(Minghui.org) Quisiera contar tres acontecimientos milagrosos que experimenté en mi familia, y que no hubieran tenido lugar de no ser porque practico Falun Dafa.
Un día de noviembre de 2004, después de salir del trabajo, mi hija, caminaba por la acera cuando de repente un autobús la arrolló. Cuando el vehículo logró frenar, ella quedó debajo. Cuando salió gateando de debajo del autobús, las personas que habían presenciado el accidente se quedaron asombrados de que todavía siguiera con vida e incluso que ¡no hubiera sufrido ni un solo arañazo!
El Maestro dijo:
“¿No les he dicho que cuando una persona practica, toda la familia se beneficia?”.
(Exponiendo el Fa en el Fahui de Australia)
Creo que el Maestro Li Hongzhi, el fundador de Falun Dafa, protegió a mi hija, y le estaré eternamente agradecido por esto. Ella también empezó a practicar Falun Dafa más tarde, en el verano de 2010.
El jefe de mi marido le pidió que le diera forma a una pieza de metal en el torno. Era un objeto circular de 250 centímetros de diámetro y 40 kilogramos de peso. La velocidad de rotación del torno estaba en unas 1.000 revoluciones por minuto. Mientras trabajaba en la pieza, de repente, ésta salió volando hasta chocar contra su costado izquierdo, golpeando su pecho y abdomen. Sus colegas se asustaron. Sin embargo, ni siquiera sangró. Cuando lo examinaron solo presentaba algunos arañazos leves en el pecho y en el estómago. Tampoco sufrió ningún tipo de lesión interna. La gente dijo que los dioses lo habían protegido. Bajo circunstancias normales, una persona habría salido despedida debido a la violencia del golpe y habría resultado mutilada. Muchos practicantes de Falun Dafa saben que el Maestro Li los protege de la adversidad. Estoy muy agradecida al Maestro por salvarle la vida a mi marido. .
Mi marido tiene 60 años y hace algunos días se despertó encontrándose mal. Mostraba los síntomas propios de una embolia cerebral (derrame cerebral). Sus piernas y sus pies estaban rígidos, su boca se torció, y no podía pronunciar con claridad.
Algunos practicantes sintieron que había factores de otras dimensiones que estaban interfiriéndole. Enviamos pensamientos rectos para desintegrar todos esos elementos negativos, le pedimos ayuda al Maestro y empezamos a mirar hacia dentro.
Mi marido descubrió muchos apegos: envidia, mentalidad competitiva, resentimiento; además de los apegos a guardar las apariencias y a beneficios. También encontró que cuando leía el Fa, realmente no lo estaba absorbiendo. Tampoco hacía los ejercicios correctamente, ni podía soportar las críticas. Después de tres días mirando hacia dentro, todos los síntomas desaparecieron.
Antes de practicar Falun Dafa, sufría enfermedades cardíacas, complicaciones ginecológicas y reumatismo grave. En 1991, me sometí a una cirugía mayor para extirpar un tumor de mi útero. En 1994, volví a desarrollar tumores en mis ovarios. Me desesperé, no sabía qué hacer. Tenía mucha experiencia como paciente y sabía que esto no se me curaría en un hospital.
Probé muchos qigong, pero solo empeoraron mis enfermedades. Poco después de empezar a practicar Falun Dafa, en marzo de 1996, todas mis enfermedades desaparecieron. No tenía palabras para expresarle al Maestro Li, la gratitud que sentía.
Mi marido empezó a practicar en 1997, después de presenciar los cambios milagrosos en mi estado de salud. Él también recuperó su salud, y dejó de sufrir resfriados y fiebres frecuentes. Se convirtió en una persona mejor y también mejoró su estándar moral.