(Minghui.org) Me siento extraordinariamente afortunado y agradecido por ser practicante de Falun Dafa durante el período de la rectificación del Fa. Mirando hacia atrás, a mi camino de cultivación, llego a comprender que cada paso que he dado lo hice con la protección del Maestro.

Transformando una situación complicada

Nos reunimos varios practicantes de las áreas rurales cercanas en vísperas del Año Nuevo Chino y compartimos experiencias. Se intercambió sobre cómo podemos estudiar bien el Fa, cómo mejorar nuestro carácter y la mejor forma de aclarar los hechos a la gente de la localidad.

Muchos practicantes ya se encontraban allí cuando llegué y advertí que un practicante, el Sr. Hua, estaba contactando a practicantes a través de su celular y facilitándoles una gran cantidad de detalles, durante estas llamadas.

“¿Por qué trajo su celular?”, le pregunté: “hay mucha gente aquí, necesitamos prestar atención a la seguridad de estas personas”.

Me respondió que de no ser por su celular, muchos practicantes, incluyéndome, no habrían conseguido encontrar este punto de encuentro. Le aclaré que lo habríamos podido encontrar sin su ayuda.

Este practicante me dijo que si esto me había hecho preocupar tanto, debería irme y entonces, básicamente, me ordenó que me marchara. No supe qué responder, y en cuanto volvió a repetírmelo, me marché, a pesar de que algunos practicantes intentaron detenerme.

En ese momento, me sentí muy mal, y mientras las lágrimas corrían por mis mejillas le dije al Maestro: “Maestro, sé que no debería haberme ido pero cómo debería haber reaccionado ante una situación así”.

Entonces estas palabras del Maestro resonaron en mi cabeza:

“Siendo un practicante de gong, con las personas que tienen conflictos contigo y con quienes te humillan frontalmente, no sólo debes actuar con Ren, sino que debes tener una actitud noble, e incluso agradecerles. Si él no hubiera tenido el conflicto contigo, ¿cómo podrías elevar tu xinxing? ¿Cómo podrías incrementar tu gong y transformar sin sufrimiento la materia negra en materia blanca?”. (Falun Gong).

Poco a poco me fui tranquilizando y recordé lo que el Maestro explicó en Exponiendo el Fa en el Fahui de Singapur:

“Por eso les digo que cuando se enfrenten con un conflicto, cualquiera que sea, o cuando se sienten perturbados e incómodos internamente, siempre deben buscar la causa internamente. Puedo garantizarles que el problema yace en ustedes mismos”.

Las palabras del Maestro me ayudaron a comprender que debía calmarme y mirar hacia dentro.

“Mis palabras no fueron bondadosas”, pensé. "Tengo el apego de competitividad y no puedo aceptar las críticas. No me he cultivado bien durante estos años”.

Me sentí muy avergonzado y me pregunté cómo debía haberse sentido el Sr. Hua después de que me marché. Pensé que debía pedirle perdón. Fui a verlo al día siguiente y le pedí que disculpara mi actitud del día anterior. Se disculpó también y desde entonces hemos estado cooperando bien.

Ayudando a la gente a renunciar al PCCh

El Maestro nos enseñó en Dejen ir los corazones humanos, salven a la gente del mundo:

“Especialmente los Dafa dizi en China continental, cada uno debe salir a esclarecer la verdad, y hacer que “las flores florezcan por todas partes”, sin omitir ningún lugar donde haya gente”.

Después de ser liberado de un campo de trabajos forzados en mayo de 2005, empecé a aclarar la verdad sobre Falun Gong y a animar a la gente para que renunciaran al partido comunista chino (PCCh) y a sus organizaciones afiliadas. Una vez que aprendí como tenía que hablar con la gente, conseguí que muchos renunciaran al PCCh.

Comprendi que las estaciones de autobuses, los mercados, los transportes públicos, etcétera, eran buenos sitios para aclarar la verdad. A veces, todavía me encuentro con gente que me insulta, o intenta llevarme a la comisaría de policía. Siempre recuerdo lo que el Maestro explicó en El Fa rectifica el cosmos de Hong Yin II:

“La compasión puede disolver Cielo y Tierra y traer la primavera

Los pensamientos rectos pueden salvar a la gente en el mundo”.

En vísperas del Año Nuevo Chino la mayoría de la gente de las zonas rurales cuelga carteles con pareados (poemas) de Año Nuevo, en las entradas de sus casas.

Tomé un autobus y dije: “Estamos repartiendo pareados de Año Nuevo. Por favor, llévenlos a sus casas y tengan un Feliz Año Nuevo. ¿Qué les parecen?”. Todos respondieron: “Sí”.

Mientras los entregaba les hablaba sobre algunas de las imágenes que aparecían en los carteles. En ellos se leían las palabras: “Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”, les pedí que los colgaran en las paredes de sus casas e intentaran vivir acorde a esas palabras. Les sugerí vivir en armonía con sus familiares. También les dije que esto les traería buena fortuna. Todos quisieron llevarse un pareado.

“En connivencia con el PCCh”, continué: “Jiang Zemin, el ex lider, ha estado persiguiendo a los practicantes de Falun Dafa que creen en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia”.

Proseguí: “Cualquier persona que sea miembro del PCCh o de sus organizaciones afiliadas forma parte de él. ¿Debe la gente ser culpada injustamente por los crímenes del PCCh? Por eso, por favor, renuncien a su membresía y no se verán implicados cuando el partido sea eliminado”.

Al final, mucha gente renunció al PCCh.