidad que nunca antes había experimentado. Le agradecí a Shifu por haberme fortalecido. Esto realmente reflejó lo que había dicho Shifu:

“La cultivación depende de uno mismo, el gong depende del Shifu”. (Zhuan Falun)

Me di cuenta que, si estamos decididos a cultivarnos, Shifu puede hacer cualquier cosa por nosotros.