(Minghui.org) Mi hermana tenía osteoporosis y necesitaba estar en la cama durante mucho tiempo. El médico le aconsejó que se expusiera al sol durante largos periodos cada día, lo cual requería que subiera escaleras con frecuencia. Cada vez que se movía, tenia que tener cuidado con los golpes o caídas para evitar alguna fractura de huesos.

Si esto no era suficiente, además, sufría de intensos dolores de cabeza. A pesar de la gran cantidad de analgésicos que consumía cada día, la situación no mejoraba y estaba muy frustrada.

Su marido, por otro lado, tenía una enfermedad hereditaria de quistes en los riñones. Cuatro de sus nueve hermanos murieron entre los 45 y 65 años. Se sometió a una cirugía, durante la cual más de cien quistes tuvieron que ser drenados uno a uno con una aguja. Fue muy doloroso.

Desgraciadamente, aún no había terminado. Más quistes se reprodujeron años después, y tuvo que recibir diálisis. Mi hermana estaba allí cada día, y vio bolsas y bolsas de fluido y sangre pasando. Estaba desesperada y lloraba a menudo. En menos de dos años de la cirugía, los quistes estaban de nuevo, y por todo el riñón, y tuvo que ir al hospital una y otra vez.

El médico le dijo a mi cuñado en agosto de 2015 que su enfermedad era incurable y que debería someterse a diálisis por el resto de su vida. Estaba desesperado. A menudo estaba fatigado, teniendo que estar sentado continuamente.

Momento crucial

Cuando los visité les dije que no se rindieran y les sugerí: “Quizás Falun Dafa pueda ayudarlos” ya que muchas persona han obtenido mejoras en la salud después de aprender Dafa.

Les hablé sobre Dafa en el pasado, pero no me escucharon. “Falun Dafa es rechazado por el gobierno. No puedo hacerlo”, dijo mi hermana. Después, probó con otras prácticas de qigong, las cuales la desestabilizaron emocionalmente. Al final, sin embargo la visité. Le sugerí que escuchara la música de Falun Dafa. Que la ayudaría mucho.

Después le dije que escuchara las Lecciones del Maestro Li, el fundador de Falun Dafa. Accedió. Siguiendo mi consejo, recitaba a menudo: “Falun Dafa es bueno” y “Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”.

Poco después, mi hermana mejoró significativamente. Pidió a su marido que escuchara las Lecciones de audio con ella, y le dijo que “Las enseñanzas de Falun Dafa nos hace ser mejores personas. Es opuesto a la propaganda del partido”.

Considerándolo y viendo que la práctica no costaba dinero ni causaba ningún dolor, aceptaron mi recomendación.

La pareja comenzó a escuchar las Lecciones de audio cada día y después empezaron a hacer los ejercicios. En pocos días, mi cuñado se sentía con más energía y estaba muy feliz.

Dos meses después, fueron de vacaciones, algo que nunca hubieran imaginado antes, “Incluso subimos a una montaña, y fui el primero en llegar a la cima” dijo con orgullo.

“Estamos muy contentos que nos hayas trasmitido la práctica” me dijo mi cuñado. “¡Y gracias a Falun Dafa, por todo!”.